A sus 33 años, Isabelle Junot es madre de una niña de un año, la pequeña Philippa, fruto de su matrimonio con Álvaro Falcó, marqués de Cubas y hermano de Tamara Falcó. Además de cuidar su alimentación, Isabelle hace ejercicio de manera regular y ha compartido con sus seguidores en las redes sociales el deporte que no falta en su rutina de entrenamiento. Una disciplina que está cada vez más de moda.

Isabelle Junot, una mujer todoterreno

Isabelle, hija de Philippe Junot, primer marido de Carolina de Mónaco, y de la de modelo danesa Nina Wendelbow-Larser, está afincada en Madrid, junto a su marido y su hija, desde hace años aunque ha vivido en diversos lugares del mundo como Los Ángeles o París. Habla cinco idiomas: inglés, castellano, danés, francés e italiano.

En un principio, Isabelle, coqueteó con la interpretación y estudió Arte Dramático y Cine en la Universidad de Virginia. Su vocación de un giró de 180º y decidió dedicarse al mundo de la nutrición, profesión que ejerce actualmente como Binge Eating Coach, donde ayuda a otras personas a mantener una relación más sana con la comida, evitar los atracones y controlar el peso sin ansiedad ni dramas. Una profesión que hizo que su paso por el programa MasterChef Celebrity fuera una experiencia fabulosa para ella.

La marquesa de Cubas apuesta por llevar una alimentación sana y consciente. Comer con intención, estando presente y sin pasarse el día contando calorías. Defiende que si eliminas las prohibiciones, eliminas automáticamente la ansiedad por la comida y desaparecen los ataques de hambre. En su cuenta profesional de Instagram (@isa.healthy.life) ofrece muchas recomendaciones y programas con su método para poder comer sin culpa y sin restricciones.

Para Isabelle el ejercicio regular el muy importante ya que le permite mantenerse más fuerte, sana y tonificada. Ella es muy fan de una disciplina que está ganando cada vez más adeptos: el barre.

Isabelle Junot

Isabelle Junot en su clase de entrenamiento barre.

@isa.healthy.life

El barre: la disciplina de moda para fortalecer el core

Isabelle Junot ha compartido en sus redes que uno de sus entrenamientos regulares es el barre. El barre es una disciplina de entrenamiento físico que combina movimientos inspirados en el ballet con técnicas de tonificación muscular y entrenamiento de resistencia. Este tipo de ejercicio utiliza una barra similar a la que usan los bailarines de ballet para apoyo, junto con pesas ligeras, bandas de resistencia y ejercicios en el suelo. Aunque el barre se inspira en el ballet, no es necesario tener experiencia previa en danza para practicarlo, así que cualquiera de nosotras puede lanzarse a probarlo.

Sus beneficios son muchos:

  • Tonificación muscular: El barre trabaja los músculos de manera profunda y precisa, ayudando a tonificar y esculpir áreas específicas del cuerpo como los glúteos, muslos, abdomen y brazos. Los movimientos pequeños y controlados son especialmente efectivos para activar los músculos estabilizadores y mejorar la definición muscular.
  • Mejora de la flexibilidad: La combinación de estiramientos y movimientos controlados en el barre ayuda a mejorar la flexibilidad general del cuerpo. Esto permite alcanzar un rango de movimiento más amplio y puede reducir el riesgo de lesiones en otras actividades físicas.
  • Postura y equilibrio: Al enfatizar la alineación corporal y el equilibrio, el barre ayuda a mejorar la postura y a desarrollar una mayor estabilidad central. Los ejercicios de equilibrio y los movimientos de ballet contribuyen a una mejor conciencia corporal y coordinación.
Isabelle Junot

Isabelle Junot en la sala de barre.

@isa.healthy.life

Más beneficios del barre

Aunque puede parecer un ejercicio suave, el barre es un entrenamiento eficaz para quemar calorías y mejorar la resistencia cardiovascular. La combinación de movimientos de alta repetición y baja resistencia eleva la frecuencia cardíaca y promueve la quema de grasa. Ideal si quieres perder los kilos de más del verano.

Practicar barre también ayuda a reducir el estrés y promueve una sensación de bienestar general. La concentración en los movimientos y la respiración controlada durante la clase tiene efectos relajantes.

Un punto a su favor es que es una disciplina accesible para personas de todos los niveles de condición física. Los ejercicios pueden modificarse para adaptarse a principiantes o intensificarse para desafiar a los más avanzados. Esto lo convierte en una opción versátil para quienes buscan una forma de ejercicio que se pueda personalizar según sus necesidades y objetivos.

A diferencia de otros entrenamientos de resistencia que pueden aumentar el volumen muscular, el barre se centra en desarrollar una musculatura larga y delgada. Podrás tonificar tu cuerpo sin que aumente el tamaño de tus músculos de manera significativa.

¿Te animas a probar el barre? A Isabelle Junot es una técnica que le funciona a todos los niveles, físico y mental.