El 18 cumpleaños de Christian de Dinamarca, este 15 de octubre, ha vuelto a reunir a la realeza europea. Aunque con algunas ausencias destacadas. La reina Margarita ha preparado unos festejos de altura para su nieto, segundo en la línea de sucesión al trono tras su padre, el príncipe Federico, y que en el futuro será monarca de Dinamarca. Después de salir al balcón de palacio a saludar con toda la familia por la mañana, el broche de oro fue una cena de gala en palacio de Christianborg en Copenhague. A la cita acudió una buena representación de 'royals' de otros países, especialmente del ámbito nórdico y algunos de ellos emparentados con el homenajeado.
Como testimonio de este momento se hizo una foto para la posteridad: el príncipe Christian posando junto a sus herederos coetáneos, todos ellos, o mejor dicho, ellas (pues todas son mujeres), destinadas a ser las reinas de sus respectivos países. Un documento único en el que, eso sí, faltaba una invitada muy relevante: la Princesa Leonor de España, quien vuelve a causar baja en estas grandes citas europeas.
Rodeando a Christian de Dinamarca, que vestía un impecable frac con sus condecoraciones, estaban Amalia de Holanda (19 años), Elisabeth de Bélgica (21), Ingrid Alexandra de Noruega (19) y Estelle de Suecia (11). Todo un 'ramillete' de damas que cumplían a rajatabla con la etiqueta de vestido largo y tiara. En realidad, todas menos una: la pequeña Estelle, quien al no haber alcanzado la mayoría de edad no puede lucir este tipo de pieza tan relevante y costosa.
La Princesa Leonor, una oportunidad de conocer a sus 'iguales'
Esta fotografía capta un momento histórico irrepetible. Aparecen cinco futuros soberanos retratados en su juventud, años antes de asumir las jefaturas de Estado de sus respectivos países, como si fuera un instante congelado en el tiempo. Todas las princesas (y el príncipe) sonríen ante el objetivo, tan guapas y elegantes, en una ocasión más de poder verse y de 'hacer pandilla' formando parte de este reducido círculo que es, al fin y al cabo, el mundo de la monarquía.
Así que posiblemente tenemos que hablar de otra oportunidad 'perdida' para la Princesa Leonor. Esta era una fiesta en la que poder conocer más de cerca y estrechar lazos con sus colegas. Se desconoce si fuera del ámbito oficial Leonor mantiene algún otro tipo de contacto con el resto de herederos. Al menos nunca ha trascendido.
La Princesa Leonor, una estrella internacional
Quizás esta circunstancia cambie pronto, pues es evidente que la heredera española (hasta ahora muy protegida por sus padres en sus salidas públicas) se está empezando a abrir al mundo a pasos agigantados. También el interés que suscita en la prensa internacional cada vez es mayor. Buena prueba del tirón de la Princesa Leonor fuera de España ha quedado reflejado en los elogiosos titulares que le han dedicado tras verla vestida de uniforme en la Fiesta Nacional.
El próximo 31 de octubre, la propia Leonor cumplirá los 18 años y ya se ha diseñado un completo programa de actos para festejarlo. Ese día jurará la Constitución en el Congreso de los Diputados, en el que será el punto álgido de una serie de hitos conseguidos en su corta vida. Aunque le faltará una fiesta de gala de este tipo y todo será algo más institucional. La celebración de su espléndida mayoría de edad será ya más a puerta cerrada, familiar y privada, en el palacio de El Pardo. A partir de ese día la Princesa Leonor podrá adornarse ya con una de las tiaras de la Corona española.
La Princesa Leonor, también ausente en el 18 cumpleaños de Ingrid de Noruega
Esta imagen del príncipe Christian rodeado del resto de herederas nos ha recordado inmediatamente a la celebración del 18 cumpleaños de Ingrid de Noruega, que tuvo lugar en junio de 2022. Aquella fue otra gran fiesta para la que se reunieron las testas coronadas europeas y donde brilló especialmente esta nueva generación de 'royals'. Entonces llamó mucho la atención la presencia del príncipe Charles de Luxemburgo, que era apenas un bebé de dos años. En esta ocasión no ha acudido con sus padres, los príncipes Guillermo y Stéphanie. También fue la primera vez que que Amalia y Elisabeth portaban tiara en un evento público. Un elemento muy simbólico que representa un paso adelante y una 'puesta de largo' en sus funciones.
Lo cierto es que la Princesa Leonor no estaba en Copenhague. Se desconoce si la hija de los Reyes Felipe y Letizia estaba invitada a las celebraciones, pues a pesar de congregar a la realeza, también tenía un sesgo familiar importante, o al menos territorial, reuniendo a las monarquías nórdicas.
Pocos días antes, la heredera española acababa de protagonizar un sonado debut en la recepción de la Fiesta Nacional (vestida de uniforme militar) y, como se ha descubierto, acto seguido puso rumbo a Londres para disfrutar del puente del Pilar con sus amigos antes de reincorporarse a la Academia Militar de Zaragoza. Una escapada a Londres con la que hace un breve paréntesis durante su exigente formación castrense.
También la princesa Amalia de los Países Bajos estaba recién aterrizada tras un viaje exprés a Jerez de la Frontera para asistir este fin de semana junto a sus padres, los reyes Guillermo y Máxima, a la aristocrática boda andaluza de la duquesa de Medinaceli.