Este fin de semana hemos podido ver a una Terelu Campos (58 años) que se abría en canal para hablar con Bertín Osborne en su programa homónimo de Canal Sur 'El show de Bertín' sobre cómo ha vivido estos últimos tiempos, un periodo acunado por la dolorosa muerte de su madre en septiembre, la televisiva María Teresa Campos.

La periodista hablaba de la muerte de su madre absolutamente atenazada por la pena, siendo evidente lo mal que lo ha pasado con su despedida y el problema que le supuesto encarar esta falta que parecía anunciada: “Ella ya estaba muy mal. Fíjate que ella pasó un cáncer hace muchos años, le dio un ictus, luego tuvo otra intervención. Pero la peor enfermedad es la de la mente, sin lugar a dudas…El cerebro la devoró por dentro y la consumió. No se alimentaba” hacía referencia, al igual que ya hizo en su participación en ‘Bake Off’ confesando que su madre “apenas comía, solo se alimentaba de dulces” aludiendo a la falta de apetito propia de la vejez, algo que padeció María Teresa Campos en sus últimos días y con lo que tuvieron que tener especial atención.

Una sonada restricción de visitas

Terelu Campos ha querido hablar de algo muy polémico y que se comentó mucho cuando saltó a los medios la noticia de que María Teresa se encontraba ya muy mayor y enferma para seguir afrontando las apariciones televisivas que llevó a cabo hasta casi el fin de sus días. El supuesto ‘aislamiento’ que vivió su madre, ya que muchas personalidades públicas comentaron el hermetismo con el que el Clan Campos gestionó su marcha.

Ya que no fueron pocos los colaboradores y periodistas que pidieron a Terelu y Carmen Borrego despedirse de ella- entre ellos, su ex compañero de plató, Jorge Javier Vázquez- pues su madre era una persona profundamente admirada en la profesión y muy querida. Peticiones que tuvieron que declinar o negar en algún momento debido a lo delicada de salud que se encontraba, así lo comentaba visiblemente emocionada sentada a la derecha de Bertín: “Cuando la gente decía si podía venir a verla, no es que lo censuráramos. Hemos hecho un acto de generosidad con personas la que querían mucho, para que no la vieran así y se quedasen con una imagen de ella que no le representaba en nada”.

María teresa Campos y Terelu Campos en una foto de archivo de la Semana Santa en Málaga

María teresa Campos y Terelu Campos en una foto de archivo de la Semana Santa en Málaga.

Gtres

Así reconocía como habría tenido que explicarse tras una negativa, en concreto la que dio al popular presentador del extinto programa 'Sálvame', que pedía despedirse de la comunicadora que no pareció sentarle muy bien según reconoció Terelu Campos: "Se lo decía mucho a Jorge. Si ella disfrutara porque tú estás… Pero es que te vas a comer el mal rato. Ella no solo no va a disfrutar, sino que igual te mira y te dice: ‘¿Quién eres?’. En ese sentido, yo creo que hubo un momento que ella sabía que se iba, a pesar del terror que le tenía a la muerte..."

Una frase que recordará de por vida

Terelu siempre ha puesto en valor el cariño que recibió su madre hasta el fin de sus días, algo que tuvo que dosificar por el bien de su cabeza que no podía hacer frente ya a tantos estímulos, esto le ha acarreado problemas personales en cuanto a cómo fue vista en estos últimos tiempos, pero para ella, según confesaba a un interesado Bertín, había sido vital acompañar a su madre de una forma ordenada, con rutinas que dieran sentido a su realidad, cada vez más difusa: "A mí, como diez días antes, sentada en su casa, me miró y me dijo: ‘No puedo más’.

Aquella frase la tengo todavía metida aquí dentro", decía al presentador, que quiso saber si esta frase se debía a un malestar emocional o físico. Terelu respondía haciendo memoria: "No, ella se levantaba sufriendo y se acostaba sufriendo. Tenía momentos de consciencia pero es una enfermedad en la que es muy difícil ayudar. Los médicos te dicen: ‘Esto nunca va a mejor, siempre va a peor’. Las enfermedades neurológicas son complejas. Deberíamos concienciarnos mucho más, que nos prepararan para ello, Bertín" decía al borde de las lágrimas.

Y es que a la marcha de su madre, no se acostumbra todavía, de hecho, aún sigue transitando por el dolor de esta pérdida, cada día un poquito mejor, cada día más entera. De este terrible final de año solo espera sanar heridas, para poder hacer vida normal sin que el dolor de su falta paralice su vida.

Así a solo unas semanas de la Semana Santa andaluza, este año se obligará así misma a visitar el 'Cautivo de Málaga', devoción que le inculcó su difunta madre y a la que todavía le cuesta enfrentarse: "He ido pasando el luto en el último año. Cuando fui el año pasado, solo pude estar dos días, el domingo y el lunes. Le pedí al Cautivo y a mi Virgen de la Salud que se llevara a mi madre", un alegato nada fácil de confesar que sacaba el lado más tierno de un Bertín que parecía sostener a la tertuliana con sus preguntas nada intrusivas y delicadas.