El arzobispo de París, Lauren Ulrich, reabría oficialmente la Catedral de Notre Dame el pasado sábado 7 de diciembre. A la solemne ceremonia acudían decenas de dirigentes de todo el mundo, como el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump. También había una gran representación de la realeza europea, como el Príncipe Guillermo.
Antes de la ceremonia, el político y el hijo del Rey Carlos III mantenían un encuentro privado en el que recordaron algunas anécdotas con la Reina Isabel II. Muchos se han preguntado si durante su conversación pudieron hablar del Príncipe Harry, quien actualmente vive en California y tiene una cruzada pública con el empresario. De hecho, Trump prometió deportar al hijo pequeño de Diana de Gales si ganaba las elecciones. Días después de esta reunión, un experto real ha revelado cuál ha sido la reacción del marido de Meghan Markle.
Según publica 'Daily Mail', el Príncipe Harry está "indignado y preocupado" por la reunión que han mantenido Donald Trump y su hermano, el Príncipe Guillermo. Tom Bower, experto real, recalca en el medio británico que el hijo pequeño del Rey Carlos III no debe estar muy contento con lo ocurrido.
"Él está en medio de una disputa sobre su visa. Donald Trump tiene ahora el poder de decidir si su solicitud será publicada por los tribunales estadounidenses. Incluso podría intentar deportarlo si se descubre que mintió sobre su consumo de drogas cuando llegó al país", apunta el biógrafo real.
El periodista está firmemente convencido de que tanto Harry como Meghan Markle, a quien define como "los exiliados en Montecito", deben estar "profundamente indignados". "Odian a Trump y, a diferencia de los insignificantes eventos a los que asistieron los Sussex, Guillermo estuvo en un escenario mundial junto a todas las personas poderosas", indica este experto real.
Por otro lado, otro experto real, Phil Dampier, también coincide con el escritor y pone de relieve el alarmismo que deben sentir los Sussex tras esta reunión. "Deben estar preocupados de que una presidencia de Trump los ponga en peligro. Harry admitió haber consumido drogas, pero no sabemos si lo declaró, como debería haber hecho, en su solicitud de visado", agrega. Hay que recordar que el político, durante la campaña electoral, dejó claro que el hijo pequeño de Diana de Gales no obtendría privilegios especiales.
Por otro lado, desliza que habrá nuevas visitas del presidente electo de Estados Unidos a Reino Unido y cree que pueda recibir en la Casa Blanca al Rey Carlos III y a la Reina Camilla. "Es probable que él venga aquí el año que viene y ellos le visiten el año siguiente. Combinarán una visita a Estados Unidos con otra a Canadá. Tenemos suerte de que Trump ame la monarquía. A menudo decía lo mucho que su madre escocesa adoraba a la Reina Isabel II. Sería una locura echar por tierra esa arma", opina este experto.
La conversación privada entre Donald Trump y el Príncipe Guillermo
Donald Trump ha manifestado que tuvo una "gran charla" con el Príncipe Guillermo el pasado sábado, tras la reapertura de Notre Dame en París. Ambos se reunieron en el Salón Amarillo de la residencia del embajador británico y pudieron hablar de la salud de Kate Middleton y el Rey Carlos III.
En concreto, tal y como él mismo ha revelado, fue Donald Trump quien le preguntó al Príncipe de Gales por cómo se encontraba su mujer y su padre. "Tuvimos una gran conversación. Le pregunté por su esposa y me dijo que estaba bien. Le pregunté por su padre y él está luchando muy duro. Ama a su padre y ama a su mujer. Fue triste. Estuvimos hablando durante media hora, un poco más. Tuvimos una gran conversación", explicaba el presidente electo de Estados Unidos a 'New York Post'.
Por otro lado, el político también se deshacía en halagos hacia el Príncipe Guillermo. Sobre él aseguraba que era "un chico atractivo". "Se veía muy guapo el sábado. ¿Hay gente que se ve mejor en persona? Él estaba genial. Se le veía muy bien y se lo dije", agregaba. En su encuentro, Donald Trump y el Príncipe Guillermo estrecharon la mano y el empresario no dudó en piropearlo delante de los periodistas allí presentes. "Bueno hombre. Está haciendo un trabajo fantástico", aseguró.
Según ha trascendido, el político y el hijo de Carlos III hablaron sobre diferentes asuntos de importante calado global. No obstante, se centraron la importancia de la relación entre el Reino Unido y Estados Unidos. También tuvieron tiempo para hablar de la fallecida Isabel II. La última vez que se vieron el Príncipe Gales y el actual presidente electo fue en 2019 durante una visita de Estado del último.