Podemos celebrar el amor de muchas maneras, con nuestra pareja, amigos o con nosotras mismas. ¿Qué mejor forma de hacerlo que con una manicura especial? El día de San Valentin es una excusa perfecta para apostar por esas manicuras dulces y románticas que favorecen tanto y estilizan las manos. Las manicuras Clean y Coquette son tendencia, dos estilos elegantes que seguro que te van a conquistar.

Manicuras Clean y Coquette

El estilo Clean es pura tendencia, es como el "pequeño vestido negro" de las manicuras: elegante, atemporal y perfecto para cualquier ocasión porque es un estilo simple pero muy sofisticado Los colores neutros son los reyes aquí: piensa en blancos, nudes y rosas pálidos. Si quieres darle un toque extra, puedes añadir detalles delicados como finas líneas en blanco o dorado, pequeños puntos o incluso un degradado sutil. La idea es mantener las uñas bien cuidadas y pulidas, dejando que la belleza natural de tus manos brille.

Si te sientes más atrevida y quieres un look que grite "romanticismo", el estilo Coquette es ideal para ti. Este look se inspira en la coquetería y el encanto femenino, con colores vivos y decoraciones con mucho encanto. Aquí puedes dejar volar tu creatividad con tonos rosas, rojos y pasteles. Y si quieres llevarlo al siguiente nivel, añade detalles como corazones, lazos, flores o incluso un toque de brillo. No temas experimentar con texturas como el glitter o el acabado mate para darle un toque único a tu manicura.

El consejo de la experta

Estas dos manicuras demandan unas uñas de un largo y forma determinada. Berenice Espejo, manicurista oficial de Entity en España, apuesta claramente por las manicuras Clean y Coquette: “Necesitamos para ello unas uñas de tamaño medio en forma oval que favorecen y estilizan los dedos, con base en tonos nude, milky y rosa liso o con efecto baby boomer blanco o rosa muy discreto y efecto glassé, combinado todo con nail art en finos detalles, destacando los rojos, blancos y dorados en palabras de amor, lazos, mini french, líneas finas, puntos rosas o pequeños corazones”.

Si tienes las uñas cortas, tu manicura será más práctica y también muy elegante. La experta señala que un estilo clásico minimalista es perfecto en estos casos: “Por ejemplo, en forma cuadrada y ovalada, maquilladas en colores lisos como el cereza, el rojo o colores de invierno en tonos grises, verdes, en escalera de color combinado con el color Pantone de este año Mocha Mousse”. 

¿Qué pasa con las uñas de tamaño medio a largo? Berenice, en estos casos, recomienda dar un paso más allá y ser un poco más atrevidas: “Sin duda, mejor en forma de ballerina, almendra o stiletto, excelentes para expresar con nail art y/o pegatinas el amor por la vida, la pareja, los amigos o por ti misma. Buscamos una manicura combinada en uñas de un color, ya sea liso o con glitter, todo es válido incluida la francesa clásica o baby boomer, en diferentes colores con diseños llamativos como grandes corazones, besos, incluso en efecto 3D. El color blanco también es protagonista combinado con el rojo, el rosa, hasta azules y verdes… todo en una expresión sin límites”.

Los tonos estrella de las manicuras en San Valentín

Cuando la primavera está a la vuelta de la esquina comienzan a predominar los tonos pastel en las manicuras y el Día de los Enamorados es el preludio de las tendencias que veremos durante esta estación de florecimiento: “Veremos un renacer de las uñas coquette que ya triunfaron la pasada primavera y que también lo harán este año por San Valentín, se trata de una manicura muy femenina en tonos suaves, relajados, nada estridentes con lazos incrustados, corazones o perlas. Un azul bebé, un albaricoque, un lila, un celeste, un salmón o un marfil son perfectos para lucir unas coquette”.

Si dejamos a un lado los tonos pastel pero sin salirnos de las tendencias de la temporada, el cherry red sigue siendo un tono muy de moda. Un rojo intenso y con mucho carácter ideal para ponerle el broche de oro a tu look de San Valentín: “Es un tono con personalidad, que llama mucho la atención y es sumamente sensual y glamuroso”.

Manos cuidadas y bonitas

Para que una manicura luzca en todo su esplendor es fundamental tener las manos y las uñas cuidadas. Unas uñas saludables y fuertes son la base sobre la que se construye una buena manicura. Cuando las uñas están bien hidratadas y nutridas, el esmalte se adhiere mejor y se reduce la probabilidad de que se astillen o se quiebren, y también dura mucho más en perfectas condiciones.

Unas uñas bien cuidadas evitan la aparición de padrastros y mejoran la apariencia general de las manos. Por otro lado, la piel de las manos necesita estar suave y muy hidratada para que la manicura no se vea deslucida por manos agrietadas o ásperas. Aplicar regularmente cremas hidratantes y aceites específicos para las uñas y cutículas puede marcar una gran diferencia.

Y tú, ¿con cuál te quedas? ¿Manicura Clean o Coquette?