Miguel Bosé (68 años) lleva acaparando portadas desde hace una semana de forma indirecta al trascender la noticia de que su expareja, Nacho Palau (52), hubiera interpuesto una demanda contra él por no permitirle ver a sus dos hijos no biológicos.

Así como el hecho de que se le haya relacionado sentimentalmente con Ricky Martin – amigo del hijo de Lucía Bosé desde hace más de dos décadas-quienes pese a conocerse desde hace años habrían vivido un acercamiento en los últimos tiempos.

Bien, pues no contento por estar ya metido en el ojo del huracán mediático por su desempeño como padre y ex, ahora Miguel Bosé se ha vuelto a meter él solito en un entuerto de los complicados.

Miguel Bosé y su apoyo a las terapias que abogan por curar las enfermedades con lejía y clorito de sodio

Este viernes, 26 de julio, el intérprete de ‘morena Mía’ ha acudido a una charla de lo más controvertida que ha tenido lugar en Mallorca. Un encuentro pseudocientífico, que tenía como caras visibles a Josep Pàmies y Guillem Ferrer.

 

El cantante ha participado en Mallorca en una controvertida charla pseudocientífica, organizada por Josep Pàmies y Guillem Ferrer

El cantante ha participado en Mallorca en una controvertida charla pseudocientífica, organizada por Josep Pàmies y Guillem Ferrer.

Gtres

Una conferencia que llevaría el nombre de La libertad de expresión y la libertad terapéuticay a la que ha querido dar apoyo tras confirmar su visión negacionista ya en el pasado donde no dudó en cuestionar la efectividad de las vacunas del Covid— 19, asegurando ser esta una completa invención a gran escala y de índole conspiranoica. Opinión que trajo cola en el pasado y que fue cuanto menos polémica por ser vertida en una época donde la cifra de muertes a causa de este virus crecía por horas y días.

Pese a que estas declaraciones le hayan acarreado el consecuente descrédito público, lo cierto es que su persona sigue despertando tantos admiradores como detractores. Prueba de ello fue la gran ovación de bienvenida que Miguel Bosé recibió a su llegada al evento, donde no pudo ser más aplaudido al personarse como uno más de los ponentes de la polémica conferencia.

Sonriente y sin hacer mucho caso a los medios, el cantante desembarcaba en lo que él considera una alternativa médica de gran calidad, la charla de las grandes terapias alternativas de las que se ha hecho eco de forma pública.

Unas terapias muy polémicas donde ya existen importantes sanciones por parte del Gobierno

Josep Pàmies, uno de los asistentes y organizadores del acto, es una figura cuanto menos curiosa, pues ha sido multado por parte de la Conselleria de Salud de la Generalitat de Cataluña por hablar de curar el trastorno del autismo y el virus del sida con lejía.

Lejos de lo inverosímil que pueda ser su discurso, lo cierto es que también ha promovido otros en el que abogaba por el uso y consumo del clorito de sodio o dióxido de cloro (MMS) para tratar a pacientes terminales de cáncer o el ELA, algo por lo que también se le sancionó de parte del Gobierno.

 

Bosé en su discurso de apoyo a Josep Pàmies, quien ha sido multado por parte de la Conselleria de Salud de la Generalitat de Cataluña.

Bosé en su discurso de apoyo a Josep Pàmies, quien ha sido multado por parte de la Conselleria de Salud de la Generalitat de Cataluña.

Gtres

Miguel Bosé, muy afín a su pensamiento, ha querido personarse en su charla para echar leña al fuego de la sanidad, mostrándose “abiertamente negacionista y orgulloso de ello” con respecto a la opinión que le despierta el coronavirus. 

Miguel Bosé, un negacionista más que orgulloso: "No me vacuné ni mis hijos tampoco"

"Soy orgullosamente negacionista. No me he vacunado ni he vacunado a mis hijos. Los que están al otro lado están acojonados ante las formas tradicionales de la medicina porque es un área que va creciendo cada día, por sus efectos y por el convencimiento de que, para curar el dolor de estómago, una mezcla de hinojo, manzanilla y estevia no mata. Con pasión, las cosas se cargan de luz y verdad", ha apostillado al comienzo de su exposición”, promulgaba el cantante en su discurso más polémico. En un acto al que han asistido más de 800 personas que se definen como firmes defensores “del otro lado de la verdad”.

"Estad tranquilos y muy firmes. Estoy convencido de que todo el daño causado por la vacuna contra la Covid, qué tantos problemas, taras, secuelas y muerte ha provocado, ha hecho que la gente despierte e investigue. Me recetaron cinco antibióticos durante un periodo larguísimo, con graves efectos secundarios, y al final me curé con clorito de sodio. Pasé por un infierno farmacológico", explicaba del modo en el que en el pasado los médicos de la sanidad convencional le diagnosticaron una tuberculosis —según él— de dudosa curación.