La crisis en el seno la Familia Real de Noruega no solo ha generado una importante conmoción dentro del país, también está siendo foco de análisis de la prensa internacional. El reinado de Harald, de 87 años, quien ostenta ser el monarca más longevo de la vieja Europa, está en entredicho. Los motivos van desde los cargos penales a los que se enfrenta Marius Borg Høiby, hijo mayor de Mette-Marit, al controvertido matrimonio de la princesa Marta Luisa.
"El futuro de la corona noruega parece mucho menos seguro", afirma el diario británico 'Daily Mail'. Recuerda que la hija mayor del Rey de Noruega, la princesa Marta Luisa, decidió alejarse de sus compromisos institucionales antes de su boda con el chamán Durek Verrett. El gran peso recae en este momento en el príncipe heredero Haakon mientras su mujer, Mette-Marit, se encuentra de baja por enfermedad.
El polémico caso de Marius Borg Høiby
El caso del hijo mayor de Mette-Marit, fruto de una relación anterior a su boda con el príncipe heredero, está generando mucha controversia en el país escandinavo. El joven fue detenido el pasado verano por una supuesta agresión a su exnovia en un apartamento de Oslo.
Marius Borg Høiby, de 27 años, se enfrenta a cargos penales de agresión sexual. A la primera denuncia se han sumado dos exparejas, Nora Haukland y Juliane Snekkestad. Estas afirmaron que habían sufrido violencia, tanto física como psicológica, durante el tiempo que mantuvieron una relación sentimental con él.
Asimismo, ha sido acusado de quebrantar una orden de alejamiento para proteger a Rebecca Helberg Arntsen. La exnovia del hijo de Mette-Marit a quien Marius admitió haber agredido bajo los efectos del alcohol y las drogas el pasado 4 de agosto. Tras el suceso fue detenido por primera vez y pasó la noche en una celda.
Mette-Marit, se ha visto salpicada de lleno por el escándalo. Según el medio noruego 'Aftenposten' se le habría prohibido la entrada al joven a la residencia privada donde viven los príncipes herederos. Además, distintas publicaciones del país se han hecho eco de las "fiestas salvajes" de Marius con robos incluidos.
A la polémica por este caso se suma la baja por enfermedad de la princesa Mette-Marit quien sufre una enfermedad pulmonar crónica. Desde fuentes oficiales de palacio se comunicó que la princesa heredera estaría apartada de sus compromisos institucionales mientras se recupera de los efectos secundarios que le ha provocado el tratamiento por su dolencia.
Fue en 2018 cuando la mujer de Haakon de Noruega hizo pública la afección que padece. "En parte porque en el futuro será necesario planificar períodos de tiempo sin un programa oficial para dar cabida al tratamiento, cuando la enfermedad sea más activa", señalaba entonces.
La salud del rey Harald de Noruega, en el punto de mira
Mientras la salud de Mette-Marit preocupa en el país, el rey Harald también ha sido noticia por su delicado estado. En marzo de este mismo año ingresó en el hospital Rikshospitalet de Oslo para colocarle un marcapasos permanente. Permaneció de baja durante tres semanas, tiempo en el que Haakon asumió sus funciones.
El monarca ha tenido una salud frágil durante los últimos años en los que ha sido ingresado en distintas ocasiones. En 2020 se sometió a una operación para reemplazar una válvula cardíaca. Sin embargo, ha insistido en que no tiene planes próximos de abdicación.
La boda de Marta Luisa de Noruega con el chamán estadounidense Durek Verrett
Otro de los temas que han causado controversia en Noruega es la boda de la hija mayor de los Reyes Harald V y Sonia con el chamán Durek Verrett. La princesa Marta Luisa decidió alejarse de la vida pública como miembro de la realeza en activo hace dos años. La noticia causó un importante revuelo y coincidió con su compromiso con el estadounidense.
La boda de Marta Luisa de Noruega llegaría el pasado mes de septiembre y se alargó durante tres días en el fiordo de Geiranger. Un "sí, quiero" envuelto en polémica debido a la decisión de los novios de ceder la exclusividad del enlace a Netflix para un documental.
La princesa Marta Luisa, cuarta en la línea de sucesión al trono noruego, no ha eludido la controversia que su relación ha generado. En su momento reconoció que creía que el pueblo había "decidido" en cierta manera que era mejor renunciar a sus deberes reales.
La primogénita de los Reyes de Noruega, de 53 años, se describe como una persona "espiritual". También ha confesado que tiene un don desde que niña y que es clarividente.
Mientras que su marido, Durek, ha realizado en los últimos años afirmaciones muy cuestionadas. Algunas de las mismas están recogidas en su libro 'Spirit Hacking'. Ha asegurado que regresó de entre el mundo de los muertos tras un coma. Asimismo ha dicho que los niños "pueden contraer cáncer si son infelices".