La moda femenina de las Islas Baleares es una fusión irresistible de estilo relajado y sofisticación veraniega. Inspirada por la riqueza cultural y la belleza del archipiélago mediterráneo, esta moda se caracteriza por su frescura y su conexión con la naturaleza. Los tejidos ligeros y fluidos, como el lino y el algodón, se combinan con estampados tropicales y colores vivos que evocan la esencia del mar y el sol; o si somos más tradicionales, con el blanco más ibicenco. Eugenia Silva está pasando unos días en Formentera y, para pasar un día de playa, ha querido estrenar un vestido que es completamente atemporal y que lo tiene todo para convertirse en la prenda comodín de todos los veranos. ¡Te contamos todo sobre su look desenfadado a continuación!
Los vestidos de crochet para mujer en verano son una verdadera declaración de estilo bohemio y comfy, lo que necesitamos para ir cómoda y chic durante el verano. Estas delicadas prendas tejidas a mano se convierten en el aliado perfecto para los días cálidos y soleados, más todavía si elegimos un color neutro. El tejido de crochet aporta una textura única y aireada, permitiendo que la piel respire y brille bajo el sol con tu mejor bronceado. Con sus detalles intrincados y patrones artesanales, los vestidos de crochet son una oda a la artesanía y el encanto vintage que ha vuelto a renacer en los últimos tiempos.
Eugenia Silva ha combinado su vestido de crochet con unos brazaletes rígidos
La empresaria luce a estas alturas un bronceado increíble que ha querido potenciar con una prenda blanca de crochet. La prenda que estrenó tenía un escote halter creado por una tira fina que cruzaba su cuello y se asentaba en su espalda con un lazo ajustable. Este tipo de escote es perfecto para lucir brazos trabajados, los hombros al aire siempre aportan un plus de feminidad. La prenda estaba confeccionada en crochet de punto pequeño y estaba rematada con un ribete blanco en el mismo color. El diseño estaba firmado por Forte-Forte, una marca alternativa, pues a Eugenia siempre le gusta explorar nuevos horizontes.
Los accesorios que pueden acompañar a un vestido de crochet blanco son la clave para realzar su belleza y crear un look verdaderamente cautivador. Para potenciar el encanto bohemio de este tipo de vestido, los brazaletes de resina de colores son una elección ideal, eso es lo que hizo la modelo. Eugenia adornó sus brazos con tres brazaletes de colores (amarillo, rojo y morado). Este tipo de joyas duras son perfectas para ir a la playa, pues se pueden mojar y suelen ser muy económicas. ¡Cópiale el look a Eugenia Silva!