Las vacaciones de la Familia Real española se han visto interrumpidas por sus continuos viajes a París para asistir a las diferentes competiciones deportivas de los Juegos Olímpicos. El Rey Felipe cogía hace unos días el testigo de la Reina Letizia después de que esta relevara a sus hijas, la Princesa Leonor y la Infanta Sofía. Ahora, le ha tocado el turno a la Reina Sofía, quien se ha convertido en el talismán de la selección femenina de waterpolo.
Faltaba ella por viajar a París y finalmente la Reina Sofía ha cumplido con su compromiso con los atletas españoles. La madre del Rey Felipe VI ha viajado este sábado, 10 de agosto, a la capital española para convertirse en la representación de la Casa Real en la clausura de estos Juegos Olímpicos.
Pero antes de que llegue la ceremonia, la Reina emérita se daba cita en la final de waterpolo, donde España se ha alzado con la medalla de oro gracias al gran juego de la selección femenina. La abuela de la Princesa Leonor se mostraba eufórica por este logro y no dudaba en aplaudir desde las gradas a las jugadoras.
Con su presencia en esta cita deportiva, la Reina Sofía se ha convertido en un gran talismán para las jugadoras españolas. Al igual que lo fueron sus nietas durante su paso por París. Tras la finalización del encuentro, la Casa Real felicitaba con gran fervor a las jugadoras de la selección española de waterpolo.
"¡A la tercera va la vencida! ¡El ORO olímpico es de nuestra selección femenina de waterpolo! El camino fue duro, pero vuestro espíritu de equipo os hace alcanzar la gloria. Habéis hecho historia. ¡¡Enhorabuena!!", escribían en sus redes sociales junto a varias imágenes en las que veíamos a la Reina emérita.
La aparición de la madre del Rey Felipe en los Juegos Olímpicos llega después de que se especulara sobre su estado de salud a raíz de unas imágenes en las que la veíamos sufrir por el calor durante un paseo por Mallorca. En su viaje a París, hemos visto a la suegra de la Reina Letizia de lo más relajada y ataviada con la equipación olímpica española.
La Reina Sofía ha asistido así a una victoria histórica en waterpolo desde el oro que ganó la Selección masculina en los Juegos Olímpicos de Atlanta en 1996. 28 después, el seleccionador español, Miki Oca, que fue parte de aquel equipo, donde también jugaba Pedro García Aguado, ha guiado a las deportistas a alcanzar lo más alto.
El firme apoyo de la Casa Real a los atletas españoles en los Juegos Olímpicos
Desde el primer momento, la Casa Real dejó claro que iba a demostrar su apoyo a los atletas españoles y se iban a turnar para viajar a París. Una manera de estar así presentes y mostrarse cercanos con todos los deportistas. Eso sí, era el propio Rey Felipe el que lamentaba el hecho de no poder estar presente en todas y cada una de las citas deportivas. A lo largo de estas semanas, hemos podido ver la complicidad de las hermanas, Leonor y Sofía, así como la euforia de la Reina Letizia.
"Venimos de una temporada increíble de resultados deportivos. Venís con una ola de entusiasmo y de ganas de hacerlo lo mejor posible y lograr un resultado que esté a la altura de vuestras expectativas y de la ilusión que tenemos todos de verlo. Mucho ánimo, nuestro apoyo y cariño en estos momentos", aseguraba el Rey Felipe VI en su encuentro con la delegación española en París el jueves 25 de julio, un día antes de la Ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos.
Los Reyes Felipe y Letizia mandan un cariñoso mensaje a Carolina Marín
A lo largo de su estancia en París, los Reyes Felipe y Letizia, así como sus hijas, se han mostrado de lo más cercanos con los deportistas. Especialmente con Carolina Marín, quien se retiraba en medio de la semifinal de bádminton debido a la grave lesión de rodilla que arrastraba.
"Eres nuestra campeona, no hay metal que alcance el valor de la lección de pundonor y orgullo que has dado al mundo, la más digna representación del espíritu olímpico. Volverás más fuerte, como siempre has hecho y mereces la ovación de toda España. Gracias, Caro", escribían los Reyes en su cuenta oficial de Instagram instantes después de que la joven se tirara al suelo debido al dolor. Un tierno gesto con el que dejaban patente su gran cariño hacia la deportista.