Felipe VI cumple 57 años en un momento complejo de su reinado. Acaba de cumplir diez años en el trono y posiblemente en este último haya vivido uno de los momentos más complicados de su existencia en Valencia junto a los damnificados de la devastadora Dana que asoló la Comunidad Valenciana el pasado mes de octubre. En pleno acercamiento con sus hermanas, la relación con su padre sigue siendo una incógnita. ¿Lo felicitó por su cumpleaños? ¿Mantienen relación de forma continuada?  

De Felipe VI sabemos algunas cosas, como que es el monarca más alto del mundo o que fue uno de los primeros en tener estudios universitarios, pero otras muchas cosas nos son todavía esquivas. ¿Cómo es en su intimidad? ¿Qué rasgos esconde su personalidad?Con la ayuda de nuestra experta psicóloga de cabecera, Lara Ferreiro, que acaba de lanzar su segunda novela “Ni un capullo más: el método para quererse y encontrar a tu pareja perfecta” (Grijalbo, 2025), nos adentramos en los detalles más desconocidos del monarca.

Felipe VI en los Juegos Olímpicos de Londres 2012

Felipe VI en los Juegos Olímpicos de Londres 2012.

Gtres

“La parcela del amor incondicional de Felipe VI la cubren sus hijas”

Lo primero que destaca Lara Ferreiro en nuestra charla es lo distintos que son nuestros actuales Reyes. “Felipe es opuesto a Letizia, es muy pachón, tranquilo, sosegado. Letizia es polvorilla, muy nerviosa. Felipe es menos controlador, Letizia es mucho más controladora. Ella es de hábitos, rutinas. Más sistemática, obsesionada por la imagen y la perfección. A él le gusta improvisar, es más tranquilo. Ella es muy rápida e intuitiva, él es más bien lento. Ella es super lanzada, habla con todo el mundo. El es más bien tímido, parecido a la Reina Sofía”. Además, destaca que este rasgo no es el único en común del monarca con la Emérita “como a su madre a él le encanta la naturaleza, tiene una sensibilidad especial. Son muy diferentes el Rey Felipe y la Reina Letizia.”

 

Nuestra psicóloga tiene claro que “por encima de Rey, Felipe VI es padre. Está enamorado de sus hijas y tiene, según dicen, una especial debilidad por Leonor. Además, según comentan, se parecen en carácter. Ambos tienen un punto de timidez menos presente en la Reina Letizia y la Infanta Sofía, que son más extrovertidas”. En esta misma línea, Ferreiro destaca que “posiblemente en el papel sea en el que Felipe VI más cómodo se encuentra”. Ahondando en esta faceta, Ferreiro apunta que “siempre ha intentado poder compatibilizar al máximo sus obligaciones con ser un padre presente para sus hijas”. Lara añade que “la parcela del amor incondicional del monarca la ocupan sus hijas, Leonor y Sofía. Como monarca ejerce una figura de autoridad más bien de tipo introvertido, no tan dicharachera como Letizia, sin embargo, como padre tiene una cara totalmente opuesta. De él su hija ha heredado su gran sentido del deber. Como padre es protector, cariñoso y orgulloso”.

“Felipe VI en cada ocasión que tiene intenta dar su lugar a su madre”

La psicóloga Lara Ferreiro continúa, “por su carácter y su perfil emocional es muy probable que tienda a ejercer de mediador en sus relaciones con su familia, seguro que impondrá su autoridad como Rey para intentar acercar posturas”. Pero según Ferreiro, el deber va por delante, “demostró que es capaz también de anteponer su deber a su emoción, como cuando tuvo que apartar a su hermana Cristina de la institución por el Caso Noós”. Según Lara, “su padre le ha influido como ejemplo de lo que no hay que hacer como monarca, estoy seguro de que tiene muy presente los errores de Juan Carlos I en su día a día para salvar a la institución. Como hijo seguramente esté muy dolido con su padre por las humillaciones a las que ha sometido a su madre con todo el escándalo de Bárbara Rey”. Según Lara Ferreiro, es por esta razón que “Felipe VI intenta dar su lugar a su madre en actos oficiales cada vez que puede, intenta que quede claro que es Reina Emérita y madre de un Rey cada vez que puede para resarcirla del escarnio público de la traición de su marido”.

Las mujeres, una gran influencia en la vida del monarca, Ferreiro apunta “Felipe VI está rodeado de figuras femeninas muy potentes, su madre la Reina Emérita, la Reina Letizia, la Princesa Leonor y la Infanta Sofía”. Además, “como marido ha sabido ser prudente, paciente, generoso y transigente cuando tocaba. Ha tenido que aportar un extra de flexibilidad para hacer que esta parcela de su vida fuera fructífera desde que dio el golpe sobre la mesa para casarse con Letizia en 2004”. Ahondando en la faceta matrimonial, Lara apunta que “creo que es un terreno en el que ambos, el Rey y la Reina, han sabido perdonarse y escucharse. El amor que sienten ambos por sus hijas en común posiblemente haya sido la mejor levadura para su relación. Ahora han sabido enfrentarse en pareja al síndrome del nido vacío, una etapa que en cualquier matrimonio puede ser una etapa crítica. Según he podido saber tienen la costumbre de mantener una cita de pareja a la semana para ir a cenar fuera, al cine o hacer algún plan solos los dos”.

Felipe VI en su faceta de padre, su favorita.

El Rey Felipe VI en su faceta de padre, su favorita.

Gtres y SEMANA

Para acabar, dos apuntes más de nuestra psicóloga de cabecera. “Su padre Juan Carlos I ha sido una influencia para él, pero es una figura de la que ha sabido distanciarse para poner un cordón sanitario sobre su reinado que no le salpique en su actual tarea como cabeza de la institución”.

Ferreiro tiene claro el perfil personal del Rey, “Felipe VI es autoexigente, perfeccionista, muy noble y tiene miedo a hacerlo mal, además es más bien introvertido. Tiene una gran inteligencia emocional y un humor sutil y reservado que solo deja salir con la gente de su máxima confianza”. Para acabar, una última reflexión sobre uno de los peligros asociados a perfiles como el suyo “en figuras como la suya es muy fácil que se caiga en un burnout, la presión de ejercer como Jefe de Estado no es sencilla de sobrellevar, pero tener un entorno sano es clave para poder surfear este desafío emocional”.