Ni rastro de Kate Middleton en los Juegos Olímpicos de París que terminan el domingo 11 de agosto. La mujer de Guillermo de Inglaterra no ha reaparecido en la cita olímpica a pesar de las voces que aseguraban que haría un alto en sus vacaciones para asistir y apoyar a su delegación nacional. 

Inmersa en su recuperación contra el cáncer que padece, la no asistencia de la futura reina al evento deportivo es una mala noticia para quienes apostaban por verla, como síntoma de su mejoría. Esto, al tiempo que se ha desvelado el desconocido papel de Guillermo como padre y, más aún, las "terribles peleas" que, según un 'topo' del Palacio de Kensington, protagonizan los príncipes de Gales en la intimidad de su hogar, con lanzamiento de objetos incluido. 

El año más difícil de Kate Middleton y el príncipe Guillermo mientras tratan de proteger su intimidad

En medio de los grandes desafíos a los que se enfrenta el príncipe Guillermo, con una monarquía bajo mínimos, Kate Middleton continúa en pleno proceso de recuperación del cáncer que le fue diagnosticado a principios de año y recibiendo tratamiento. Al contrario de lo que se pensaba en un primer momento, esto es, que la princesa acudiría a los Juegos Olímpicos de París para hacer acto de presencia, los príncipes de Gales han optado, en cambio, por marcharse de vacaciones con sus tres hijos, Charlotte, Jorge y el pequeño Louis. Una escapada de desconexión que, la opinión pública de Reino Unido, espera sea la última antes de que su futura reina vuelva, por fin, a reincorporarse a sus deberes institucionales. 

Durante estos algo más de seis meses muy complicados, el príncipe Guillermo y Kate Middleton han convertido el bienestar de sus tres hijos su máxima prioridad. Volcados como están en su cuidado y crianza, con el objetivo de que la situación de su madre no afecte a su vida, la pareja real ha optado por 'deshacerse' del personal del servicio doméstico que les ayudaba prácticamente las 24 horas del día. El matrimonio se ha blindado en Adelaide Cottage, su residencia oficial a las afueras de Londres, y ha decidido reducir la jornada de sus trabajadores para dedicarse ellos mismos y personalmente a los quehaceres domésticos y educación de los menores durante las tardes y las noches.

Príncipe Guillermo y George

Los príncipes de Gales con sus hijos en el Trooping the Colour.

Gtres

La "particular forma" de resolver los conflictos de los príncipes de Gales que habla de su relación no perfecta

El cambio de rumbo que han adoptado Kate Middleton y el príncipe Guillermo en los últimos meses para implicarse más si cabe en el bienestar de sus hijos no ha evitado que salgan a la luz detalles de su intimidad hasta ahora desconocidos. Detalles que, cabe apuntar, han sorprendido poderosamente por el calado de los mismos, que no deja en un buen lugar el modo en el que resuelven sus disputas y desavenencias. Según ha desvelado el biógrafo real Tom Quinn por boca de un extrabajador del Palacio de Kensington, de puertas para dentro, los príncipes de Gales tienen una forma "muy particular de resolver los conflictos que demuestra que su relación no es tan perfecta como parece", como recoge 'The Mirror'. 

"Alguien que trabajó para el Palacio de Kensington me dijo que ellos (Guillermo y Kate) tienen peleas terribles. No es un matrimonio perfecto", confesó el experto. Ahora bien, de acuerdo con su testimonio, los príncipes de Gales saben también cómo hacer que sus peleas no vayan a más. Aunque, para ello, se tiren cojines a la cara… "Mientras algunas parejas discuten y se arrojan jarrones pesados, Kate Middleton y el príncipe Guillermo se arrojan cojines. Siempre se mantiene bajo control. No se intensifica. La pelea no se hace cada vez más grande", ha sido la sorprendente revelación que ha compartido Quinn que, en cualquier caso, no es la forma idónea de afrontar los enfrentamientos. 

Las diferencias entre cómo arreglan sus diferencias Kate Middleton y Guillermo y Harry y Meghan Markle

Como señala Tom Quinn, para Kate Middleton y Guillermo de Inglaterra es mucho más fácil resolver un conflicto "ya que han apostado por ser personas privadas y, por lo tanto, no enfrentan altos niveles de escrutinio y son menos analizados". Algo con lo que sí tienen que lidiar constantemente Harry y Meghan Markle. De acuerdo con el trabajador del Palacio de Kensington con el que habló el biógrafo real, los duques de Sussex tienen un enfoque muy diferente de resolver sus diferencias. "Cuando Harry y Meghan se pelean, ambos se involucran a lo grande. Se pelan de verdad", indica. 

En el caso de los príncipes de Gales, ambos han adoptado el "mantra de la Reina Isabel II", que pasa por seguir la fórmula de "nunca te quejes, nunca des explicaciones", añade Tom Quinn. En otras palabras, si bien cuando Kate Middleton y Guillermo tienen encontronazos, se ven cojines volar de un lado a otro, no es habitual que existan discrepancias entre ellos. "Raramente se quejan y cuando lo hacen siempre es en términos mesurados", sentencia.