Con un mono negro tipo sastre de escote cruzado firmado por Elie Saab, detalles de lentejuelas en plata y negro y pantalón acampanado, un maquillaje old Hollywood impecable, abrigo largo a los hombros con estampado de leopardo y un favorecedor corte bob que sienta maravillosamente a cualquier edad, así se presentaba la mítica Jane Fonda a sus 86 años en la alfombra roja de Cannes en el mes de mayo.
Sus canas le aportan un aire elegantísimo, su porte, su clase, su estilo y la experiencia que le da toda su carrera, hacen que la actriz luzca maravillosa en cada aparición. ¿Cuál es su secreto? Descubrimos cómo se cuida Jane Fonda, y cuáles son sus hábitos saludables, para seguir dándonos cada año una nueva lección de estilo y ser una verdadera inspiración generacional.
Jane Fonda, un referente de vida
Es una mujer multifacética. Actriz, activista, monitora de aeróbic, escritora… No podemos olvidar su mítica interpretación en la película "Barbarella", su look de gimnasio para realizar sus ejercicios de aeróbic o su activismo contra guerras, el cambio climático y su apoyo a la comunidad LGTBIQ+. Jane Fonda ha obtenido 2 premios Oscar, Globos de Oro, Premios BAFTA, Emmy… su larga carrera ha recibido muchos aplausos y reconocimiento por parte de la industria y el público.
A sus 86 años parece que por la hija de Henry Fonda no pasa el tiempo, al menos no como lo hace con el resto de los mortales. Es una mujer muy activa, con una figura envidiable y muy implicada en causas sociales. Aún habiendo pasado por 2 cánceres, le diagnosticaron en 2010 un cáncer de mama y, en septiembre de 2022, un linfoma no Hodgkin, un tipo de cáncer que afecta al sistema linfático y que a los 3 meses de tratamiento anunció que estaba en remisión y que podía suspender la quimioterapia.
¿Cómo se cuida la actriz para tener una excelente condición física, un buenísimo estado de ánimo y una energía inagotable?
Los hábitos saludables de Jane Fonda
Jane es un verdadero ejemplo a seguir y por supuesto queremos saber más sobre sus hábitos para tener una vida longeva y lucir así de espléndida a los 86 años. La actriz sigue acaparando miradas y titulares cuando pisa una alfombras roja y, sin embargo, rechaza las dietas de moda abogando por una relación positiva con la comida y una alimentación sana y consciente.
No sigue una dieta estricta ni se prohibe alimentos. Ella considera que si te apetece un dulce como el chocolate no pasa nadar por comértelo, con salir a caminar un poco más ese día es suficiente y no hay que tener culpa ni remordimientos, eso sí, los caprichos mejor con moderación.
Esta muy de moda el ayuno intermitente en la modalidad 16:8 en el que habría una ventana de ingesta de alimento de 8 horas, esto se consigue saltándose el desayuno o la cena. Pues bien, Jane Fonda no se salta nunca su desayuno y opta por un desayuno contundente con la proteína como protagonista.
No suele incluir en su dieta carne roja, la minimiza debido a su impacto negativo en la salud cardiovascular. Tampoco consume mucho pescado debido a razones medioambientales. Prefiere dar prioridad a las frutas y verduras frescas.
Mens sana in corpore sano
Hemos visto a la actriz con su cinta en el pelo y sus calentadores practicando rutinas aeróbicas hace años para mantener su cuerpo fuerte, ágil y activo. A sus 86 años, Jane disfruta de largos paseos caminando a diario, algo que tiene en común con algunas de las personas más longevas del planeta.
Además de esas caminatas revitalizantes, Jane Fonda practica yoga habitualmente y también entrena fuerza, ejercicios que le ayudan a tener el cuerpo sano, flexible y tonificado.
Tener una buena higiene del sueño es fundamental para ella y necesita dormir diariamente de 8 a 9 horas. Durante el sueño, nuestro cuerpo y cerebro se recuperan del estrés del día. El descanso adecuado nos ayuda a pensar con más claridad, tener mejores reflejos y concentrarnos. Además, mejora nuestro estado de ánimo, ya que la falta de sueño puede afectar negativamente cómo nos sentimos y cómo interactuamos con los demás. Previene enfermedades, ya que nuestro sistema inmunitario se regenera durante el sueño, permitiéndonos luchar eficazmente contra toxinas y gérmenes.
La actriz mantiene su mente activa, es curiosa por naturaleza, inquieta y le encanta investigar, leer… así mantiene su cerebro joven y una vitalidad aumentada.
Cree en el poder de las afirmaciones positivas, es agradecida e intenta siempre extraer lo positivo de cada situación, manteniendo siempre que puede pensamientos positivos y sentimientos de gratitud, calma y amor. Reírse y rodearse de gente positiva y alegre es otra de las cosas que afirma Jane que le dan energía y ganas de vivir.
También suele meditar para reconectar consigo misma. Este ejercicio de mindfulness lo lleva a cabo siempre que puede mientras está en contacto con la naturaleza. Fomenta la relajación, la atención plena y el conocimiento de uno mismo, lo que permite alcanzar un estado de calma interior y claridad mental.
Jane Fonda nos enseña la edad solo es un número, que cumplir años es un regalo y que podemos mantener un buenísimo estado de salud y disfrutar de la vida si nos cuidamos y escuchamos a nuestro cuerpo. Jane sigue siendo, a día de hoy, uno de los mejores referentes y el ejemplo viviente de que se puede conseguir tener una vida larga, saludable y feliz.