La Reina Letizia desempolva un vestido en su color fetiche y repite accesorios en su última visita a Barcelona

La Reina Letizia ha acudido esta mañana a la entrega de los XIX Premios Dexeus Mujer, en un acto marcado por la celebración del 30º aniversario de la fundación, que tuvo lugar en las instalaciones del Hospital Universitario Dexeus, en la Ciudad Condal. Como presidenta del Comité de Honor de la Fundación, Su Majestad se encargó de entregar el galardón al profesor Arri Coomarasamy, reputado especialista en medicina materna, reconocido por su trabajo en la prevención de pérdidas gestacionales y la reducción de la mortalidad materna.

El evento no solo puso en valor la importancia de la investigación y el avance en la salud de la mujer, sino que también sirvió para subrayar el compromiso de la Reina con causas de carácter social y sanitario. Su presencia en actos de esta índole se ha convertido en un reflejo de su implicación personal y profesional en proyectos que impulsan la igualdad y el progreso. No obstante, como era de esperar, la elección de su perfecto look tampoco pasó inadvertida.

 

La Reina Letizia vuelve a sacar de su armario su vestido rojo de Dries Van Noten más 'ponible'

En el acto celebrado en Barcelona, la Reina Letizia deslumbró con un vestido que, tal y como se han desencadenado las tendencias este año, a primera vista podría parecer una prenda de temporada, pero lo cierto es que no lo era. La esposa del Rey Felipe VI ha vuelto a jugar con su color fetiche: el rojo. Y lo ha hecho con un vestido de hace un par de temporadas de la firma Dries Van Noten que destacaba tanto por su rojo grana como por su diseño refinado y sencillo. Como era de esperar y después de varios años, este diseño ya no está disponible en la web oficial de la firma, pero el tono de la prenda bien podría haber sido pensado para triunfar en los escaparates este año. 

Rubíes y brillantes: los exclusivos pendientes de Doña Letizia a juego con su outfit

En cuanto a sus accesorios, la madre de la Princesa Leonor quiso ser minimalista. En esta ocasión, la royal se decantó por rescatar un diseño de pendientes que, como el vestido, también le habíamos visto anteriormente, concretamente, durante una reunión con los directivos del Instituto Cervantes a principios de diciembre de 2023.

Pendientes de Gold & Roses de oro rosa, brillantes y rubíes 1.680 euros

El diseño que escogió contaba con diamantes, engarzados en oro rosa y dispuestos de manera vertical en una fina línea que culminaba en un rubí de un tamaño un poco mayor. Este diseño pertenece a la firma Gold & Roses y tienen un precio de 1.680 euros. 

No obstante, este par de pendientes no venía solo. Los complementos son una de las partes del look que más cuida la Reina Letizia, aunque en este acto no innovó demasiado. Recurrió al cinturón negro con maxihebilla que llevamos tiempo viéndole, pues es algo que reutiliza una y otra vez para marcar su cintura; así como el bolso de Carolina Herrera, el modelo Victoria Insignia Satchel, cuyo precio es de  1.400 euros. Es uno de sus bolsos comodín, tanto es así que lo tiene en varios acabados, dispone del mismo en color camel. 

Un regreso al tweed: la apuesta por la atemporalidad

Apenas unas horas antes de su aparición en los Premios Dexeus Mujer, la Reina Letizia ya había protagonizado otra jornada marcada por el inconfundible estilo de su vestidor durante el acto de la Fundación Microfinanzas BBVA, celebrado en el Palacio del Marqués de Salamanca en Madrid. Para este evento, la Reina decidió desempolvar uno de sus estilismos del tweed del que tanto disfruta últimamente. Y demostró una vez más que la moda sostenible y el 'reciclaje' de prendas también tienen cabida en su apretada agenda.

El protagonista del día de ayer fue un vestido gris con ese tejido clásico que se reinventa temporada tras temporada. Este diseño en concreto, que sacó de su armario por primera vez en abril durante los actos del Premio Cervantes, puede llegar a engañar al ojo de las más inexpertas: aunque a simple vista parece un conjunto de dos piezas, su confección crea ese efecto trampantojo que simula un top con mini péplum y una falda.

La prenda combinaba tonos sutiles como el negro, blanco, azul y un suave toque de malva que jugaban con la dirección del corte de este entretejido lleno de textura: busto en horizontal y falda en diagonal. A pesar de su apariencia sobria, el vestido incluye detalles en tendencia como los flecos cortos en los bordes de la parte superior y las mangas francesas. Todavía, desde el pasado mes de abril, se desconoce el diseñador o diseñadora que firma esta prenda.

Ambos diseños, tanto el de hoy como el que lució ayer, refuerzan el compromiso de la Reina con piezas atemporales, sino que también pone de manifiesto su habilidad para reinventar estilismos previamente vistos. Dar una nueva vida a diseños de su vestidor es su especialidad y aunque suele ideárselas para hacer sutiles variaciones en los complementos o el contexto, siempre acierta.