Han pasado más de tres décadas desde que los caminos de Miranda Rijnsburger y Julio Iglesias se cruzaran -el artista sopla este 23 de septiembre 80 velas-. Ambos se conocieron de forma casual en el aeropuerto de Yakarta, Indonesia, cuando la holandesa tenía tan solo 25 años. La belleza etérea que hipnotizó al cantante de piel clara, ojos azules y un esbelto físico sigue intacta. La exmodelo, que actualmente tiene 57 años, continúa fiel a un estilo clásico, atemporal y muy elegante. Te damos las claves con las que consigue perpetuar su juventud y no envejecer nunca.
Nada dada a la ostentación, Miranda Rijnsburger es el mejor ejemplo del lujo silencioso como estilo de vida. Siempre ha sido una mujer eternamente sofisticada que no se ha dejado seducir por las vanguardias en moda. Desde que era una chica de veinte años a pasados los 50, su estilo continúa fiel a sí misma con un vestidor que no ha variado a pesar de lo arrolladora que es la moda. Incluso con looks idénticos que perduran a los largo de las décadas y parecen actuales. Es amante incondicional de una moda en clave minimal que nos dice que menos siempre es más. Sus icónicos outfits total white, con una sencilla camiseta y pantalón capri, que durante años ha repetido en sus vacaciones estivales son el reflejo de una elegancia innata. Antes de que los expertos acuñaran el término 'effortless', ella ya destacaba por su estilo natural que parecía no requerir de esfuerzos.
Los diseñadores fetiche de Miranda Rijnsburger
A pesar de que lleva más de treinta años junto a Julio Iglesias, hoy día es una mujer tan enigmática como desconocida. Su piel tersa, un físico que no ha cambiado a pesar del paso del tiempo y sus cinco embarazos demuestran que es una mujer que se cuida mucho. No todo es producto de una genética envidiable, también gracias a una alimentación sana y equilibrada y a la práctica de deporte de forma regular. Una belleza eterna que han heredado sus hijas gemelas, Cristina y Victoria.
Oscar de la Renta, Chanel y Hermès son algunos de sus diseñadores de confianza. Son escasos los grandes acontecimientos públicos a los que ha acudido a lo largos de los años, pero sus looks más espectaculares responden a importantes bodas, entre ellas, el enlace de Ana Aznar y Alejandro Agag. En aquella ocasión deslumbró con un vestido de estampado paisley de Oscar la Renta. Aunque lo que más define su armario es que está repleto de buenos básicos que constatan que la moda también puede ser eterna como su belleza.