Las malas noticias han marcado las últimas horas dentro del panorama nacional. Si bien hace unos minutos se daba a conocer la muerte de Jimmy Giménez-Arnau, ahora ha podido saberse también que Luis Ortiz, exmarido de Gunilla von Bismarck, ha perdido la vida a consecuencia de un cáncer de próstata. Tras una larga lucha, finalmente el “emblema de Marbella” no ha podido ganar la batalla a esta durísima enfermedad.

Luis Ortiz y Gunilla von Bismarck en un photocall

Luis Ortiz y Gunilla von Bismarck en un photocall.

Gtres

El cáncer de próstata ha acabado con la vida de Luis Ortiz, el "emblema de Marbella"

Tal y como ha revelado Pilar Eyre, Luis Ortiz ha muerto este martes, 17 de septiembre, en pleno tratamiento por el cáncer de próstata que padecía. Tras haber vivido un verano rodeado de sus seres queridos y en su querida Marbella, finalmente ha perdido la vida, sumiendo a sus seres queridos en la más absoluta tristeza. También a quienes les parecía habitual verle en la ciudad malagueña, pues en vida fue todo un emblema dentro de esta y un rey de la noche en toda regla. De hecho, junto a su mujer fueron dos de las personas más retratadas de la ‘jet set’. 

Por ahora, se desconocen más detalles sobre este triste fallecimiento. Lo que sí se sabe es que el próximo fin de semana, la Iglesia de San Pedro de Alcántara se vestirá de gala para dar el último adiós a Luis. Hasta allí se trasladarán sus más allegados, quienes no perdieron detalle a su evolución mientras padeció cáncer. También su esposa, que ha sido uno de los pilares fundamentales de su vida hasta su último aliento, y así lo ha revelado él siempre que ha tenido oportunidad de hacerlo públicamente. 

Luis Ortiz y Gunilla von Bismarck como reyes de la noche marbellí

Luis Ortiz y Gunilla von Bismarck como reyes de la noche marbellí.

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Los seres queridos del exmarido de Gunilla von Bismarck preparan su último adiós

No hay duda de que Luis ha luchado hasta el último momento por salvarse del agresivo cáncer que padecía. Su energía le ha permitido acudir a eventos con su esposa mientras permanecía inmerso en su tratamiento semanal contra la enfermedad en cuestión. Algo que llamaba la atención del resto de personas con las que se encontraba, y que demostraba que, incluso en la situación más convulsa, Ortiz luchaba para defender su papel como un referente inigualable en Marbella.

Cabe destacar que también ha contado con el apoyo de su hijo Francisco. Aunque el joven ha permanecido alejado del foco mediático y totalmente al margen de la popularidad de sus padres, sí que pudo cumplir su sueño de formar una familia con la que reside en Estados Unidos. El nacimiento de sus nietos llenó de felicidad a Luis, que se sumergió de lleno en su nuevo rol y dejó a un lado las fiestas duraderas a las que acudió durante su juventud en Marbella en compañía de Gunilla von Bismarck. 

El declive en la vida de Luis a consecuencia de la enfermedad que padecía

Poco a poco, la enfermedad fue haciendo mella en la vida de Luis, hasta el punto de impedirle llevar una vida tan ajetreada como en antaño. Desde el pasado mes de abril, el “emblema de Marbella” había permanecido más alejado de la vida pública que de costumbre, pues poco a poco su situación fue siendo delicada a consecuencia del tratamiento por el cáncer que padecía y que ha acabado con su vida. Podría decirse que una de sus últimas apariciones tuvo lugar con motivo del aniversario del Marbella Club, uno de los lugares más destacados de la ciudad que durante tantos años acogió a Gunilla von Bismarck y a su exmarido, que, pese a su divorcio, permanecieron tan unidos como de costumbre. 

De hecho, para conocer el inicio de su historia de amor hace falta viajar en el tiempo hasta el 1972. Hace más de cinco décadas, Luis y Gunilla comenzaron a salir y rápidamente se convirtieron en dos de los grandes protagonistas de la noche marbellí. Tal era la buena sintonía que había entre ellos, que seis años después decidieron sellar su amor dándose el ‘sí, quiero’ en una ceremonia que duró tres días, y abandonaron temporalmente la ciudad malagueña para disfrutar de una luna de miel en América. 

No tardó en llegar a sus vidas Francisco, su hijo en común. Pese a las muchas salidas de ocio que llevaron a cabo sus padres, ambos supieron compaginar su fama con su faceta familiar a las mil maravillas. Por aquel entonces, el nacimiento del bebé supuso un motivo de alegría dentro de la jet set nacional e internacional, pues incluso fue amadrinado por la mismísima Silvia de Suecia. De inmediato, la atención del matrimonio fue a parar en el pequeño, y aunque hubo un momento en el que decidieron tomar caminos separados, han seguido formando un tándem de los más consolidados dentro de nuestras fronteras, motivo por el que ahora cientos de personas lamentan la muerte de Luis.