Las noticias sobre Kate Middleton son cada vez más positivas, aunque todavía se cierne sobre su estado de salud un halo de hermetismo casi absoluto. Determinada a volver a sus deberes reales cuanto antes, nada ha trasladado el Palacio de Kensington sobre su inminente paso por el hospital después de terminar su tratamiento de quimioterapia contra el cáncer que padece.
Cada vez más recuperada, la mujer del príncipe Guillermo tendrá que ingresar en su centro de referencia no por el empeoramiento de su estado, sino por unas pruebas que le tienen que realizar para garantizar que todo va viento en popa. Mientras la futura reina retoma la normalidad del cargo que ostenta, se ha conocido ahora un detalle hasta ahora desconocido que tiene mucho que ver con esta vuelta al trabajo y sus tres hijos, Jorge, Charlotte y Louis.
Las exigencias de Kate Middleton respecto a sus hijos que han marcado el futuro y presente de la casa real británica
Poco a poco, Kate Middleton va recuperando su vida después de más de nueve meses alejada del foco mediático a raíz del cáncer que le fue diagnosticado a principios de años. La vuelta al cole de sus hijos, en la exclusiva institución Lambrook School, que cuesta la friolera de 70.000 euros por niño al año, le ha permitido centrarse más si cabe en su recuperación para, así, poder retomar su agenda institucional con todas las de la ley. En estos largos y complicados meses de ausencia de la madre de Jorge, Chalotte y Louis, ella y su marido se han blindado en Adelaide Cottage, su residencia oficial, situada a las afueras de Londres, desde donde han hecho del cuidado de sus hijos su prioridad.
Para la futura Reina, estar presente en la vida de sus hijos en el día a día no es algo nuevo, aunque sí se ha visto reforzado tras su diagnóstico. De hecho, siempre ha tenido muy claras sus ideas respecto a este asunto de anteponer las necesidades de los menores, primero, y sus responsabilidades institucionales, después. Antes de casarse con el Príncipe Guillermo puso sobre la mesa una serie de condiciones que no solo han definido su matrimonio, sino que han determinado el futuro de la casa real británica. La princesa de Gales negoció una serie de normas para poner límites a su trabajo al frente de la institución si eso suponía desatender las necesidades de Charlotte, Louis y Jorge.
El profundo dolor de la princesa de Gales cuando tiene que anteponer sus deberes a su faceta de madre de Charlotte, Jorge y Louis
La postura de no anteponer su papel como princesa al de madre es innegociable para Kate Middleton. Ahora bien, hay momentos en los que no le queda otra que ejercer su cargo y dejar a sus hijos en casa. Algo que, de acuerdo con la prensa británica, le genera un "profundo dolor oculto", sobre todo cuando debe embarcarse en giras por el extranjero. Está tan apegada a sus hijos y estos a ella que, para la nuera del Rey Carlos III es un auténtico quebradero de cabeza cada vez que se tiene que alejar de ellos durante días.
"Si bien Kate ha estado fuera de acción durante los últimos meses debido a su tratamiento contra el cáncer, cuando Kate está lejos de sus hijos durante períodos prolongados lo pasa especialmente mal. Es bastante complicado para ella", indican desde 'The Mirror'. A pesar del aplomo y saber estar que demuestra la princesa de Gales en cada aparición, según la autora real Katie Nicholl, que la ha acompañado en varios viajes oficiales fuera de Reino Unido, le resulta especialmente difícil "estar separada de su familia".
"A pesar de ser la Princesa de Gales y poder permitirse niñeras las 24 horas, su madre se ocupaba de sus hijos, lo que me pareció muy normal. Pude comprobar cuánto consuelo y confianza le da eso para seguir adelante con su trabajo, que hace de manera brillante, pero siempre es muy doloroso para ella dejar a sus hijos atrás", explica la experta en conversaciones con el citado medio.
La firme decisión de Kate Middleton que ha redoblado tras su diagnóstico de cáncer
Las nuevas revelaciones de Nicholl confirman lo que el biógrafo Robert Jobson ya recogió en su libro 'Catherine, la Princesa de Gales: la biografía', sobre el compromiso tan grande que mantiene Kate Middleton respecto a su faceta como madre y dejó por escrito antes de darse el 'sí, quiero', con su marido. "Estableció unas reglas bien claras para no ser encasillada a la hora de llevar a cabo ciertos deberes e insistió en disfrutar de su baja de maternidad, lejos de los medios y de la opinión pública", señala el escritor.
La postura de la futura Reina no significaba, en cualquier caso, que no llevaría a cabo sus deberes reales como corresponde. Sí, como expresó desde el inicio, su deseo de tener más espacio para desarrollarse en su rol de madre que concilian con el de princesa dentro de una de las realezas más poderosas del mundo.