Todo parecía indicar que este verano había sido uno de los más dulces y felices para Carla Vigo. La hija de la fallecida Érika Ortiz presentaba a su nuevo novio con una pasional foto de un beso y, aunque le llovían las críticas, la joven demostraba que estaba muy por encima de cualquiera que cuestionara sus decisiones.
Una actitud que no hacía prever el nuevo revés al que ha tenido que hacer frente. Ahora se ha conocido que la sobrina de la Reina Letizia ha vuelto al piso tutelado del que se marchó el pasado mes de abril después de recibir el alta y comenzar a vivir sola.
La decisión de Carla Vigo de establecer su nueva residencia en un piso tutelado
Según ha informado 'El Español' por fuentes cercanas a Carla Vigo, la joven de 24 años ha regresado al piso tutelado en el que ya había vivido en el pasado. Un inmueble que había abandonado hace cinco meses de conformidad con el criterio de sus médicos. Se trata de un domicilio que se inauguró en octubre de 2019 y opera al amparo de la Asociación de Iniciativas Sociales (AISS), una organización "no lucrativa que pone a disposición pisos tutelados para personas con enfermedad mental".
Se desconoce el motivo que ha llevado a la prima de la Princesa Leonor y la Infanta Sofía a volverse a poner en manos de la asociación para establecer su nueva residencia. De acuerdo con el citado medio, el coste anual de las plazas por vivir en estos pisos tutelados es de 1.500 euros, con todo incluido. Esto en caso de compartir habitación con otros residentes. Si se opta por un dormitorio individual, el valor asciende a los 1.790 euros.
Gracias a este pago mensual, Carla tenía derecho tanto al alojamiento como a la comida y a la asistencia y acompañamiento de diferentes profesionales. Solo tenía que hacer frente a sus gastos personales, que quedaban fuera de la ecuación.
La nueva vida de la sobrina de la Reina Letizia que ha tenido que posponer
Fue la propia Carla Vigo quien, en una entrevista con la revista 'Lecturas', desveló hace unos meses que vivía en un piso tutelado junto a ocho personas más. De ellas contó que la apoyaban mucho, como, es de esperar, se apoye en estos momentos en Xavi Macías, el futbolista con el que sale y ha disfrutado de unas escapadas a Barcelona, donde reside el catalán, durante este verano. La nieta de Jesús Ortiz y Paloma Rocasolano cuenta en estos momentos con una pensión de orfandad, a raíz del trágico fallecimiento de su madre, que actúa como su principal fuente de ingresos.
El pasado mes de mayo Carla Vigo comenzó a residir por cuenta propia y en régimen de alquiler en un domicilio situado en el centro de Madrid. La sobrina de la Reina Letizia se mostró de lo más feliz por esta nueva etapa de su vida que acababa de inaugurar y por la nueva vivienda a la que se había mudado, "moderna, luminosa y muy comunicada", contó, que disponía de "un vestidor enorme" para ella sola.
El gran sueño de Carla Vigo que no logra materializar
Sin trabajo conocido, Carla Vigo sigue decidida a hacerse un hueco en el competitivo mundo de la interpretación. Tiene el sueño de convertirse en actriz y poder desarrollar su talento frente a las cámaras y por sus propios medios. No quiere que se le vincule con su famosa familia más de lo necesario. No, por lo menos, en el plano laboral, donde trata de labrarse un nombre propio.
A la hija de Érika Ortiz, quien murió en 2007 cuando apenas tenía 31 años, se le ha resistido este objetivo durante años, a pesar de sus intentos y de haberse embarcado en varios cursos y talleres de actuación para ampliar su formación actoral con artistas de renombre como Rafael Amargo.
Después de una etapa muy complicada y de revelar que sufría un TCA (trastorno de la conducta alimentaria) que arrastra desde hace años, la sobrina de doña Letizia quiso renovarse una vez recibió el alta del piso tutelado al que, ahora, ha tenido que regresar por motivos que se desconocen.
De sus escasas intervenciones en medios de comunicación, Carla Vigo siempre ha dejado claro que es una mujer con mucha determinación y que mira al futuro con optimismo. Eso a pesar de que no siempre le ha resultado sencillo asumir quién era. "Si no lo gestionas bien, te puedes volver un poco loca", contó a revista SEMANA hace un tiempo.