El Rey Juan Carlos ha generado un auténtico revuelo mediático con sus sendas demandas a Miguel Ángel Revilla y Corinna Larsen. La primera fue anunciada el pasado 1 de abril a través de su abogada, mientras que de la segunda nos hemos enterado en los últimos días. ¿Por qué ahora? ¿Qué ha empujado al padre de Felipe VI a iniciar distintas contiendas legales y estar de nuevo en el foco de la noticia?

El Rey Juan Carlos saluda

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Don Juan Carlos demanda al ex Presidente de Cantabria por difamarle en su derecho al honor. Emplaza al político a un acto de conciliación para evitar el litigio y le pide una indemnización que asciende a los 50.000 euros, así como la rectificación en los mismos medios donde realizó las calificaciones que son tildadas por este de "expresiones injuriosas, difamantes y oprobiosas".

Respecto a la demanda de Corinna Larsen han trascendido unos pocos detalles. Se sabe que también es por vulneración al honor y no solo la empresaria alemana es destinataria de esta acción judicial, también su abogado, Dante Canonica. El letrado de origen suizo fue el que creó la sociedad Lucum. 

El principal motivo que ha empujado al Rey Juan Carlos a iniciar una batalla legal sin precedentes

El tema está en boca de todo, generando un sinfín de reacciones, pero... ¿Qué ha sido lo que verdaderamente ha motivado a don Juan Carlos a iniciar estas acciones? Según apunta 'Informalia', el origen tiene como foco unas imágenes tomadas a la Princesa Leonor en un centro comercial de Punta Arenas, Chile.

Las instantáneas fueron tomadas durante su crucero de instrucción a bordo del buque escuela 'Juan Sebastián de Elcano'. Fueron captadas a finales del mes de marzo a través de las cámaras de seguridad de un centro comercial y se distribuyeron a distintos medios locales. 

Juan Carlos I el pasado mes de octubre en Sanxenxo

Juan Carlos I el pasado mes de octubre en Sanxenxo.

"No vale todo", afirmaban entonces desde fuentes de Zarzuela. Casa Real emitía un  comunicado para condenar la vulneración de la intimidad de la Princesa Leonor. Asimismo, se confirmaba que se iba a denunciar ante la policía chilena la difusión de las fotografías de la Princesa de Asturias en el marco de una actividad privada. Se señaló entonces que esto suponía "una infracción de la normativa vigente" dentro de la protección de datos tanto en España como en Chile. 

Este hecho parece que fue el principal detonante que hizo que don Juan Carlos tomase la determinación de sus demandas. Históricamente, la Casa Real no ha ejercido acciones legales. Tan solo encontramos casos aislados como cuando en 2012 la Reina Sofía optó por demandar para defender su honor a la agencia de contactos 'Ashley Madison'. Todo a consecuencia de una campaña publicitaria en la que se utilizaba su imagen. 

Fue entonces cuando la madre de Felipe VI presentó una demanda que recayó  en el Juzgado de Primera Instancia número 50 de Madrid. El asunto se resolvió sin la necesidad de llegar a juicio. La controvertida compañía estadounidense pidió perdón de forma pública mediante un anuncio publicado en prensa. En el mismo lamentaban lo ocurrido y manifestaban que habían hecho uso de la imagen de doña Sofía sin su consentimiento en un "contexto inapropiado para su trayectoria personal y su significado institucional". 

Las demandas del Rey Juan Carlos contra Miguel Ángel Revilla y Corinna Larsen

Don Juan Carlos ha impuesto tres condiciones a Miguel Ángel Revilla para "perdonarlo" y no demandarlo. Más allá de la citada indemnización, que asciende a 50.000 euros e irá destinada a 'Cáritas España', también se solicita la "rectificación de las afirmaciones ofensivas" en los mismos medios donde se realizaron las manifestaciones. 

En la demanda se le exige un compromiso explícito de que el político no vuelva a proceder de esta manera contra don Juan Carlos. Así como que "se retracte en los mismos medios y con la misma dimensión". En el programa 'Y ahora Sonsoles', que ha tenido acceso a la demanda, se transcriben todas las afirmaciones que realizó Miguel Ángel Revilla y que don Juan Carlos considera que atentan contra su derecho al honor. 

Miguel Ángel Revilla y su mujer, Aurora, en una foto de archivo.

Miguel Ángel Revilla y su mujer, Aurora, en una foto de archivo.

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Casa Real se ha desmarcado de estas decisiones del padre de Felipe VI. Desde fuentes de Zarzuela señalaban que se trata de una iniciativa de carácter individual del emérito. En cuanto a la demanda de Corinna Larsen, ambos protagonizaron ya una batalla legal anterior en los juzgados británicos. 

La alemana le demandó por acoso, vigilancia ilegal y difamación. El caso se saldó con victoria para don Juan Carlos. El Tribunal Superior de Inglaterra y Gales determinó que no contaba con jurisdicción y que la demanda no constituía un caso de "acoso". Asimismo, se dijo en la sentencia que la empresaria no había aportado "argumentos sólidos y defendibles de que su reclamo cae dentro de una excepción a esa regla predeterminada". Tras el veredicto, Corinna Larsen afirmó sentirse completamente decepcionada.