El Rey Felipe VI tratando de dialogar con los afectados de la DANA. La Reina Letizia, incapaz de reprimir las lágrimas, con la cara embarrada, mientras escuchaba los durísimos testimonios de varias mujeres y repetía una y otra vez "lo siento, lo siento". La visita de los Reyes a Paiporta, una de las localidades más afectadas por el temporal, del pasado domingo, dejó imágenes sin precedentes de ambos, completamente superados por las circunstancias.
Ese mismo día, tenían previsto acudir a Chiva que se vio, lógicamente, cancelado por lo ocurrido en Paiporta. Se dijo en ese momento que aplazaban su viaje, pero, a medida que las repercusiones de su visita se han ido sucediendo, los soberanos se han visto obligados a tomar su decisión más complicada, a pesar de que su intención de estar al lado de las víctimas.
Del caos vivido en Paiporta a la decisión de los Reyes Felipe y Letizia de posponer su viaje a Chiva
Nadie en Zarzuela previó la reacción de los supervivientes en Paiporta con la llegada de los Reyes Felipe y Letizia. Los soberanos fueron recibidos entre gritos y el lanzamiento de objetos y barro que impactaron de lleno en el rostro de la Reina Letizia y acabaron con uno de sus escoltas con la cara ensangrentada. Las imágenes de los Reyes han dado la vuelta al mundo. Calificarlas de impactantes se queda en nada. El caos que se vivió fue mayúsculo a pesar de los intentos de Felipe VI por calmar los ánimos de las decenas de personas que se agolparon indignados para recibirles y de las palabras de su mujer, que le reconoció a una mujer entre lágrimas que probablemente no era el momento de viajar a la zona.
El propio monarca pidió perdón por lo ocurrido, al igual que doña Letizia, cada uno a su manera. "Hay que entender el enfado y la frustración de mucha gente por todo lo que han pasado, así como la dificultad para entender cómo funcionan todos los mecanismos a la hora de hacer frente a las emergencias", señaló Felipe VI tras su paso por Paiporta. La decisión posterior de la comitiva real no pudo ser más acertada. Se decidió entonces que Sus Majestades no acudieran a Chiva, donde una multitud exaltada también les esperaba, muy molestos por el abandono del que, a su entender, han sido objeto desde que tuvo lugar la tragedia que ha devastado varias localidades de la Comunidad Valenciana.
La complicada decisión de Sus Majestades después de su visita a Paiporta que dejó imágenes sin precedentes
Las informaciones que trasladó en un primer momento Casa Real dejaban caer que Felipe y Letizia pospondrían su visita a Chiva hasta nueva orden y "volverían más adelante". Sin embargo, aunque los monarcas siguen volcados con la población de las localidades afectadas, ahora se ha sabido que, dadas las circunstancias, no viajarán a terreno en los próximos días. Los Reyes seguirán todo lo que acontece en relación con las consecuencias de la DANA y las medidas que se están tomando para paliar sus efectos desde el Palacio. Así lo recoge 'Vanitatis', que apunta a fuentes cercanas a Zarzuela. Según relatan, han decidido ir "día a día" para evitar el caos vivido el pasado domingo e ir tomándole el pulso a la situación (y los ánimos) a medida que vaya pasando el tiempo.
En otras palabras, los Reyes han optado por ir poco a poco en su toma de decisiones respecto a su traslado a las zonas devastadas porque todo está muy reciente y la indignación de las víctimas, a flor de piel. Su postura no es otra que ser cautos a la hora de valorar una futura visita a Valencia. Calcular al milímetro el cómo y el cuándo es ahora prioritario para no encontrarse de frente con una situación similar a la que experimentaron en Paiporta, donde se vivieron momentos de gran incertidumbre y tensión.
El compromiso de los Reyes Felipe y Letizia con la tragedia que vive la Comunidad Valenciana
Ahora bien, que no se baraje por el momento una visita a Chiva no significa, en ningún caso, que los Reyes vayan a desatender la crisis. Tanto el Rey Felipe como la Reina Letizia han convertido la tragedia en la principal prioridad de su agenda institucional, cancelando varios actos 'in extremis' ante la emergencia por la que atraviesa la Comunidad Valenciana. De hecho, el mismo lunes, don Felipe se puso al frente del comité de crisis que convocó a las principales autoridades del país con el objetivo de valorar las medidas a tomar para dar respuesta al drama que viven miles de valencianos cuanto antes.
Las historias de desolación se suceden por minutos en la peor catástrofe natural de la que se tienen registros en las últimas décadas. Una realidad que los Reyes vivieron en primera persona durante su viaje a Paiporta, cuando fueron objeto de la rabia y el dolor que sienten los valencianos en estos momentos de absoluta tragedia.