La expectación era máxima y todos los pronósticos se han cumplido con creces, para bien y para mal, porque no falta la polémica. El martes 26 de noviembre vieron la luz los esperados retratos de los Reyes Felipe y Letizia firmados por Annie Leibovitz que se tomaron el pasado mes de febrero y se han mantenido en secreto hasta ahora.
Los soberanos se dejaron fotografiar como jamás les hemos visto, desplegando su versión más artística, glamourosa y barroca que se recuerda. El resultado salta a la vista: don Felipe, vestido con el uniforme de gala de Capitán General del Ejército de Tierra, muy atractivo mientras mira al infinito, y doña Letizia, como una auténtica diva de Hollywood, enfundada en un Balenciaga prestado y una capa roja de museo. La reacción de los expertos no se ha hecho esperar, a los que ha confundido un detalle técnico que no entienden ni comparten.
Los retratos más artísticos de los Reyes Felipe y Letizia que ya se exponen en el Bando de España
Seis horas de sesión frente el objetivo de Annie Leibovitz por un precio de 137 mil euros han dado sus frutos. Los nuevos retratos de los Reyes Felipe y Letizia suman reacciones de todo tipo después de exponerse para el gran público en la sede del Banco de España como parte de la exposición 'La tiranía de Conos'. Se trata de una imagen partida de grandes dimensiones en la que se ve a los soberanos como nunca antes. Fueron tomadas en una de las salas más emblemáticas del Palacio Real, el salón Gfasparini, donde Carlos III recibida sus audiencias privadas.
En el caso de la fotografía que protagoniza el Rey Felipe VI, aparece vestido con el uniforme militar de gala de Capitán General del Ejército de Tierra y luciendo la Orden de Carlos III, la máxima condecoración civil. Separado de su mujer por una butaca, es la Reina Letizia la que más ha impactado. Viste un diseño histórico y prestado de Balenciaga negro y escote palabra de honor que engalana con una vistosa capa roja, que sujeta diestra con las manos jugando con los volúmenes y pliegues de la espectacular pieza.
Opiniones encontradas sobre las fotografías de la Reina Letizia y el Rey Felipe VI en su versión más hollywoodiense
Nada de las nuevas fotografías de Sus Majestades se ha dejado a la improvisación. Ni la escenografía, el vestuario o las poses, planeadas al milímetro por Annie Levobitz y su equipo desde que recibieron el encargo del Banco de España con motivo del décimo aniversario de la subida al trono de Felipe VI. Y, con él, su mujer. En una pose muy distinguida, el padre de la Princesa Leonor y la Infanta Sofía se mantiene de pie, aunque se apoya levemente con su mano derecha en una de las mesas del salón. No mira directamente a cámara. En cambio, dirige su rostro y mirada hacia uno de los laterales, inclinado al lugar donde se sitúa la Reina Letizia.
Para gustos los colores y no a todos los expertos y público en general comulgan con la visión ha querido trasladar Annie Leibovitz con sus imágenes de los Reyes. Las redes sociales son un hervidero de opiniones varias sobre los retratos, desde los que gustan de cómo se muestran, hasta los que acusan a la fotógrafa estadounidense, premio Princesa de Asturias 2013, de excesiva parafernalia. En la parcela técnica, se apunta a un detalle que no ha pasado desapercibido para quienes entienden de fotografía y no han dudado en señalar. Algo que pasaría como nimio, pero, en realidad, no lo es.
La confusión técnica de los fotógrafos tras analizar los retratos oficiales de los Reyes hechos por Annie Leibovitz
Ya de primeras y como apunta 'Monarquía Confidencial', la Asociación de Fotógrafos Profesionales de España, expresó desde un primer momento su inconformidad con el hecho de que fuera una fotógrafa extranjera y no una nacional la responsable de firmar los últimos retratos oficiales del Rey Felipe y la Reina Letizia. Un trabajo clave e histórico para el que, en opinión de los profesionales, se debería haber contado con talento español. El gesto de contratar a Annie Leibovitz por una cifra, además, nada despreciable, "plantea dudas sobre la valoración de la industria fotográfica de nuestro país", señalan.
A esto hay que sumar la confusión técnica que han trasladado algunos profesionales del sector tras ver los retratos y del que se ha hecho eco el citado medio. "No entiendo bien la decisión de la fotógrafa de tener este punto de vista tan extraño para las fotos", confiesan tajantes. Lo que más ha desconcertado a los profesionales es la selección de los tonos por los que ha apostado Leivobitz. "No se entiende que la foto del Rey sea tan oscura y la de la Reina sea tan luminosa". Un contraste que, en cualquier caso, no es fruto de la improvisación, sino de una intencionalidad clara de la retratista más relevante del mundo en estos momentos.