Tras los actos con motivo del décimo aniversario de la Proclamación de Felipe VI como Rey de España, doña Sofía ha retomado sus quehaceres al frente de la Corona. La madre del monarca cedió todo el protagonismo tanto a su hijo, como a su nuera y sus nietas, en una fecha que ya forma parte del recuerdo de la monarquía de este país. Sin embargo, su inquebrantable papel respecto a la institución ha hecho que hoy asista al I Congreso Internacional de esclerosis Lateral Amiotrófica ‘Manolo Barrós’. Un evento organizado por la Fundación CIEN y por la Fundación Reina Sofía que no ha querido perderse.

La Reina Sofía en su último acto de agenda

La Reina Sofía en su último acto de agenda.

Casa S.M. el Rey

El calzado que doña Sofía conquistará a la Reina Letizia cuando se recupere de su lesión

En esta ocasión tan especial, y dada la irrupción del verano, la Reina Sofía se ha enfundado en un look repleto de toques estivales. La madre de Felipe VI ha apostado por un conjunto de blusa y pantalón en blanco roto, que ha combinado con una blazer de cuadros en gris y múltiples collares, como de costumbre. Sin embargo, eso no es lo que más ha llamado la atención de su look. Lo han hecho las alpargatas que ha escogido. Un diseño de lo más cómodo y favorecedor que, a buen seguro, encantará a la Reina Letizia.

De momento, la consorte no ha vuelto a subirse a ningún zapato de tacón. Su fractura de falange se lo ha impedido temporalmente, y hasta que los profesionales médicos pertinentes consideren que es seguro que puede hacerlo. Unas órdenes que está acatando con mucho mimo y por las que ha hecho de las deportivas sus principales aliadas, aunque es sabido que las alpargatas son uno de sus calzados favoritos cuando suben las temperaturas. 

Reina Letizia

La Reina Letizia en el Palacio Real.

Robert Smith

Como no podía ser de otra manera, la Reina Sofía ha vuelto a hacer gala de su simpatía con todos los presentes en el Ayuntamiento de Almería y la Casa de las Mariposas. A su llegada, la abuela de la Princesa Leonor les ha saludado y ha mantenido una conversación con todos ellos, antes de tomar su asiento y estar atenta a todo lo que ha ocurrido a su alrededor. Doña Sofía no ha perdido detalle a la ponencia que tenía como nombre ‘El papel de las asociaciones de pacientes y de los pacientes en la investigación’, pues tiene como objetivo que su fundación haga la mejor aportación posible. 

Manolo Barrós, pieza clave en la vida de la Reina Sofía

Cabe destacar que este acto no solo ha cobrado un gran significado para doña Sofía por la importancia del papel de su fundación, sino también porque, precisamente, Manolo Barrós fue una persona muy importante para ella y falleció hace poco más de un mes. El general estuvo ligado al Palacio de la Zarzuela durante 30 años y fallecía el pasado 10 de mayo a consecuencia de la esclerosis lateral amiotrófica, más conocida como ELA. 

Su marcha suponía un durísimo golpe no solo para la Reina Sofía, sino también para Juan Carlos I, pues fue durante 14 años Jefe de Seguridad de la Casa Real. Más tarde, decidió dejar su puesto para ascender a general del Ejército de Tierra, justo un año antes de que el Rey emérito abdicara a favor de su hijo, Felipe VI.

Cuando abandonó su cargo como Jefe de Seguridad de la Casa Real, Manuel Barrós no podía llegar a imaginar que, poco tiempo después, se le diagnosticaría una enfermedad tan dura que terminaría costándole la vida. Sin embargo, Juan Carlos I siempre tuvo muy en cuenta su labor por la monarquía, y le agradeció “los muchos años de servicios prestados con gran lealtad, dedicación y eficacia”.

No hay duda de que Manuel Barrós fue el gran protector de la Reina Sofía y de sus seres queridos durante muchos años, sobre todo cuando los tiempos eran más complejos que ahora. El rol del fallecido en vida es innegable, motivo por el que no resulta extraño que se haya celebrado un Congreso Internacional con su nombre, en el que ha estado presente la madre de Felipe VI. 

La última cita que la esposa de Juan Carlos I compartió con el que fuera Jefe de Seguridad de la Casa Real

La última vez que se les vio juntos fue el pasado mes de diciembre, durante la presentación del proyecto de investigación sobre ELA que ya llevaba el nombre de Manolo Barrós. Tanta estima tuvo doña Sofía al que fuera Jefe de Seguridad, que no dudó en financiar la iniciativa a través de la Fundación Reina Sofía. Un gesto con el que confirmaba su implicación en el estado de salud de su gran amigo. También su deseo de dar visibilidad a una enfermedad de la que se diagnostican unos 900 casos al año solo en España, y cuya esperanza de vida no supera los cinco años.