Mayte García, ex de Cañizares, rota al hablar de la muerte de su hijo de 5 años: "Señaló al cielo y me dijo que se iba a morir"

Santiago Cañizares y Mayte García tuvieron que enfrentarse a lo peor que unos padres pueden vivir:la muerte de su hijo. Fue en el año 2018 cuando Santi, de tan solo 5 años, falleció a consecuencia de un tumor cerebral. Una noticia que dejaba completamente devastados a sus padres y a todo su entorno. Nadie está preparado nunca para algo así. Un par de años después de la trágica pérdida, Santiago y Mayte rompieron su matrimonio y continuaron sus vidas por caminos separados. "Tanto Mayte como yo, queremos comunicaros que estamos pasando por un proceso de separación. Por el respeto, cariño, y apoyo que nos habéis procesado, sobre todo en los momentos duros, nos sentimos en la obligación de ser nosotros quien os lo transmitamos", aseguraron en un comunicado.

Ahora, un tiempo después, Mayte García se sienta con Cruz Sánchez de Lara en  Madres: desde el corazón, donde habla del peor episodio de su vida: la muerte de su hijo. "La muerte de un hijo no se supera nunca, pero se aprende a convivir con ella. Te puede más el amor que el dolor por su ausencia". Con estas palabras, Mayte comienza su desgarrador testimonio en Mitele. La ex del futbolista ha contado cómo fue todo el proceso y cómo le diagnosticaron el tumor cerebral que acabó con su temprana vida. Todo comenzó con un diagnóstico erróneo de meningitis vírica que los médicos mantuvieron "hasta que le dio una convulsión y entró en coma". 

Mayte García revela cómo conocieron el diagnóstico de la enfermedad que padecía su hijo

Mayte asegura que todo empeoró en la víspera del día de Reyes, cuando se dieron cuenta de que “no había reversión para ese coma y decidimos cambiarlo de hospital”. En este nuevo centro médico, llegó la peor de las noticias. Un médico les aseguró que el diagnóstico era erróneo y que bien “o era una enfermedad rara o un tumor cerebral”. Finalmente, fue la segunda de las opciones. 

“Y casualmente el lunes por la mañana, dos horas antes de que llegara todo el equipo médico le dieron dos infartos cerebrales. Entonces, yo estaba con Santi padre dejando a mis hijas en el colegio y nos llamaron y nos dijeron: ‘¿familiares de Santiago Cañizares? Por favor, vengan corriendo al hospital que su hijo se está muriendo yha entrado en quirófano a vida o muerte’”, ha recordado Mayte García, completamente devastada al recordar uno de los peores momentos por los que ha tenido que atravesar. ”Mi hijo se podría haber muerto aquel día y no se murió porque tenía una misión, que era dejarme un legado", ha continuado diciendo, muy orgullosa. 

"Siempre te aferras a la esperanza, pero en un instante se te para la vida", ha asegurado. Además, ha recordado que el pequeño "hizo varios intentos de despedirse... Le dieron varias paradas cardiorrespiratorias y yo me volvía loca. Salía al pasillo del hospital gritando ‘por favor, salvad a mi hijo’".

Mayte García relata cómo se despidió de su hijo antes de su muerte

Finalmente, el niño estaba preparado para marcharse y así se lo hizo saber a sus padres. "Para mí lo más difícil fue despedirme de mi hijo. Él todo el rato se tocaba el pecho y me señalaba así con el dedo hacia arriba y yo le decía: ‘Santi, ¿te duele el corazón, te duele el pecho?‘. Y me hacía que no con la cabeza. Y me cogía fuerte de la mano y le decía: ‘¿Quieres mucho a mamá?’ Y me decía que sí con la cabeza, pero él se tocaba y todo el rato levantaba el dedo así, y yo le decía: Santi, te voy a hacer una pregunta: ¿me estás diciendo que te vas a ir al cielo? Nunca le había hablado de la muerte y me afirmó con la cabeza". 

También ha recordado como su exmarido, Santiago Cañizares, le pidió que dejara a su hijo marchar: "(Santi) me cogió la mano y me dijo: ‘Estás siendo egoísta. Tu hijo aguantó aquí 18 meses por ti. Haz una reflexión interior de todo lo que te ha enseñado, yo creo que es hora de que lo dejes marchar’". Como despedida, Mayte le dio las gracias "por todo lo que había hecho en este tiempo, por haberme elegido como madre y por haber soportado tanto sufrimiento por haber hecho esta unión familiar". 

Siete años después, hace un balance de cómo ha sido afrontar el peor momento de su vida: "Soy feliz, he conseguido ser feliz otra vez y pensaba que no lo iba a conseguir, pero lo he conseguido, porque creo que mis hijas necesitan que yo sea feliz y quiero que ellas crezcan felices. Entonces, necesito que crezcamos juntas en este proceso y, además, me he mentalizado en ello y tenemos que ver como que hemos sido elegidas y tocadas por una varita para que seamos conscientes de lo que verdaderamente importa en la vida".