Sin hacer grandes esfuerzos físicos muchas personas, no solo llegan agotadas al final de la jornada, es que ya se levantan cansadas.

¿Por qué siempre estamos cansados y cómo podemos tener energía ilimitada? El consultor y experto en comunicación, Adrià Solà Pastor, intenta poner luz, apelando a la ciencia, en estas cuestiones vitales para mantener una vida más feliz y elevar nuestros niveles de bienestar.

La exposición digital nos roba energía

En estos tiempos que corren pasamos muchas horas de media enganchados a las redes sociales y a internet. A este factor, que nos roba energía a diario, el experto le ha puesto el nombre de “sanguijuela energética”.

Como en todo, la dosis hace el veneno y es la sobreexposición digital la que causa problemas. “El abuso de la exposición digital es mala en muchísimos aspectos, sobre todo cuando hablamos de desregulación de los sistemas de segregación dopamínicos”.

El cansancio se ha demostrado que puede llegar a ser psicológico, es decir, el cerebro hace un cálculo de los esfuerzos que debemos hacer para ejecutar una acción y disparan la señal de cansancio, de poca energía. ¿Puede nuestro smartphone ser el culpable de que el cerebro mande esa señal?

La dopamina, señala Solà, es el neurotransmisor que hace un cálculo previo a la recompensa que obtendremos al hacer esa acción, al placer que vamos a experimentar. Las actividades ‘modernas’ como el consumo de ultraprocesados o las redes sociales han sido diseñados para que nos hagan segregar mucha dopamina, es decir, engancharnos y volvernos adictos. El problema es que después tenemos mucha menos motivación o energía para hacer tareas difíciles que ofrecen resultados a largo plazo mucho más satisfactorios.

El cerebro, explica el experto, no distingue las actividades según la cantidad de progreso o satisfacción que nos producirán a largo plazo sino que las distingue según cuánto placer nos permitirán experimentar a corto plazo. Por eso tenemos una predisposición a escoger estas tareas como utilizar el teléfono.

El problema es que cuando queremos por propia voluntad trabajar o estudiar, el cerebro mandará esa señal de cansancio porque habrá hecho ese cálculo de los esfuerzos que tendremos que hacer para segregar dopamina con algo productivo. Es por eso que debemos limitar el uso del teléfono porque si no estamos acostumbrando a nuestro cerebro a recibir una recompensa sin esfuerzo previo”.

Placer corto plazo

Nuestro cerebro prioriza aquello que nos produce placer a corto plazo.

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La importancia de tener una rutina

Seguir una rutina es fundamental para mantenernos centrados y más felices. Estamos codificados para mantener una rutina y, aunque es verdad que nos encanta salir de esa rutina en vacaciones y puentes, lo cierto es que, tras un periodo desestructurado de horarios y comidas, anhelamos la vuelta a la rutinapara sentirnos mejor.

“El cerebro pretende ahorrar energía para invertirlo en lo que importa. Antes era protegerte a ti y a tu familia de un león y ahora es ser productivo durante las horas que estás trabajando para no perder tu puesto de trabajo”, afirma Solà.

La energía, la fuerza de voluntad y la disciplina se agotan como un músculo. Si te levantas por la mañana sin ningún tipo de estructura o rutina y vas tomando decisiones aleatorias, lo que estás haciendo es disminuir la energía, la fuerza de voluntad y la disciplina que tienes para tomar las decisiones que de verdad importan, las que te harán progresar.

“Si desde primera hora del día tienes tu rutina de activación para transicionar del sueño a la actividad y por la noche tienes tu rutina de desactivación para transicionar de la actividad y el ajetreo hacia el relax y el sueño profundo, te será mucho más fácil preservar tu energía para aquello que de verdad importa”, advierte el consultor.

rutina

Tener una rutina marcada impide que se agote tu energía rápido.

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Vitalidad y sueño reparador

El sueño es el pilar fundamental de nuestra vitalidad. “Las fases del sueño están divididas en ciclos circadianos de una hora y media aproximadamente. Lo que recomiendan es dormir entre 5 y 6 ciclos circadianos”. Para tener un sueño reparador es indispensable dormir entre 7-8 horas.

Otros consejos para poder descansar correctamente, según la ciencia, serían:

  • Acuéstate y levántate siempre a la misma hora.
  • Desactiva los dispositivos digitales al menos dos horas antes de acostarte.
  • Nada de luz brillante antes de dormir, además de la luz azul parece ser que la luz blanca también interfiere en el sueño.
  • No consumas cafeína desde 8 horas antes de irte a dormir y deja pasar dos horas al levantarte para tomarla. No tomes café nada más despertar.
  • Intenta exponerte a la luz natural del sol al levantarte.ayuno
Descanso

Un buen descanso es la base fundamental para tener energía todo el día.

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Ejercicio y alimentación

Hacer ejercicio y comer menos, o reducir la frecuencia de ingesta, aumenta la energía aunque parezca paradójico.

Los expertos recomiendan comenzar el día haciendo ejercicio para aumentar los niveles de vitalidad. Puedes poner el despertador un poco antes para ajustar tu rutina y comenzar a hacer algo de ejercicio antes de centrarte en tus responsabilidades de trabajo y/o estudio.

Los ejercicios de fuerza, el yoga, salir a correr, montar en bicicleta… tú eliges pero si puede ser a primera hora de la mañana mucho mejor. Notarás que la energía con la que afrontas la jornada cambia radicalmente.

También es recomendable, según explica Solà, integrar el ayuno intermitente en tu rutina, es decir reducir la ventana de ingesta. Aumentar el consumo de proteína y reducir el consumo de carbohidratos de asimilación rápida que provocan picos de insulina, también serían estrategias perfectas para aumentar la energía.

Ayuno

Reducir la ventana de ingesta hace que aumenten tus niveles de energía.

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Sanea tu entorno

La personas que nos rodean influyen mucho en nuestros niveles de energía. Rodearse de gente que nos inspira y motiva es una forma de enriquecerse, llenarse de energía y aumentar los niveles de bienestar.

Si detectas que hay personas que cuando estás con ellas sientes más cansancio, hastío y desmotivación, intenta ser consciente de esa ‘transferencia de datos’ que realmente no te pertenece, y rodéate de gente con la que aprendas, que admires, que te motive e inspire para progresar y alcanzar tus metas. Hoy en día con las redes sociales es más sencillo encontrar personas con los mismos gustos y motivaciones, no todo es malo en los avances de la era digital.