Ha sido una ceremonia austera que escribe una nueva página en una de las coronas más destacadas de la vieja Europa. La proclamación de Federico de Dinamarca se ha vivido como un gran día de fiesta en el país. Copenhague ha recibido con las calles abarrotadas al nuevo monarca Federico X quien no ha podido evitar la emoción durante esta fecha clave en su vida. Una vez la Reina Margarita ha firmado su abdicación en el Consejo de Estado, el soberano ha salido a saludar desde el balcón del Palacio de Christiansborg. La jornada nos deja imágenes para la historia como el romántico beso en el que se ha fundido con su mujer, Mary de Dinamarca.
El acto de proclamación ha sido breve y arrancaba a las 13:35 horas cuando Federico y Mary de Dinamarca abandonaban su residencia oficial para dirigirse al Consejo de Estado. Tras el mismo se ha celebrado una recepción de carácter privado a la que han acudido representantes del país, entre ellos, la Primera Ministra, Mette Frederiksen. El momento más esperado daba inicio a las 15:00 horas cuando Federico X ha salido al balcón para saludar a los daneses. El monarca, que estaba visiblemente emocionado y con los ojos enrojecidos, ha recibido el cariño de su pueblo. Una vez ha ofrecido su primer discurso, la nueva reina consorte ha salido a escena. La Reina Mary ha elegido para la ocasión un elegante vestido blanco de inspiración nupcial con una envolvente lazada al cuello.
El romántico beso que marca el inicio del reinado de Federico y Mary
El beso pone fin a una etapa convulsa en la vida del matrimonio que ha estado en el punto de mira a raíz de la publicación de unas imágenes de Federico de Dinamarca junto a Genoveva Casanova en Madrid. Los nuevos soberanos se han mostrado muy cercanos dispuestos a escribir una nueva página tras 52 años con la Reina Margarita al frente de la corona.
Los monarcas han estado arropados por sus cuatro hijos: el Príncipe Christian, que pasa a ser el nuevo heredero, la Princesa Isabella, y los mellizos Vincent y Josephine. Fue el pasado 31 de diciembre cuando la Reina Margarita sorprendió anunciando su abdicación a favor de su hijo mayor durante su tradicional discurso de Año Nuevo. "En 14 días habré sido Reina de Dinamarca durante 52 años. Tanto tiempo no pasa sin dejar rastro para ningún ser humano, ¡ni siquiera para mí! El tiempo pasa y las enfermedades aumentan. Ya no se pueden superar las mismas cosas que antes". Además, la monarca emérita subrayó que esperaba que los nuevos Reyes recibieran "la misma confianza y afecto que yo he recibido. Ellos lo merecen".