El Vestidor de la Reina Letizia, aparte de dar nombre a nuestra sección, también es un espacio real y físico. Ya nos gustaría conocer todos sus entresijos, poder entrar y recorrerlo para saber cómo es exactamente ese sacrosanto lugar en el que la soberana se pone guapa. No en vano, Letizia ha sido elegida entre las más elegantes del mundo gracias a sus looks de impacto.
Por fortuna, en SEMANA contamos con expertos para facilitarnos la labor. ¿Cómo puede ser? ¿En cuántos espacios se distribuye? ¿Qué cuidados requieren sus prendas y joyas más especiales? Señoras y señores, abrimos las puertas del Vestidor...
Se sabe que la Reina Letizia dispone de una amplia zona como guardarropa al lado de su habitación en el complejo de La Zarzuela, en concreto en la segunda planta en el llamado Pabellón del Príncipe (que es donde reside la Familia Real española y donde se encuentran sus dependencias privadas). El vestidor, por lógica, se sitúa en su vivienda, donde ella se prepara para sus eventos y para su día a día.
El armario de la Reina Letizia, bajo un férreo control
El 'armario' de la consorte es gigante. Como la mayoría de estos espacios diseñados por especialistas, el suyo se divide en diferentes zonas abiertas, provistas de baldas, barras y perchas a la vista (muy recomendado por los entendidos) y armarios cerrados para el almacenaje de prendas delicadas, como la ropa interior.
El relevante papel institucional de Letizia hace que su vestidor sea esencial para el desempeño de sus funciones. No es algo banal. Su imagen vende Marca España. Y aunque su vestidor físico sea algo parecido a un búnker, de tan secreto, se va desgranando con cada salida que hace.
El consejo profesional para el Vestidor de la Reina Letizia
Jesús Reyes, experto en moda y autor del libro "Leonor, estilo de una Borbón y Ortiz", nos ayuda a dar forma al posible vestidor de la Reina Letizia. Una estructura en la que para él lo fundamental es "tener todo en su sitio", máxime cuando la inmensa cantidad de prendas y complementos acumulados durante sus veinte años dentro de la realeza requiere de una auténtica ingeniera.
"La organización en el vestidor-ropero de la Reina Letizia es clave y conociendo que el orden y disciplina son dos adjetivos que definen a la esposa de Felipe VI, entendemos e imaginamos perfectamente cómo de bien deben estar clasificados cada uno de los estilismos que vemos en la Reina", nos cuenta el estilista.
La clave es el orden y la organización. Facilitar la localización de cualquier tipo de pieza en tiempo récord y sus posibles combinaciones resulta crucial a la hora de crear cualquier estilismo. Ahí radica el éxito de la imagen de la soberana como concepto global. Una creación que va más allá de 'ponerse cosas', pues sus looks deben responder a una intención más a largo plazo.
Desde que en 2015 la Reina Letizia contrató a una estilista profesional, Eva Fernández, es de suponer que ahora el equipo al frente de la imagen de la soberana (la peluquera Luz Valero, la maquilladora Natalia Belda e incluso una modista anónima) está mucho más coordinado.
En realidad, la Reina Letizia contaría con dos vestidores: dos áreas separadas y bien definidas según su uso. Una ocupada por su vestuario de trabajo, destinado para la agenda oficial; y otra para su vida diaria, más informal, para sus citas en familia o con amigos e incluso para hacer deporte.
La Reina Letizia ordena por colores y por tipo de prendas
Así lo estima Jesús Reyes: "De partida, la Reina Letizia tiene todos y cada uno de sus diseños separados por orden cromático. Algo lógico y muy utilizado en el sector 'retail', textil y en la moda. También están todas y cada una de sus prendas ordenadas por tipo de prenda: las exteriores primero, luego jerséis, camisas, tops... Le siguen las prendas de abajo, pantalones, faldas y shorts, ya sean perchadas o en estanterías. Zapatos, bolsos y complementos en otro apartado, pero todos igual de bien ordenados y clasificados igual, por color y tipo de calzado o bolso".
Estas secciones sirven para emplazar los distintos tipos de prendas según la estación: vestidos (cortos, midi, largos), pantalones, faldas, blusas, chaquetas, jerséis, abrigos, cazadoras... Lo mismo para su zapatero: salones de fiesta, de cóctel y de diario (de tacón alto y medio), sandalias, botas, botines, bailarinas, mocasines, alpargatas y deportivas...
Los vestidos de gala de la Reina Letizia se guardan en un sótano de La Zarzuela
Dado que la cantidad de piezas es impresionante, también existe una superficie adicional en el sótano del palacio. En este lugar se custodian los vestidos largos de gala, que por su volumen y características necesitan de más espacio y de unos cuidados específicos.
Realizadas en los tejidos más delicados, como sedas, gasas brocados, bordados, encajes y pedrerías, incluso con plumas, todas estas piezas deben guardarse en unas condiciones óptimas para su conservación. De temperatura, de luz, de higiene... Casi como las obras de arte.
