En primer lugar hay que aclarar que no son lo mismo ni su origen es igual. Las ojeras tienen un color violáceo y suelen ser hereditarias. Cuando el tono es verdoso pueden ser debidas a la falta de descanso, a una tensión nerviosa o al mal dormir. Las
bolsas, por su parte, también pueden tener un origen genético y pueden estar ‘rellenas’ de grasa o líquido. Sus causas son múltiples, desde un estilo de vida plagado de malos hábitos, hasta medicamentosas o razones hereditarias. Pero tranquila, ambas tienen solución. ¡Apunta!
Adiós ojeras para siempre
La combinación de activos como vitamina K, ácido retinoico, vitamina C y cafeína es la más efectiva para aclarar la ojera típica, con tono violáceo o negruzco, sin surco, sin bolsa o flacidez. Aunque también debemos favorecer la circulación y descongestionar. Para ello son magníficos los parches de gel que nos ayudan a reactivar la zona, como el clásico truco de las rodajas de pepino que cumplen esa función pero de manera más rudimentaria. También el aceite de almendras ayuda a mejorar las ojeras gracias a su contenido en vitamina E, que hidrata la piel del contorno de los ojos. Ponte una gota en el dedo y masajea suavemente la zona antes de dormir.
- Truco experto: Según la reconocida esteticista, Carmen Navarro, lo primero que debemos hacer para combatir las ojeras es emplear cosmética especialmente diseñada para hacerle frente a ese tono azulado. “Actualmente existen productos que contienen activos que capturan los pigmentos sanguíneos y estimulan la síntesis de colágeno, como las algas marrones o la brassica, y otros que ayudan a regenerar, como la papaína. Además, una dosis extra de vitamina C aportará luminosidad inmediata y renovará el tejido ayudándonos a minimizar el tono oscuro”, explica la experta.
Bolsas: en el punto de mira
La inflamación o hinchazón bajo los ojos es muy frecuente a medida que envejecemos, ya que los tejidos se debilitan. La grasa que ayuda a sostener los ojos puede trasladarse a los párpados inferiores, lo que hace que se vean hinchados y acaben, o bien con un exceso de grasa, o de agua por retención de líquidos. ¿La clave para combatir las bolsas? Drenar. En casa lo ideal es aplicar un contorno de ojos con principios activos que activen la microcirculación, dando toquecitos con las yemas de los dedos desde el lagrimal hacia el exterior.
- Truco experto: Para evitar la aparición de las bolsas, Carmen Navarro recomienda empezar repasando nuestra rutina diaria y reducir el consumo de tabaco y alcohol. “Además, debes minimizar el consumo de sal para evitar la retención de líquidos. Por supuesto emplea cosméticos específicos que contengan cafeína, uno de los principios activos con mayor acción descongestiva. También son magníficos los parches intradérmicos que se adhirieren al contorno del ojo. Lo mismo que los antifaces de gel con efecto frío, que se guardan en la nevera y ayudan a combatir la fatiga. En Finlandia utilizan también piedras basálticas frías con excelentes resultados”, concluye.
Por último... un remedio natural que funciona
La manzanilla es una planta medicinal muy eficaz para eliminar bolsas y ojeras. En casa, prepara una infusión y, cuando esté fría, impregna dos discos de algodón y colócalos durante 15 minutos en tus ojos. Después, colócate durante 30 segundos más una cucharilla previamente enfriada en el congelador. ¡Verás qué diferencia!
¿Has tomado nota de todo? Entonces sigue bajando, te dejamos 5 aliados anti ojeras y bolsas que debes probar ya.