Esta semana, la elección del mejor look ha estado más reñida que nunca. La agenda de eventos ha sido intensa: la Semana de la Moda de París ha dejado estilismos inolvidables, la exclusiva 'Grand Dîner du Louvre' ha reunido a lo más selecto de la industria y la Feria ARCOmadrid ha sido un hervidero de tendencias. Con tantos photocalls, galas y presentaciones, la cantidad de looks dignos de mención ha sido abrumadora, tanto en el buen sentido como en el no tan bueno. Hoy analizamos, con lupa, cuál ha sido el estilismo más aclamado y cuál, por desgracia, el que menos ha convencido.
La Reina Letizia se la juega con el traje de Gángster en el Día Mundial de las Enfermedades Raras
Robert Smith
El mejor look de la SEMANA: La Reina Letizia y su impecable versión del estilo gángster
Pocos looks han causado tanto revuelo en los últimos días entre las editoras de moda como el que la Reina Letizia lució en Oviedo con motivo del Día Mundial de las Enfermedades Raras. Su elección fue un exquisito traje de raya diplomática de Sandro Paris en clave gángster que conjugaba sofisticación, riesgo y un toque de novedad absolutamente controlada. Un dos piezas negro de inspiración masculina, con blazer entallado y cruzado y pantalones de pinzas de corte recto, que elevaba el concepto del power dressing; un nuevo concepto de uniforme de trabajo al más puro estilo Little Italy.
La falsa corbata de la Reina Letizia para poner el broche de oro a su traje más atrevido
Robert Smith
Los originales complementos que elevaron su traje de Sandro a otro nivel
Lo que hizo de este look un absoluto acierto fue su impecable forma de combinarlo. La soberana, siempre alerta a la hora de incorporar tendencias, apostó por dos elementos clave y contrapuestos: por un lado, una fina diadema negra que recogía su melena para rebajar el estilo 'boyfriend' y, por otro, un pañuelo negro anudado al cuello creando una falsa corbata, en un guiño al dandismo más refinado. Esta combinación nos dejó completamente fuera de juego, pues cualquiera hubiera esperado un traje monocromático o un vestido repetido. ¡La Reina Letizia acertó de lleno!
El calzado también jugó un papel fundamental. Optó por unos mocasines planos en negro, cerrando el conjunto con una cohesión milimétrica. La ausencia de joyería llamativa permitió que el estilismo brillara por sí mismo. No es de extrañar que con este look las expertas en moda se deshicieran en halagos.
El total animal print look de Millie Bobby Brown en su última visita a Londres
(Gtres)
El peor look de la SEMANA: Millie Bobby Brown y el exceso de animal print
Por otro lado, si hablamos de riesgos no tan bien calculados, el caso de Millie Bobby Brown en su reciente aparición en Londres es digno de análisis. La actriz, que se encuentra en plena promoción de su nuevo filme, Electric State, optó por un estilismo que parece haber salido directamente de un sueño (o pesadilla). Un conjunto completamente cubierto de estampado animal print, desde el abrigo hasta los accesorios, que muchas han calificado de 'maximalista', un eufemismo de 'se ha pasado de frenada'.
El look en cuestión incluía un trenchceñido de leopardo, acompañado de un tocado tipo pillbox en el mismo estampado, un paraguas con idéntico print y unos tacones tipo zueco con plataforma que también se sumaban a esta desenfrenada oda al estilo safari. Si bien en la moda el maximalismo puede ser un recurso poderoso, en este caso la saturación de patrones restó más que sumó y convirtió su elección en un experimento fallido.
Los accesorios de Millie Bobby Brown de leopardo
(Gtres)
El contundente enfado de Millie Bobby Brown contra los juicios sobre su imagen
Sin embargo, no se puede hablar del estilo de Millie sin abordar una cuestión más profunda. En los últimos días, la actriz ha alzado la voz contra la constante crítica que recibe por su imagen. En un potente discurso en redes sociales, la actriz expresó su frustración ante la forma en que la industria y el público analizan su evolución física:
"Empecé en esta industria cuando tenía 10 años. Crecí delante del mundo y, por alguna razón, parece que la gente no puede crecer conmigo. En lugar de eso, actúan como si debiera permanecer congelada en el tiempo, como si debiera seguir teniendo el mismo aspecto que en la primera temporada de Stranger Things. Y porque no lo hago, ahora soy un objetivo."
Su declaración plantea una reflexión necesaria sobre cómo se percibe el cambio en las jóvenes figuras públicas - y a las mujeres en general- y cómo se les exige, en muchas ocasiones permanecer incólumes al paso del tiempo. Más allá de su desacierto en lo que a moda se refiere, lo que este episodio nos deja claro es que las críticas no deben centrarse en los cuerpos, en los rostros, en el envejecer bien o mal.
No obstante, la moda sin crítica sería un universo insípido. El debate sobre qué funciona y qué no es parte del ADN de esta industria, y analizar looks –ya sean triunfos o fracasos– es un ejercicio que nos ayuda a entender los derroteros y los límites de la moda. Sin embargo, hay líneas que no se deben cruzar. Cuestionar un outfit no debería nunca derivar en ataques personales ni en juicios sobre la apariencia física de alguien.