No olvidemos que muchas de estas prendas son de alta costura y además con un alto valor histórico. Todo esto tiene que tenerse en cuenta a la hora de preservarlos para el futuro, de igual forma que ahora nos maravillamos ante un traje de María Antonieta. Su capacidad de trascender hace que este vestidor sea como casi como un museo 'en construcción'.
La Reina Sofía presta sus vestidos 'vintage' a la Reina Letizia
Gracias a esto, Doña Letizia también ha podido contar en los últimos años con los maravillosos préstamos 'vintage' que le ha hecho su suegra, la Reina Sofía, cuyo fondo de armario incluye firmas como Valentino, Chanel y Oscar de la Renta, aparte de sus diseñadores fetiche españoles como Pertegaz, Elio Berhanyer y Tony Benítez, entre otros.
Letizia es listísima a la hora de rescatar estas verdaderas joyas de la costura con décadas de vida y una carga sentimental inmensa. Y lo mejor es la suerte de que ambas reinas compartan talla...
En este 'almacén' todo debe estar clasificado con pulcritud y perfectamente colgado o empaquetado en sus perchas o cajas, protegido con las fundas adecuadas y además catalogado con su ficha informativa individual.
Los expertos recomiendan colgar una ficha en las perchas para cada prenda
Los profesionales de vestuario (fundamental en cine y televisión) suelen poner una etiqueta en cada prenda que incluye algunos datos relevantes, como la fecha y el lugar de puesta de cada una de ellas.
Es una práctica que también nos confirma nuestro especialista Jesús Reyes: "Desde mi experiencia, no creo que se separen las piezas que han sido utilizadas en varias ocasiones o repetidas. Todas vuelven a su lugar. Eso sí, cuentan con un archivo donde van anotando fechas y detalles de cada uno de los usos de las prendas, así como si necesitan de algún trato especial como ajuste, reparar alguna pérdida de botón, cremallera, suelas, limpieza en general...", dice.
Esto resulta de lo más práctico para no caer en repeticiones muy seguidas. Y eso la Reina Letizia lo tiene muy en cuenta. Porque ella 'recicla' mucha moda en base a criterios de sostenibilidad y ahorro, pero también sabe espaciar perfectamente cómo y cuándo se la pone.
Los accesorios son un apartado muy importante en cualquier vestidor. Según el estilista, todas estas piezas 'pequeñas' pueden ocasionar el caos si no están ordenadas por categorías: bolsos, sombreros, cinturones, pañuelos, gafas de sol y bisutería.
Algunos expertos los ordenan por colores, por rango de importancia e incluso por las preferencias de su dueña. Los más actuales y sus clásicos favoritos 'all time' tienen que estar a la mano.
Las tiaras 'de Letizia' las custodia Patrimonio Nacional
Un capítulo aparte sería el de las "Joyas de Pasar", el conjunto de piezas que legó en su día la Reina Victoria Eugenia, esposa de Alfonso XIII, para uso y disfrute de las soberanas de España y que incluyen las tiaras de la Casa Real.
Estas no son un bien privado de Letizia, sino que pertenecen a Patrimonio Nacional, cuyos profesionales se encargan de su mantenimiento y puesta a punto. Y eso que a veces se produce algún susto, como el percance de la Reina con su pulsera de zafiros en un reciente compromiso en el Palacio Real.
Letizia retira los trajes que ya no le gustan (e incluso los regala a su familia)
Como le ocurre a todo el mundo, también llega un momento en el que a la Reina Letizia ya no le gusta algo y piensa que ya no se lo va a poner, por lo que en este caso debe retirarse para abrir hueco a las novedades. Y estas se suman por decenas cada temporada.
El cambio de las tendencias y las modas barre de un plumazo las piezas que se han quedado obsoletas o anticuadas. Las 'importantes' pasan al depósito, pero hay otras prendas que tienen una segunda vida.
Tal y como hemos podido comprobar en varias ocasiones, Doña Letizia regala prendas a sus familiares. Su madre, Paloma Rocasolano, y su hermana, Telma Ortiz, son las principales beneficiarias.
Otro caso curioso es el de las hijas de la Reina. Ahora que ya son mayores, la Princesa Leonor y la Infanta Sofía se meten cada vez más en el vestidor de su madre, intercambiándose ropa y complementos.
La heredera lució un abrigo camel y un bolso de Carolina Herrera de Doña Letizia para la apertura de la XV Legislatura en el Congreso. A veces incluso ha sucedido al contrario y la Reina le ha 'robado' algo a sus hijas.
Como vemos, el Vestidor de Letizia empieza a ser un lugar muy concurrido. Un espacio de ida y vuelta en constante evolución, lleno de looks para mejorar su aspecto, donde dar rienda suelta a la elegancia y la coquetería. Jugar con la moda es un asunto muy serio. Así que mejor disponer del lugar perfecto.