Desde que Kate Middleton anunció el pasado mes de marzo que padece cáncer y recibe quimioterapia, ella y el príncipe Guillermo han tenido dos únicas prioridades. La primera, que la princesa de Gales se recupere lo antes posible de su enfermedad. La segunda: que la normalidad de sus tres hijos, Jorge, Charlotte y Luis, se vea alterada lo menos posible. 

Es por eso que la pareja real se ha dedicado por completo a estar al lado de los menores ante esta delicada situación y protegerles a como dé lugar, tratando de que les llegue la mínima información sobre el estado de su madre. También están enfocados en que los pequeños no repitan el camino de su tío, el díscolo Harry, cada vez más solo y distanciado de los suyos. 

Los tres hijos de Kate Middleton y el príncipe Guillermo, en el centro de las últimas decisiones de sus padres

Para Kate Middleton y el príncipe Guillermo esta está siendo una de las etapas más desafiantes de sus vidas y han decidido afrontarlo en familia y poniendo por delante sus necesidades más inmediatas, así como las de sus tres hijos. "Ella y Guillermo han podido tener algo de espacio y tiempo como pareja y como familia, y hacer las cosas que son importantes para ellos y sus hijos antes de tener que dedicarse por completo al pueblo británico. Cuando llegue el momento, estarán más que preparados para afrontar el reto", señalaba Jamie Lowther-Pinkerton, exsecretario de los Windor, a 'Vanity Fair'. 

Garantizar el bienestar de Jorge, de 10 años; Charlotte, de 9, y Luis, de apenas 6, ha sido una máxima para sus famosos padres, como la futura reina trasladó en el vídeo con el que informó a la opinión pública de que padece cáncer. "Me ha tomado tiempo recuperarme de una cirugía mayor para poder comenzar mi tratamiento. Pero, lo más importante, nos ha tomado tiempo explicar todo a Jorge, Charlotte y Luis de una manera que sea apropiada para ellos y asegurarles que voy a estar bien", señaló en ese momento. Nada ha cambiado desde entonces y, de hecho, han ido un paso más allá. Los príncipes de Gales están más volcados que nunca en garantizar que los niños nunca se vean en las mismas circunstancias que Harry. 

Kate y Guillermo en el Trooping the colour.

Kate y Guillermo en el Trooping the Colour con sus tres hijos.

Gtres

La medida de los príncipes de Gales para proteger a sus hijos, en especial a Charlotte y Luis

De acuerdo con el 'Daily Mail', Guillermo y Kate Middleton están poniendo todas las medidas a su alcance para que la familia real se mantenga unida, y eso pasa por promover que sus hijos menores (Charlotte y Luis) no se dediquen a sus responsabilidades institucionales a tiempo completo una vez alcancen la mayoría de edad. En el caso de Jorge, como futuro heredero al trono, no le va a quedar más remedio. "Están evitando que los menores, sobre todo la princesa Charlotte y el príncipe Luis, sigan sus pasos de forma estricta. Por eso les están manteniendo alejados de los focos todo lo que pueden con el objetivo de que crezcan con normalidad y puedan decidir quiénes quieren ser sin presiones externas", coincide en apuntar una fuente cercana al matrimonio al 'Daily Beast'.

La principal razón que ha propiciado esta decisión no es otra que la toma de conciencia por parte del príncipe Guillermo de la nula relación que mantiene con el duque de Sussex, sin atisbos de mejorar en el corto ni en el mediano plazo. Un distanciamiento que se ha visto reforzado por la falta de apoyo que el heredero al trono ha recibido de su hermano a pesar del cáncer de su mujer. "Guillermo culpa a Harry y Meghan Markle de la actual situación, por supuesto. Pero también sabe que el sistema monárquico, donde uno o varios de los hijos del monarca son menos importantes que el primero en nacer, tuvo un papel muy significativo en lo que sucedió y cómo sucedió. Quieren encontrar una solución práctica al problema de los 'repuestos' que ha atormentado a la familia real británica durante generaciones", apunta esta misma fuente.

El cambio de paradigma de Kate Middleton y Guillermo para no repetir los errores del pasado

Tanto Kate Middleton como el príncipe Guillermo, sobre todo este último, son conscientes del peso y la presión que tendrán que soportar sus tres hijos cuando sean adultos. En especial, Jorge, en quien recaerá el peso de la corona de una de las monarquías más protocolarias que existen. Por eso están apostando por un enfoque completamente inédito a la hora de afrontar su crianza, centrado en que los niños tomen decisiones independientes y pongan en práctica su autonomía desde una edad muy temprana, puntualiza la experta real Amanda Matta a 'The List'. 

"Los príncipes de Gales consideran que el 'camino tradicional' que deberían seguir sus hijos en términos de formación puede disminuir el sentido de identidad de un individuo. Por eso están yendo a contracorriente: quieren demostrar cómo la nueva generación de miembros de la realeza puede cumplir con sus deberes institucionales y al mismo tiempo tener una identidad propia. Es posible que estén aflojando las riendas. Guillermo y Kate están criando a Jorge, Charlotte y Luis para que se comprometan con sus futuros roles y deberes públicos, pero sin olvidar su bienestar", sentencia la experta.

En otras palabras, no quieren que el heredero al trono sufra las presiones que el propio hijo de Rey Carlos III ha tenido que afrontar, ni tampoco que sus dos hijos menores sientan el lastre de ser "los segundones". Un sentimiento que podría llevarles a convertirles en los próximos Harry y desligarse completamente del resto de miembros de la corona. Como le ha sucedido al marido de Meghan Markle, más solo que nunca.