"Vivir a cuerpo de rey". Solemos usarlo como sinónimo de lujos y comodidades, aunque después de ver las 6 temporadas de 'The Crown', queda claro que la vida palaciega guarda más momentos amargos de los que imaginamos, y que dedicarse por completo a tu país puede resultar, cuanto menos, extenuante.
Margarita de Dinamarca: la reina que abdicó en mitad de la polémica
Margarita de Dinamarca (83 años) es el ejemplo perfecto, y tras 52 años en el trono, el pasado 31 de diciembre de 2023 hizo pública su decisión de abdicar en favor de su hijo Federico. Esta repentina decisión ha sido una sorpresa que nadie esperaba, sobre todo si tenemos en cuenta que tanto ella como sus primos, Harald de Noruega, de 86 años, y Carlos XVI Gustavo de Suecia, de 77 años, habían manifestado en varias ocasiones, su intención de seguir reinando hasta el final de sus días. Los motivos que han impulsado a la última monarca europea a quitarse la corona, no están exentos de tramas dignas de una buena serie. Durante su discurso, Margarita hizo referencia a su reciente operación de espalda y su deseo de cuidar su salud. No obstante, muchos piensan en una estrategia para devolverle la buena salud a la monarquía danesa, amén del escándalo del futuro rey tras su encuentro con Genoveva Casanova —paseo por el Retiro, cena y pernocta incluida—, y un ultimátum de su nuera, Mary Donaldson, que amenazó con dejar a su marido si no la hacían reina consorte.
Pese a la conmoción de la noticia, debemos recordar que no ha sido la primera (ni la última) en abdicar. La han precedido muchos los reyes y reinas que han renunciado a sus derechos y obligaciones, algunos por salud, otros por amor y unos cuantos por estrategia. Te contamos los casos más jugosos que nos ha dado la realeza.
¿Por qué abdicó el Rey Juan Carlos I?
Empecemos por la casa y por la historia reciente del emérito, quien tuvo que ceder paso a su hijo y actual rey de España, Felipe VI, envuelto en una trama de amantes, cacerías ilegales y malversación de fondos. En 2014 el Salón de Columnas del Palacio Real fue el escenario de la despedida de uno de los reyes más carismáticos y controvertidos que hemos tenido. A sus 86 años, Juan Carlos I de Borbón vive en Abu Dabi y sigue dando mucho de qué hablar.
Qué paso con Eduardo VIII (Duque de Windsor), del Reino Unido
Imposible no volver a citar la ya mítica serie de Netflix para hablar de uno de los escándalos que conmocionó a la sociedad de mediados del siglo pasado. En enero de 1936, el primogénito de Jorge V, Eduardo VIII, se convertía en rey de Inglaterra para abdicar en diciembre de ese mismo año, dejándole la encomiable misión a su hermano, Jorge VI, y abriendo una nueva línea de sucesión de la corona británica —la misma que llevaría a Isabel II a reinar durante 70 años—. El motivo de tal decisión no fue otra que el amor, y es que el duque de Windsor se enamoró perdidamente de Wallis Simpson, una americana que, además de no pertenecer a la aristocracia, se había divorciado en dos ocasiones. Se casaron en París el 3 de junio de 1937 y vivieron en un majestuoso edificio situado en el Bois de Boulogne, conocido como 'Villa Windsor'. Permanecieron juntos hasta la muerte de Eduardo; su relación duró alrededor de 38 años.
Las abdicaciones en las monarquías de Países Bajos, Bélgica y Luxemburgo: los reinados más calmados
En las tres monarquías constitucionales europeas las abdicaciones son tradición, y no tienen reparos en renunciar a sus derechos a favor de sus vástagos. En los Países Bajos son varias las generaciones que han colgado la corona. Beatriz de Holanda renunció en abril del 2013 tras 30 años de mandato para que reinara su hijo Guillermo. Así lo hicieron antes su madre, la reina Juliana, y su abuela Guillermina en 1948, quien heredó el trono con tan sólo 10 años.
El discurso de la reina fue televisado, y afirmó que era el momento de "poner la responsabilidad del país en manos de una nueva generación".Alberto II, de Bélgica: En Bélgica también aceptan la ascensión de los primogénitos reales al trono de buen grado. Alberto II sucedió a su hermano Balduino en julio de 2013. Su padre, Leopoldo III, abdicó en 1951 por una crisis ocasionada por la Segunda Guerra Mundial. El Gran Duque Juan, Luxemburgo: En 2020 este abdicó para que su hijo Enrique se convirtiera en rey de Luxemburgo, algo que no sorprende si sabemos que Juan subió al trono en 1964, tras la renuncia de que su madre Charlotte.
Japón: cómo se produjo la primera abdicación en 202 años
Akihito llevaba 30 años en el Trono del Crisantemo cuando abdicó por problemas de salud, dejando a su hijo Naruhito como emperador e iniciando así la nueva era Reiwa. Sucedió en 2019, siendo la primera abdicación imperial en 202 años, lo que obligó a hacer una ley excepcional, dado que la Constitución de 1947 no contemplaba una situación similar.
La familia nipona ha sido foco de la atención mediática y es que brindan historias dignas de una película de romance, como la de la princesa Sayako, hija menor de Akihito que, pese a no poder reinar, sí que renunció a todos sus títulos y privilegios por amor. En 2005 se casó con un funcionario llamado Yoshiki Kuroda, abandonando la casa imperial. Actualmente es la suma-sacerdotisa del Gran Santuario de Ise, una posición que heredó de su tía.