La Reina Letizia ya ha puesto pie en Copenhague. ¡Y cómo! Para su primer evento propiamente dicho del viaje de Estado de los Reyes a Dinamarca ha mostrado de lo que es capaz. Ha hecho un cambio exprés en el avión para bajar por la escalerilla con abrigo blanco, vestido y complementos granates y grandes joyas. En concreto, la hemos visto con unos pendientes de diamantes y rubíes. La Reina Letizia aterriza pisando fuerte y con ganas justo cuando se cumple el 20º aniversario de su compromiso. Y es que la cita lo merece.
Hace 43 años que los Reyes de España no visitan el país nórdico y no porque las relaciones con la Casa Real que preside la reina Margarita sean frías. Al contrario. Cordialidad y mucho cariño es lo que se ha visto en los primeros compases de su encuentro, tanto con la soberana como con los príncipes Federico y Mary, que ha hecho una reverencia de antología ante Don Felipe.
La Reina Letizia ha comenzado el programa oficial de la visita durante esta primera de las tres jornadas previstas con un look clásico e infalible. Del abrigo negro del aeropuerto de Madrid ha pasado al blanco roto en Copenhague. Un diseño amplio de grandes solapas, que llevaba cerrado y ceñido con cinturón, firmado por &Other Stories. Lo estrenó el pasado mayo en un viaje oficial a Menorca.
Por debajo se atisbaba un vestido de color rojo granate, con cuello redondo y largo a la rodilla, que hemos descubierto poco después. Un modelo conocido, de Carolina Herrera, con corte en el escote y sutilmente ajustado a la figura. Lo tiene igual en azul petróleo y con él posó en unos retratos oficiales a principios de 2020. Pero ahora la Reina ha vuelto a confiar en el color rojo tan identificado con ella y que tanto le favorece.
La Reina Letizia aterriza en Copenhague con los pendientes de rubíes de la Reina Sofía
El moño bajo con raya al lado era el mismo con el que ha despegado desde nuestro país. Lo que ha cambiado son los pendientes. Se ha quitado el triple arito de Gold&Roses para brillar con estas maravillosas piezas de rubíes. Son de las más bonitas del joyero real. Pertenecen a la Reina Sofía, que las ha utilizado con bastante frecuencia desde los años setenta, a menudo junto con el collar a juego. Doña Letizia ha recurrido muchas veces al joyero de su suegra, lo que las une de una manera cómplice a través de la moda.
Este ha sido un guiño más hacia la soberana emérita, quien además acaba de cumplir 85 años, solo dos días después del 18 cumpleaños de la Princesa Leonor.
Aunque a estos pendientes los hemos bautizado como 'de garra', por la forma en la parte superior, en realidad se trata de una paloma que sostiene una corona, que está realizada con rubíes.
No es la primera vez que la Reina Letizia se lleva estas piezas fuera de nuestras fronteras. En abril de 2017 se las puso para la ceremonia de bienvenida oficial a su llegada a Japón. Su originalidad, belleza y calidad hace que sean una excelente opción para combinar estos pendientes en un look de altura. Sin duda derrochan simbolismo. En estos momentos, con varias guerras desatadas en el mundo, todavía más. La paloma como icono de paz iluminando el rostro de nuestra consorte. Pues no está mal como primer bocado en este esperadísimo viaje oficial a Dinamarca.