La mano de Letizia no es la única que manda un mensaje 'encriptado' en su retrato: la opinión de un experto sobre el Rey Felipe

Nueve meses después de que Annie Leibovitz fotografiara a los monarcas, los retratos ya han visto la luz. Se trata de un díptico en el que el Rey Felipe ofrece su versión militar más atractiva, mientras que la Reina Letizia posa con un espectacular diseño de alta costura de Balenciaga, al más puro estilo Hollywood. El experto en comunicación no verbal y en microexpresiones, Javier Torregrosa, analiza las imágenes para SEMANA.

El experto recalca que al tratarse de posados, perdemos parte de la información inconsciente y espontánea que nos ofrece una imagen captada sin previo aviso. En su análisis contrasta la postura en actitud rígida de Felipe VI a la más espontánea de la Reina Letizia. 

El significado de los hombros elevados de Felipe VI 

El fundador de 'NoVerbal' explica que el monarca deja al descubierto su rotativo derecho. "Muestra más la parte derecha de la cara, esto significa que está en una situación de control y vigilancia. Indica también que hay cierta tensión".

Asimismo, destaca la posición de las manos de Felipe VI. "Están algo cerradas, lo podemos ver en los nudillos que están un poco más blanquitos y los dedos están más aprisionados, retraídos. Esto implica que hay cierta tensión, lo que es congruente con la parte derecha de la cara que es la que está mostrando en este momento".

Otro detalle que no pasa por alto Javier Torregrosa es el pie derecho adelantado de Felipe VI. "Como si se dispusiera a caminar, a estar preparado para la acción. Una vez más la parte del cuerpo que avanza es la derecha. Se le ve algo rígido". El experto añade que los hombros están algo contraídos y elevados hacia arriba. "Los elementos que podemos apreciar de su comunicación no verbal nos indican cierta rigidez, cierta tensión y cierto control". 

La Reina Letizia, más espontánea y cercana que Felipe VI, según el experto

Ambos retratos fueron captados el pasado mes de febrero en uno de los salones del Palacio Real de Madrid. Se trata de un encargo de Banco de España a la fotógrafa mejor pagada del mundo, Annie Leibovitz. La obra asciende a 150.000 dólares, unos 140.000 euros. 

El experto en comunicación no verbal ha subrayado las diferencias más destacadas entre el posado de la Reina y el de Felipe VI. "Cada uno está ofreciendo una dinámica corporal completamente diferente". Explica que en doña Letizia vemos su hemicara izquierda, lo que nos indica espontaneidad y cercanía.

"Podemos ver el lado de la cara más espontánea de la Reina. El rey muestra una dinámica más controladora, ejecutiva, y la Reina ofrece una dinámica más espontánea y de más cercanía. Esto es lo que resaltaría en función de los elementos que nosotros etiquetamos y analizamos científicamente", expone Javier Torregrosa.

Ha querido incidir en la vestimenta elegida para la sesión de fotos. Doña Letizia luce un vestido de alta costura del maestro vasco Balenciaga con una capa que desafía a la gravedad. El experto manifiesta que el monarca ha optado por una vestimenta protocolizada para el momento, mientras que la combinación de colores de doña Letizia no está elegida al azar. No olvida que el negro es un color que denota elegancia, poder, sofisticación o incluso, cierto misterio. 

"El rojo indica energía. Es el color de la viveza, el color de elementos de la pasión". Por tanto, la combinación entre negro y rojo, une la sobriedad que se quiere trasladar en un primer momento con la voluntad de ejercer una acción. 

Los detalles de la sesión de fotos de los Reyes Felipe y Letizia a cargo de Annie Leibovitz 

Las imágenes tienen el sello inconfundible de la fotógrafa estadounidense y poseen un marcado aire barroco. Han sido tomadas en el Salón Gasparini del Palacio Real. Se trata de una cámara que servía como escenario para las audiencias privadas de Carlos III, su ornamentación fue ideada por el italiano Mattia Gasparini. 

La sesión de fotos se llevó a cabo el 7 de febrero de 2024, durante aquel día el Palacio Real cerró sus puertas al público. La jornada arrancó a las 11 de la mañana y terminó a las 17 horas, además se vivió con enorme secretismo. Annie Leibovitz trabajó junto a cinco miembros de su equipo. Ya los días anteriores había estado eligiendo la localización perfecta. 

La artista, galardonada con el  Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades 2013, barajó distintas posibilidades, incluso se planteó el exterior del palacio. Finalmente, le maravilló el Salón Gasparini. Los retratos se pueden ver en el Banco de España en el marco de la exposición 'La tiranía de Cronos' a partir de este miércoles, 27 de noviembre. 

En cuanto al estilismo de doña Letizia cuenta con la firma del diseñador de alta costura Cristóbal Balenciaga y fue donado por Oleguer Armengol a la colección de la Fundación Antoni de Montpalau. Un precioso vestido vintage que data de mediados del siglo XX. El diseño cuenta con escote palabra de honor y está confeccionado en seda y gasa con detalles drapeados. Una pieza totalmente atemporal con una cola de sirena de estilo cortina formada por capas de gasa.