La dieta que llevamos no solo afecta de forma inmediata a nuestro organismo, sino que también a nuestra calidad de vida a largo plazo. Unaalimentación variada y saludable puede hacer que vivamos más pero, sobre todo, mejor. ¿Sabes qué alimentos deben ser tus imprescindibles este Verano? ¡Apunta!
1. Zanahoria
El color anaranjado que tiene se debe a su gran riqueza en betacarotenos, que son unos poderosos y reconocidos antioxidantes. La zanahoria está especialmente recomendada para las personas fumadoras o que lo han sido durante años, debido a la capacidad que tiene para regenerar las células del epitelio respiratorio. Además, también son perfectas para retrasar el proceso de envejecimiento y proteger la piel y los ojos de las dañinas radiaciones ultravioletas emitidas por el sol, sobre todo, ahora, en los meses de buen tiempo.
2. Brócoli
Junto con las coles y la coliflor son alimentos que no pueden faltar en tu dieta, ya que refuerzan las defensas y eliminan los radicales libres. La clave está en su elevado contenido en isotiocianato, una sustancia que elimina la proteína del gen p53 defectuoso que provoca el crecimiento anormal de las células. Eso sí, su cocción destruye sus propiedades antioxidantes, así que mejor tómalo siempre en crudo.
3. Frutos rojos
Fresas, arándanos, moras, frambuesas, cerezas y grosellas. Todas son ricas en ácido elágico (por eso tienen ese toque ácido). Este componente protege contra las sustancias tóxicas que se encuentran en el medio ambiente, de manera que una vez que entran en el organismo evitan que se vuelvan malignas.
4. Patata
Si la incluyes cocida o asada con su piel, te ayudará a prevenir la hipertensión y los accidentes cardiovasculares. Pero no solo eso, el zumo de patata en pequeñas cantidades también es bueno para reumáticos, artríticos y ulcerosos gracias a su gran poder alcalinizante.
5. Tomate
Tiene mucha vitamina A, y por ello cuenta con potentes propiedades antiinflamatorias que reducen los daños de la continua o excesiva exposición al sol. ¿Más? Al tener grandes dosis de fibra, el tomate cuida del tránsito intestinal y evita la aparición de enfermedades que tengan que ver con los órganos gastrointestinales.
6. Lechuga
Es la protagonista de las ensaladas frescas de primavera y verano y el vegetal al que acudimos cuando queremos perder peso. La lechuga está compuesta por un 94% de agua, es muy saciante, y contiene lactucarium, una sustancia que actúa como calmante sobre el sistema nervioso, favoreciendo el buen descanso.
7. Remolacha
A partir de ahora vas a tener un buen motivo para que sea una hortaliza fija en tu despensa. Y es que la remolacha no solo es rica en hierro, sino también en vitamina C y antocianinas, unos pigmentos que contribuyen a bloquear los radicales libres y, por tanto, ayudan a combatir el envejecimiento y las enfermedades cardiovasculares.
8. Pepino
El azufre que contiene es esencial para estimular la formación de colágeno y proteger la piel. Ahora que llega el calor y ya no apetecen tanto las infusiones calientes, prueba a tomar agua fría con pepino y menta, es una bebida refrescante, adelgazante y depurativa que hará que te sientas más ligera y dejes de retener líquidos.
9. Berenjena
Suma pocas calorías y, a su vez, una gran cantidad de fibra, vitaminas y minerales. Y no solo eso, la berenjena es hidratante y diurética, ya que el 90% de su contenido es agua. Y recuerda: una de sus ventajas es que reemplaza fácilmente otros alimentos más calóricos como las láminas de pasta de la lasaña.
10. Albaricoque
Su color se debe a los betacarotenos, que favorecen la buena circulación sanguínea. Pero no solo eso, el albaricoque también destaca por sus propiedades laxantes gracias a su alto contenido de pectina, una sustancia que ayuda a mejorar el tránsito intestinal.
PronoKal®, expertos en soluciones integrales de salud y bienestar para la pérdida de peso, celebró en Madrid un taller saludable sobre “Nutrición Inteligente & Cuerpo Activo”. A continuación te enumeramos los 12 consejos básicos que nos dan los expertos de PronoKal para realizar compras inteligentes y aprovecharlas al máximo:
1. Planifica el menú semanal o mensual.
2. Prepara la lista de la compra.
3. Al ir a comprar, ve sin hambre y sin prisa; dedícale el tiempo necesario.
4. Aprovecha el mercado para los alimentos perecederos.
5. Elige alimentos de temporada y locales o de proximidad (km 0).
6. Compra a granel y compara el precio por kg.
7. Haz una buena elección de ofertas. No te dejes llevar por promociones como XXL o 2x1; puedes aprovechar plataformas como "Too Good to Go".
8. Elige proteínas más económicas como huevos, legumbres, congelados o conservas.
9. Evita alimentos procesados o preparados.
10. Mantén una buena conservación de los alimentos en nevera, despensa y congela correctamente para no desperdiciar.
11. Cocina con antelación y congela para no desperdiciar.
12. Cocina de aprovechamiento, es decir, reutilizar sobras en buen estado de otras comidas para crear nuevas recetas.