La gran boda del fin de semana, la de Victoria López-Quesada, ahijada del rey Felipe VI, con Enrique Moreno de la Cova Ybarra, veíamos al monarca llegar a la boda junto a la Infanta Cristina. Una imagen que demostraba la reconciliación entre el rey Felipe VI con su hermana, después de años alejados por su polémico matrimonio con Iñaki Urdangarin. La reconciliación pública de los hermanos ha dado un vuelco a la situación de la Casa Real española, que ahora busca normalizar los encuentros entre las partes que habían mantenido una distancia más que prudencial tras el estallido del caso Nóos. Tal es el efecto de esta reunificación familiar que la hija pequeña de los Eméritos se mostraba de lo más sonriente y despreocupada por las calles de Madrid mientras disfrutaba de un plan de chicas con su hija, Irene Urdangarin. 

Desde 'Espejo Público' han contactado con Ana Polo, experta en casas reales, que ha explicado creer que la difusión de estas imágenes en la que los hermanos aparecen, de nuevo, juntos, se trata de una estrategia desde Casa Real. "Me confirman que hay una reconciliación después de años de desavenencias. Ellos estaban muy unidos, eran uña y carne. Y hace años que empezaron a reencontrarse, fue la propia Sofía quien facilitó esos encuentros", señala. "Poco a poco el rey Felipe ha ido retomando la relación y fuentes cercanas a la familia me han confirmado que hay reconciliación familiar". Deja claro que el punto de inflexión entre ambos fue el divorcio de la Infanta Cristina de Iñaki Urdangarin.

"Letizia lo sabía, por supuesto, y vamos a ver una normalización de su relación. Lo que no sabemos es si le ha gustado, yo personalmente considero que debe tener dudas al respecto", añade la experta.

Lorena, colaboradora del programa, también ha dado su versión de esta relación entre hermanos: "Se había hablado de relaciones tensas, de distanciamiento... pero en los últimos encuentros, concretamente en junio, que coincidieron en Madrid, no hubo fotografía de los dos y se habló de relación rota. Pero os puedo asegurar que no es así. Ese día después del evento se encontraron en un cóctel y hubo actitud cariñosa y normal entre hermanos".

Eso sí, Ana Polo explica que "esto no significa que Cristina vaya a hacer actos oficiales de nuevo, pero sí que estará presente en actos familiares, como en esta boda". Deja claro que es una situación "muy estudiada".

Felipe VI llegando acompañado de su hermana, Cristina de Borbón, a la boda de Victoria López-Quesada

Felipe VI llegando acompañado de su hermana, Cristina de Borbón, a la boda de Victoria López-Quesada

Gtres

La boda que marca un antes y un después en la relación del Rey Felipe VI y la Infanta Cristina 

Hacía seis años que Felipe VI y la Infanta trataban de evitar una fotografía de unidad, coincidiendo con la condena de Iñaki Urdangarin por el caso Nóos. Una sentencia que salpicó a la monarquía en su conjunto. Sin embargo, esa imagen ha llegado para dar un giro de 180º a la situación de la monarquía y supone el regreso a la realeza de la Infanta Cristina.

La aristocracia española celebraba, el pasado fin de semana, la boda del año. El enlace entre Victoria López-Quesada, hija de Cristina de Borbón-Dos Sicilias y ahijada del Rey Felipe, y Enrique Moreno de la Cova, contó con la presencia de numerosos rostros de la corona, entre los que no faltaron el rey Felipe VI, las Infantas Cristina y Elena y la Reina Sofía. La fecha señalada marcó un punto de inflexión inédito para la Corona española al aparecer, juntos y en un coche, el Rey y su hermana, la Infanta Cristina.

Tras un año de coincidencias y reuniones varias, pero sin foto conjunta que lo atestiguara, el marido de la Reina Letizia y su hermana Cristina posaban juntos ante las cámaras a su llegada a la finca Soto Mozanaque, situada a las afueras de Madrid, donde tuvo lugar la celebración. Los hermanos llegaban en el mismo coche conducido por Su Majestad y la Infanta en el asiento del copiloto, evidenciando así que su distanciamiento público es ya cosa del pasado.