La muerte de Edwin Arrieta a manos de Daniel Sancho, como él mismo confesó, sigue dando un sin fin de titulares. No en vano, todavía quedan muchas incógnitas alrededor de aquel fatídico 2 de agosto en el que el español degolló y descuartizó al colombiano de 44 años. La familia de la víctima sigue sumida en el más profundo dolor tras lo ocurrido. Quieren que el asesino confeso de su familiar no salga de la cárcel de Koh Samui (Tailandia) donde está retenido desde el pasado 7 de agosto. O, en su defecto, de cualquier otro centro penitenciario del país. A esto, se suma la suma de dinero que van a pedir en concepto de indemnización. Una cifra de seis números que, en ningún caso, es representativa de la pérdida que han experimentado.
Las familias Arrieta y Sancho centradas en sus respectivas estrategias judiciales
La investigación del crimen de Edwin Arrieta sigue su curso. El próximo 27 de octubre la policía tailandesa entregará el informe completo a partir del cual, el juez pertinente, tomará su decisión sobre el futuro de Daniel Sancho. Por el momento, se desconoce la fecha en la que se celebrará el juicio. Mientras eso sucede, las dos familias, mueven ficha de cara a esa cita clave.
Por el lado de los Sancho, este jueves se desvelaba el viaje de Silvia Bronchalo a la isla de Koh Phangan, donde su hijo acabo con la vida del cirujano plástico con el que mantenía una relación. Esa era la razón de peso por la que no fue a ver a Daniel a la cárcel. Una sonada ausencia que no pasó desapercibida teniendo en cuenta que, desde que pisó Tailandia, no ha dejado de visitarle en prisión ni un solo día. Según fuentes de la Embajada española, Silvia se estaría implicando personalmente en el caso para ayudar en la estrategia de la defensa.
La forma en la que Daniel Sancho perpetró el asesinato del colombiano podría incrementar la cifra final
En cuanto a la familia de Edwin Arrieta, están inmersos en una cruzada judicial y mediática para que se haga justicia. No quieren que Daniel Sancho sea condenado a pena de muerte, como ya ha pedido la policías tailandesas por la crueldad de los hechos consumados. Recordemos que, además de asesinarle, lo descuartizó en 14 partes, ocho de ellas todavía siguen sin aparecer, además de objetos importantes del colombiano, como su móvil o su pasaporte.
A esto, se suma la indemnización que van a exigir los Arrieta al cocinero español y, por extensión, a sus progenitores, Silvia y Rodolfo Sancho. Según el programa 'En boca de todos', la cifra ascenderá a los 500.000 euros que podría ser más si la justicia tailandesa así lo considera. "Quieren la indemnización más alta posible", sentenciaban desde el espacio de Telecinco. El hecho de que Edwin muriera degollado y la forma en la que Daniel, supuestamente, planeó su asesinato podría sumar unos cuantos euros más al saldo final. "Al haber cometido un descuartizamiento y por el dolor que ha hecho padecer a su familia, todo eso supone más dinero", concluyen.