En medio de las especulaciones sobre la tradición que Kate Middleton está a punto de romper en medio de su lucha contra el cáncer y afecta directamente al príncipe Jorge, ahora se ha conocido que la princesa junto a su marido barajan la posibilidad de dar un giro radical a su vida. Esto de acuerdo con la prensa británica, que emplaza a la real pareja en una residencia que no es la suya, debido a las recomendaciones que estarían recibiendo por parte del rey Carlos III.

Una decisión que, en caso de hacerse realidad, tendría graves consecuencias para el príncipe Andrés, el gran damnificado en caso de que las quinielas se cumplan, y el devenir de la corona real británica.  

El 'plan maestro' de Carlos III que supone un cambio de vida radical para el príncipe Guillermo y Kate Middleton

La recuperación de Kate Middleton y su posible reaparición en los Juegos Olímpicos de París, que se celebran hasta el 11 de agosto, sigue copando la actualidad informativa dentro y fuera de nuestras fronteras. Pero no es la única noticia que se desprende de la familia real británica. Mientras ella y el Príncipe Guillermo de Inglaterra ultiman los preparativos de su viaje al Castillo de Balmoral, en Escocia, donde pasarán parte de sus vacaciones junto a sus tres hijos, el monarca y la reina Camilla, todo parece indicar que, a su vuelta (o, incluso, antes) deberán tomar una decisión trascendental.  

Hace unos meses, la prensa de Reino Unido se hizo eco de un movimiento inédito por parte del padre de Harry y Guillermo que pasaba por romper con la tranquilidad de su hermano, el príncipe Andrés. De acuerdo con varias fuentes, Carlos III tendría urdido un plan maestro para 'desalojarle' de su gran mansión y darle un nuevo uso, "mucho más lógico", apunta ahora 'The Mirror'. En medio de su lucha contra el cáncer y la de su nuera, el soberano le ha hecho una propuesta a su hijo y la mujer que rompe con el propósito inicial que quería darle a la imponente mansión de Royal Lodge, donde reside actualmente el exmarido de Sarah Ferguson. Esta es: alquilarla por una cifra multimillonaria que, además, serviría para engrosar las arcas de la corona y destinar el dinero a otros menesteres necesarios, de acuerdo con el citado medio inglés. 

El príncipe Andrés y Carlos III en su última aparición conjunta. GTRES

El príncipe Andrés y Carlos III en su última aparición conjunta. GTRES

La complicada situación del príncipe Andrés que podría beneficiar a los príncipes de Gales

Pues bien. Parece que Carlos III ha cambiado de parecer. No en cuanto a lo de echar a su hermano de su exclusivo domicilio, pero sí sobre qué hará con ella. Cabe recordar que el príncipe Andrés vive apartado de sus obligaciones institucionales desde 2022, tres años después de que saliera a la luz su estrecha relación con el multimillonario Jeffrey Epstein, quien se quitó la vida en la cárcel en 2019 a la espera de su juicio por delitos de tráfico sexual, entre otros. A esto le siguió la acusación por abuso sexual que interpuso contra el hijo favorito de la Reina Isabel II, Virginia Giuffre. Unos hechos que sucedieron cuando ella era todavía menor de edad.

Indica 'The Mirror' que Carlos III está aumentando la presión sobre su hermano para que abandone de forma inmediata Royal Lodge, que se cae a pedazos, y, lo más sorprendente, con el objetivo de entregarles la mansión al príncipe Guillermo y Kate Middleton. Quiere que los futuros reyes la conviertan en su domicilio oficial, donde pasarían a vivir con sus tres hijos, Jorge, Charlotte y Louis. A pesar de estas contundentes afirmaciones recogidas bajo la fórmula del condicional, el citado diario también se hace eco de las declaraciones de varios expertos reales que aseguran que "la pareja real parece estar muy feliz y establecida en su residencia actual, Adelaide Cottage, en Windsor Great Park". Por lo tanto, sin atisbos de querer embarcarse en una tediosa mudanza. 

El príncipe Guillermo y Kate Middleton se habrían negado a abandonar su residencia actual, donde viven con sus hijos

"Adelaide Cottage se ha acondicionado como una casa familiar y, según las últimas, informaciones, no hay personal residente. Mudarse al enorme Royal Lodge significaría tener que alojar al personal doméstico, algo a lo que se dice que Guillermo y Kate se han resistido", señala 'The Mirror'. Cabe apuntar que las dimensiones de la actual residencia del príncipe Andrés nada tienen que ver con las de Adelaide Cottage, mucho más reducidas y abarcables. 

Como contó Gareth Russell, biógrafo real, a GB News, la mansión donde vive Andrés, que pertenece en última instancia a la corona real británica, siempre ha alojado a miembros de la realeza de alto rango. Como dato curioso, antes de su fallecimiento, fue el domicilio de la reina madre. Es por ello que, "la elección lógica, por supuesto, para mudarse a vivir ahí serían los príncipes de Gales que, por otro lado, ya han mostrado relativamente poco interés en trasladarse a Royal Lodge", sentencia el experto. En otras palabras, todo parece más un rumor que una posibilidad real.