La mayor aventura de al Princesa Leonor ha comenzado. El pasado jueves, 23 de enero, el buque escuela Juan Sebastián Elcano partía desde Las Palmas de Gran Canaria con el objetivo de atravesar el Atlántico. Su próxima parada será Salvador de Bahía, en Brasil, destino al que llegarán en 22 días, concretamente el 14 de febrero. Antes de ese día, la heredera al trono y sus compañeros tendrán que llevar a cabo un largo viaje de más de 3.000 millas náuticas, en el que tendrán que aprovechar no solo para entrenarse física y mentalmente, sino que también tendrán oportunidad de disfrutar de ‘Telelcano’.
¿Qué es 'Telelcano'? La actividad con la que la Princesa Leonor podrá sacar a relucir sus dotes periodísticas
Tal y como ha podido saber Vanitatis, los guardiamarinas cuentan con una tarea cada siete días que tendrán que compaginar con sus entrenamientos. Se trata de “un informativo que se acompaña con sketches cómicos de alguna situación que haya pasado a bordo”, con el objetivo de que sus seres queridos puedan mantenerse al tanto de lo que sucede en el Juan Sebastián Elcano pese a estar alejados por miles de kilómetros. Este movimiento tenía aún más sentido en antaño, cuando los accesos a internet están más restringidos. Ahora el grupo se ha adaptado a las nuevas tecnologías, eso sí, sin perder una tradición que ha resultado ser de lo más divertida para ellos.
Tanto la Princesa Leonor como el resto del elenco a bordo del Juan Sebastián Elcano, tendrán que elaborar un resumen de prensa que posteriormente se presenta en formato vídeo al resto de compañeros. Una actividad con la que la heredera al trono podrá poner en práctica sus habilidades comunicativas, algo con lo que podría acercarse más a la gran pasión de la Reina Letizia: el periodismo.
Tanto el pasado periodístico de doña Letizia, como algunos de sus discursos como Reina en sus compromisos oficiales, han dejado clara la destreza comunicativa que posee la consorte. Ahora, su hija tendrá oportunidad de demostrar si ha heredado esta faceta de su madre gracias a la actividad que tendrá que desempeñar en el buque escuela que no solo es divertida, sino que también le permite desconectar de la dureza de las actividades en altamar.
Leonor, una heredera al trono feliz y 'guerrera' a bordo del Juan Sebastián Elcano
Durante sus días en las Islas Canarias, la Princesa Leonor ha irradiado una felicidad con la que ha demostrado que, pese a la dureza de la experiencia, está viviéndola al máximo. Fue el pasado 11 de enero cuando, desde Cádiz, la heredera al trono se despidió de los Reyes Felipe y Letizia para comenzar su andadura en altamar. En sus primeras paradas en el archipiélago español, la joven se ha mostrado muy cercana y cariñosa con el público, sin dejar de sonreír y saludando a quienes se acercaban al puerto para verla. Sin ir más lejos, hace unas horas llamaba especialmente la atención la complicidad de la que goza con sus compañeros: “Tienen que convivir todo el día y eso hace que la experiencia sea muy enriquecedora”, decía la alférez marino Ida Blanco.
También un detalle dejó entrever que la Princesa está dando lo mejor de sí misma durante su formación militar. En las imágenes que han salido a la luz a bordo del Juan Sebastián Elcano, se aprecia un moratón en su antebrazo, fruto de la dureza de las maniobras en altamar. De momento, se desconoce el origen de esta marcha, pero todo apunta a que es fruto de las actividades deportivas que realiza a diario. El deporte se compagina en la cubierta con las clases y las guardias entre todos los guardiamarinas, lo que hace que esta experiencia sea sumamente dura para todos aquellos que la viven.
El día a día de la hija de la Reina Letizia en altamar, al descubierto
En el bergatín goleta de la Armada, la actividad arranca a las 6:45 horas de la mañana para Leonor y los otros 75 guardiamarinas. Desde ese momento, todos ellos tienen que poner a punto sus literas, ducharse y desayunar, antes de comenzar unas clases que se alargan hasta el mediodía. Concretamente, hasta las 13:00 horas, cuando comienza la comida.
Después, los jóvenes retoman las clases que, dependiendo del día, se realizan entre cinco y siete periodos. Se supone que, durante las jornadas menos complejas a nivel mental, los guardiamarinas tienen más tiempo para ejercitarse físicamente. Algo que, desde Casa Real, ayudará a la Princesa no solo en su formación, sino también a nivel personal y de cara a su camino hasta la primera línea de la Corona: “Este período de instrucción contribuirá a su desarrollo personal y profesional, fortaleciendo su compromiso con el servicio a España”, indicaron. Además, Leonor demostrará su autonomía al tener que viajar sin escoltas, y sobre todo, permanecer sin la compañía de Sus Majestades.