ARTISTAS en mayúsculas ha habido pocas. Concha Velasco ha sido una de ellas, tal y como lo fueron sus predecesoras Carmen Sevilla, Sara Montiel, Lola Flores, Paquita Rico o Marujita Díaz. La veterana actriz nos dejaba este 2 de diciembre debido a una complicación en su enfermedad, tal y como indica la nota emitida por sus hijos, Manuel y Paco.

Poco a poco hemos ido despidiendo a todas estas grandes de España y, a las últimas grandes pérdidas, se han sumado dos mujeres que han hecho historia por su incansable trabajo, su arrolladora personalidad y su lucha por conseguir el papel que la mujer merece en la sociedad actual. Hablamos de las queridas María Teresa Campos y María Jiménez, dos maravillosas profesionales que se enfrentaron a cualquier desafío que se les puso por delante, como las intrépidas mujeres que fueron.

Las míticas estrellas del cine, la televisión y el teatro se han ido apagando una tras otra. La luz de última de ellas, Concha Velasco, lleva desvaneciéndose desde finales de 2021, cuando le diagnosticaron Alzheimer. La lucha contra esta enfermedad la llevó a ingresar varias veces en el hospital hasta que ingresaba definitivamente en la residencia Orpea Punta Galea en Las Rozas (Madrid). A día de hoy se sigue especulando sobre sus finanzas y posible ruina. También sobre la polémica que supuso que fuera madre soltera en los años setenta. De hecho, no fue hasta el año pasado cuando se supo quién era el padre biológico de su hijo, Manuel Velasco.

Los críticos de la gran pantalla coinciden en que su gran momento llegó con 'Las chicas de la Cruz Roja', con ese papel que tan bien hacía y tanto se le parecía: de chica pizpireta, enamoradiza, pero con carácter y sin dejarse avasallar. Su último adiós en los escenarios fue con 'La habitación de María', en septiembre de 2021, en el Teatro Calderón de Valladolid, su tierra natal. Una despedida tras casi siete décadas de carrera.

En la vida de Concha Velasco hubo muchos triunfos profesionales, pero también sonoros fracasos a nivel personal. Su matrimonio con Paco Marsó estuvo plagado de problemas: sus infidelidades, sus fiestas nocturnas y su adicción al juego dejaron las cuentas de la actriz en bancarrota. Pero eso no fue todo. A la ruina a la que le llevó su marido, se sumaron algunas inversiones que salieron realmente mal. Producciones teatrales como 'Hello Dolly' o 'Matahari' dejaron tiritando a la actriz, que seguía luchando sin darse por vencida. Eso sí, para recuperar su vida, tuvo que vender su mansión en La Moraleja, su piso en Madrid y una casa en Cullera. Y, aunque fue tirando, su situación se volvió tan delicada que confesó en la prensa que tuvo que "vender la cubertería para poder comprar medicinas en la farmacia".

A pesar de estos últimos años marcados por su enfermedad, Concha Velasco ha despuntado como pocas actrices lo han hecho en nuestro país. Esperamos que nuestro homenaje, a través de un repaso histórico a sus mejores fotos, brille tanto como siempre brilló ella.