María Jiménez era una mujer de rompe y rasga. En su vida hizo lo que le dio la gana e intentó superarse hasta el último momento, de hecho, jamás dejó de sonreír. Ni siquiera en su último aliento. Una carrera cargada de talento que muchos podrían imaginar que le llevaron a amasar un importante patrimonio, sin embargo, nada más lejos de la realidad. Aunque tras su separación de Pepe Sancho, ella se quedó con tres propiedades, lo cierto es que en la actualidad solo tenía una de ellas. La artista vivió hasta el final de sus días en una coqueta casa de Chiclana (Cádiz), vivienda de 140 metros cuadrados y una parcela de 3.300. Era su hogar y no lo hubiera cambiado por nada del mundo, pues le transmitía verdadera paz, pero ¿qué otros inmuebles compró a lo largo de su vida?
María Jiménez no deja un relevante patrimonio, a pesar de su éxito en los escenarios
La casa de Chiclana la adquirió en el año 1990 cuando todavía estaba casada con Pepe Sancho, pero se escrituró a su nombre y así figuró hasta su muerte. Eso sí, no fue la única que compró gracias a su trayectoria como artista. Ni mucho menos. Antes de poner punto y final a su matrimonio con Pepe, compró un precioso ático en la mítica calle de la Gran Vía en Madrid y un chalet familiar en la urbanización de El Bosque. Dos lugares a los que ella tenía cariño, pero que puso a la venta a la vez en el año 2003, dejando únicamente el inmueble gaditano en el que pasó tantos momentos con su hijo y sus nietos.
María Jiménez se casó en separación de bienes con Pepe Sancho
Aunque hay a quien le pueda chocar que María Jiménez dejara esta escueta herencia, cabe señalar que esto podría haber sido diferente si no fuera porque hizo separación de bienes con Pepe Sancho. Ella misma lo recordó en una entrevista concedida a 'Sábado Deluxe' en el año 2016: "A mí me daba vergüenza pedírselo, pero yo vi el cielo abierto cuando él me lo pidió, porque él no trabajaba". Ella comenzó a invertir, pero él "no hizo nada" según la versión de la artista. Dos situaciones económicas completamente dispares y que se distanciaron todavía más con su divorcio. "Pepe solo me dejó 4 millones de pesetas. Lo que había en el banco se lo llevó, se llevó todo", contó María Jiménez.
Ahora será Alejandro el que heredará sus recuerdos y las ganancias de una artista que consiguió acaparar la atención allá donde fue. A esto se sumaría, por ejemplo, los derechos de autor de sus canciones, los cuales también proporcionarán beneficios al hijo de María Jiménez año tras año. Recordemos que vendió muchísimos discos, tanto es así que en el que cantaba por Joaquín Sabina vendió 500.000 copias, cifra nada desdeñable y por la que llegaría a recibir 750.000 euros.No siempre tuvo suficiente dinero para llegar a fin de mes. Cuando comenzó empleó su primer sueldo como cantante a comprarse una nevera, detalle que refleja que no siempre recibió importantes cantidades de dinero por su trabajo. Cinco años de carrera musical en el que publicó 18 álbumes y en los que participó también en películas y series de televisión que también le reportarían dinero en su vida.