Los Reyes Felipe y Letizia se han convertido en los grandes protagonistas de la actualidad informativa con permiso del drama mayúsculo que se vive en la Comunidad Valenciana tras el paso de la DANA. Sus Majestades fueron objeto de insultos y del lanzamiento de barro y objetos durante su reciente visita a Paiporta, una de las zonas cero del desastre natural, el más mortífero en la historia moderna de España.
Mientras el país continúa conmocionado y volcado con apoyar a los damnificados, que se contabilizan por miles, a lo que hay que sumar las víctimas mortales (217 según las últimas cifras oficiales), Juan Carlos I fue visto en Londres, donde disfrutó de una cena en un exclusivo club privado con dos de sus nietos, Miguel e Irene Urdangarin. Una velada que no está exenta de controversia debido a la coincidencia de tiempos.
El complicado momento de los Reyes Felipe y Letizia durante su visita a Paiporta
Todavía siguen impactando las imágenes de los Reyes Felipe VI y Letizia en Paiporta, una de las localidades más afectadas por la DANA, donde decenas de supervivientes les recriminaron su presencia, les insultaron y les lanzaron objetos y barro. Unas escenas sin precedentes que dan cuenta de la rabia y el dolor que sienten los ciudadanos afectados por la tragedia. Muchos de ellos lo han perdido todo: pertenencias, casas, negocios, coches e, incluso, seres queridos. Sus Majestades fueron los destinatarios del gran malestar y la fuerte sensación de abandono que sienten estas personas, que una semana después del paso de la DANA continúan sin recibir toda la ayuda que necesitan para retomar su vida.
Mientras el Rey Felipe trató de calmar los ánimos y se acercó a varios afectados para dialogar y trasladarles todo su apoyo, la Reina Letizia, con el rostro cubierto de barro, no pudo evitar derrumbarse al escuchar los durísimos testimonios de varias mujeres. La soberana, que no paró de secarse las lágrimas, emocionada hasta el extremo, no pudo, sino, pedir perdón y solidarizarse con quienes se aceraron a ella para dejar constancia de su gran indignación. "Hay que entender el enfado y la frustración de mucha gente por todo lo que han pasado, así como la dificultad para entender cómo funcionan todos los mecanismos a la hora de hacer frente a las emergencias", señaló Felipe VI después de la visita.
La cena del rey Juan Carlos I con Irene y Miguel Urdangarin en Londres
Mientras los Reyes Felipe y Letizia enfrentan una situación muy complicada, cuestionados por su papel durante la tragedia, el rey Juan Carlos disfrutó del fin de semana en Londres, donde se reencontró con dos de sus nietos, Irene (19 años) y Miguel Urdangarin (22 años). El emérito, que pasa unos días en la capital inglesa, se reunió con los hijos de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin en el exclusivo y céntrico restaurante del club privado Oswald's, según recoge 'Hello'.
La revista ha publicado varias imágenes en las que se ve a los dos hermanos llegando al establecimiento en un taxi y a su abuelo haciendo lo propio en otro vehículo y acompañado de su hombre de confianza, Vicente García-Mochales, conocido cariñosamente como 'Mochi'.
"Para la ocasión especial, Juan Carlos lució muy elegante con un traje azul marino, una camisa blanca y una corbata color esmeralda. Irene, que se cree que está estudiando en las afueras de Londres, lucía elegante con un blazer gris de raya diplomática y una camisa negra, mientras que Miguel lucía un traje y una corbata color carmesí", recoge la publicación sobre cómo iban vestidos el emérito y Miguel e Irene Urdangarin para la cena de tres.
Los últimos movimientos de Irene y Miguel Urdangarin y el emérito
Cabe recordar que la hija pequeña de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin ha dejado atrás la comodidad del Palacio de la Zarzuela, donde se había trasladado a vivir con su abuela, doña Sofía, y se ha mudado a Reino Unido. Después de su año sabático, Irene ha iniciado una nueva etapa universitaria en un prestigioso centro de estudios, localizado a dos horas de Londres, donde estudia una carrera relacionada con el turismo y hostelería. En el caso de Miguel, lo último que se sabe de él es que reside en la actualidad en Zarzuela, siguiendo los pasos de su hermana.
Respecto al abuelo de ambos, a Juan Carlos I se le pudo ver el pasado 26 de octubre en Dubai, donde asistió al combate de Ilia Topuria. Se supo de su asistencia por una imagen que se hizo viral del boxeador besándole en la frente después de proclamarse campeón del encuentro. En estos últimos años, desde que el emérito trasladó su residencia permanente a Abu Dabi, en Emiratos Árabes, viaja de forma asidua a Londres y Ginebra, además de a España, donde se reúne con sus familiares y amigos.