Casi tres meses después de que tuviera lugar el décimo aniversario del ascenso al trono de Felipe VI, tanto él como la Reina Letizia continúan con las celebraciones. Sin ir más lejos, el pasado martes, 17 de septiembre, Sus Majestades dejaron libres sus agendas para desplazarse hasta el Palacio de El Pardo junto a algunos trabajadores de Patrimonio Nacional. Una velada de lo más especial en la que ambas partes tuvieron oportunidad de hacer unos agradecimientos que no han pasado desapercibidos.

Los Reyes Felipe y Letizia vestidos de luto

Los Reyes Felipe y Letizia vestidos de luto.

Gtres

El plan 'secreto' de los Reyes de España con sus trabajadores

Los trabajadores de Patrimonio Nacional escogidos para conocer a los Reyes fueron designados a sorteo. Aunque fueron muchos los que quisieron compartir esta cita con Sus Majestades, finalmente solo pudieron hacerlo unos pocos. Ellos no solo tuvieron un encuentro formal con don Felipe y doña Letizia, sino que también participaron en el correspóndete besamanos y posterior comida

A lo largo de esta cita, los profesionales pudieron dar las gracias al monarca y a su esposa por su desempeño en estos diez años de reinado. Pero no fueron los únicos que se mostraron agradecidos, pues Felipe VI y doña Letizia también se mostraron muy orgullosos de la Guardia Real, del personal de la Casa Real y de Patrimonio Nacional por el trabajo desarrollado en esta última década. Algo que, a buen seguro, ha hecho especial ilusión a todas aquellas personas que pudieron asistir a este evento, y que por ende, se acercaron más a Sus Majestades y pudieron escuchar sus agradecimientos en primera persona. 

Los Reyes Felipe y Letizia saliendo del restaurante.

Los Reyes Felipe y Letizia saliendo del restaurante. GTRES

El tierno agradecimiento de don Felipe y doña Letizia con sus trabajadores

Cabe destacar que esta no es la primera vez que Casa Real organiza un evento que gira en torno a la celebración por el décimo aniversario del ascenso al trono del Rey Felipe. Sin ir más lejos, durante la pasada semana ya hubo una recepción que reunió de forma privada a trabajadores como, por ejemplo, los miembros del equipo de seguridad. Si algo está claro, es que el soberano y su esposa están muy contentos con las funciones de sus trabajadores, motivo por el que también han querido contar con ellos en un momento clave del reinado de Felipe VI. 

Sin embargo, a la Reina Letizia y a su marido no les ha quedado más remedio que volver a la vida pública, y por ende, a sus compromisos al frente de la Corona. El primero en hacerlo ha sido el monarca, que en La Zarzuela ha recibido en audiencia a Salvador Illa, el presidente de la Generalitat de Cataluña. A media mañana, la consorte ha reaparecido en el IES Doctor José Zapatero Domínguez de Castro-Urdiales, en Cantabria, con motivo de la apertura del curso de Formación Profesional 2024/25. 

Sin embargo, no será hasta el próximo jueves, 19 de septiembre, cuando la Reina Letizia pueda cerrar oficialmente su agenda semanal con una visita al Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, en Madrid. Allí acudirá para hacer entrega de la cuarta edición de los ‘Premios Reina Eco’. Por suerte, este fin de semana será doña Sofía quien coja el testigo de su nuera para viajar hasta Lisboa, en Portugal, con motivo del ‘International Summit on Neurodegenerative Diseases’., donde se conocerán los últimos avances en la lucha contra el Alzheimer.

El descanso que favorecerá sobre todo a la Reina

Este breve parón en su rutina oficial hará que la consorte pueda descansar. Algo que le vendrá muy bien, sobre todo teniendo en cuenta la lesión que padece en sus pies y por la que, al menos por ahora, no puede subirse a zapatos de tacón como hacía anteriormente. La fractura de falange por la que tuvo que ser operada le ha obligado a extremar aún más las precauciones si cabe, aunque es cierto que la consorte ya contaba con un neuroma de Morton que le fue diagnosticado en junio de 2022 y que le impedía moverse en un periodo largo de tiempo con tacones. 

 

Si en algún momento la Reina sobrepasaba los límites con sus zapatos o se mantenía en posición firme y estática, tendría fuertes dolores localizados que le obligarían a sentarse de inmediato. Algo que sucedía durante el mes de abril, cuando en su viaje a Países Bajos junto al Rey, doña Letizia protagonizaba una imagen desconcertante en la que se sentaba para protagonizar el tradicional besamanos en el Palacio de Ámsterdam. Aunque tanto ella como el resto de miembros de la realeza aparentaron normalidad en esa situación, muchos de los seguidores de la consorte se preocuparon por si cabía la posibilidad de que su afección hubiera empeorado con el paso del tiempo. Pero lo cierto es que la evolución de la madre de la Princesa Leonor cada vez es más favorable, y poco a poco va atreviéndose con calzados que se alejan de las deportivas al uso.