Jessica Bueno y Luitingo, a examen: una psicóloga analiza las fortalezas y debilidades de la pareja

El romance de Jessica Bueno y Luitingo comenzó a fraguarse dentro de la casa de Guadalix. Desde entonces se han convertido en inseparables. La modelo y el cantante han formado un sólido tándem y recientemente les veíamos derrochar amor durante la primera Feria de Abril que viven juntos. Para la exmujer de Jota Peleteiro, esta relación ha supuesto un bálsamo de aire fresco después de un divorcio complicado, pero... ¿tiene futuro esta historia de amor? Analizamos las fortalezas y debilidades de la pareja con una psicóloga. ¡Toma nota!

Hablamos con Lara Ferreiro, psicóloga experta en parejas, quien nos indica que la primera fortaleza que existe entre Jessica Bueno y Luitingo es la edad. "Los dos tienen 33 años. Dicen que la edad ideal para las parejas que funcionan es que sean contemporáneas y que solo se lleven entre uno y dos años. La edad es un punto importante". Además, resalta que el cantante está en un momento de entrega absoluta hacia su chica. "Él lo quiere dar todo. Eso también es importante".

Otro de los puntos fuertes de Jessica Bueno y Luitingo es que están teniendo vivencias comunes que están siendo importantes en sus vidas. "Han estado en 'Gran hermano VIP' y allí el amor es superpotente. Tienen muchas ganas y se han dado una oportunidad. Tienen proyectos juntos. Eso también es otra fortaleza". El último detalle que cierra esta parte de aspectos sólidos es que atraviesan un momento de plenitud en el tema pasional.  

El asunto que puede ser punto de desencuentro entre Jessica Bueno y Luitingo

La psicóloga nos explica que el punto de fricción llegará por el tema de los niños. "Ella no quiere tener más hijos y él sí. Esta relación tiene fecha de caducidad porque esto es una bomba". Lara Ferreiro, que es autora del libro 'Adicta a un gilipollas', nos recuerda que cuando uno quiere ser padre y el otro no, nos encontramos ante una crisis estructural. "La estructura de la casa no va a estar bien montada".

"Todas las parejas que he visto que uno quiere ser padre y el otro no, rompen". La psicóloga nos traslada su experiencia en este caso concreto y apunta lo siguiente: "Salvo que negocien y Jessica, que en este caso es la que no quiere, haga el esfuerzo. Luitingo no va a renunciar a ser padre". 

Otro punto negativo para la sevillana y el cantante es que llevan tan solo cuatro meses de relación. "Eso es muy poquito tiempo. Tienen momentos vitales diferentes. Ella es madre y tiene una familia. Además, también cuenta con traumas del pasado. Siente que se ha anulado por los hombres. Puede tener al principio culpa y todo eso provoque que no termine de cuajar".  

"Ahora se están dejando llevar a corto plazo", asegura la experta sobre Jessica Bueno y Luitingo

Lara Ferreiro nos cuenta que cuando surge un momento de desencuentro importante en la pareja, es importante pararse a analizar la situación. "Resolver las expectativas de cada uno. Después de uno o dos años, cuando se pasa la primera fase de enamoramiento, de hecho, lo potente de enamoramiento dura seis meses".

Asimismo, nos indica que para que una pareja funcione debe existir "apoyo y compresión mutua. Aceptación y sacrificio". También es fundamental "trabajar los miedos e inseguridades". Otro punto a resaltar es que haya una comunicación abierta". Y es que si se mantienen los traumas del pasado "hay que trabajarlos". Las expectativas de futuro de ambos tienen que venir de la mano. 

En cuanto a Jessica Bueno y Luitingo subraya que se "están dejando llevar a corto plazo, pero a largo plazo esto no va a llegar a ningún lado si uno quiere ser padre y la otra no". En los últimos meses, hemos sido testigos de cómo están dando pasos importantes en su relación, sin embargo, la renuncia a la paternidad es un tema clave que les pasará factura. "Luego se echa en cara toda la vida. Es supertraumático. Tendrán que ir a terapia de pareja y sopesar si eso merece la pena o no. Y que haya una negociación".

Asimismo, Lara Ferreiro valora la posibilidad de que Jessica dentro de unos años siga enamorada y se anime a tener un cuarto hijo. "La efervescencia del enamoramiento, la oxitocina, la hormona del amor, eso te puede cambiar tus propias percepciones". Por último, la psicóloga nos recuerda que si la relación no funciona, él podrá ser padre porque el reloj biológico de los hombres tiene una mecánica muy distinta al de las mujeres.