Kiko Rivera (40 años) está inmerso en la promoción de su último 'single', 'Malibú'. Hacía tiempo que no veíamos tanto al hijo de Isabel Pantoja en medios de comunicación. Hace unas semanas acudió a 'La Resistencia', de David Broncano, en Movistar+, donde se confesó sobre el momento más incómodo vivido con su madre. Ahora, a propósito de su última entrevista en el podcast 'La de trabajar... ¿Te lo sabes?", de Marina Rivers, el DJ se ha sincerado como nunca sobre sus problemas económicos y su época más 'extrema'. 

El recuerdo de Isabel Pantoja, muy presente en el relato público de su hijo

La vida de Kiko Rivera ha dado un vuelco desde el último año después de que tuviera que pasar por quirófano para someterse a una operación de corazón. Tras el susto, el hijo de Isabel Pantoja tomó la decisión de mantenerse en un segundo plano, alejado de las polémicas que rodean a su familia, y centrarse en su mujer, Irene Rosales, y sus hijos, además de en su carrera profesional. Dicho y hecho. El artista y la tonadillera no mantienen ningún tipo de relación, lo que no le exime de acordarse de ella en cada entrevista que concede. O, como mínimo, de mencionarla. 

Eso mismo es lo que pasó en el formato que presenta Broncano, donde compartió una sorprendente anécdota de cuando era adolescente y su madre, inmersa en su gira 50 Aniversario, le 'cazó' en una situación bastante íntima que ahora define como "vergonzosa". A" mí me pilló haciéndome una pa... Me pilló justo en el momento que iba a terminar y acabé mirando a mi madre (mientras sucedía)", compartía entre risas y ante la mirada atónita de Broncano. A la que no se refiere en ningún caso de manera pública es a su hermana Isa Pantoja, que recientemente compartió su nueva ilusión junto a su marido, Asraf Beno. Los dos hermanos no mantienen vínculo alguno que se extiende a sus familias y sus respectivos hijos, primos entre ellos. 

Kiko Rivera

Kiko Rivera. Gtres

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La sombra artística de Isabel Pantoja que pesa a Kiko Rivera: su gran deseo

Para Kiko Rivera no ha sido fácil ser 'hijo de'... Menos de Isabel Pantoja, una de las cantantes más reconocidas y con mayor trayectoria de nuestro país, al margen de los escándalos, sus relaciones amorosas y su paso por la cárcel. "Tienes que demostrar más que los demás y siempre me ha costado mucho. Me han tachado de flojo, de no trabajar y es costoso aguantar todo eso", ha comenzado diciendo el marido de Irene Rosales. "Mi madre me tuvo muy reservado. No me dejaba salir mucho y no entendía por qué. Hoy puedo llegar a entender que era por miedo a que me pasase algo por ser su hijo. Me costó mucho entenderlo y cuando cumplí 18 años, me marché de casa y no volví más", ha recordado Kiko Rivera. 

A pesar de haber vivido siempre frente al ojo público, el DJ reconoce que, en estos momentos de su vida, le gustaría que su familia no fuera conocida, de ahí que cada vez opte más por proteger más la intimidad de las hijas que tiene con Irene Rosales (recordemos que Kiko tiene un hijo con Jessica Bueno). "Preferiría que mi familia fuese anónima. Yo apenas nací, estaba ya en el telediario. Al estar tan acostumbrado a eso, hice lo mismo con mis hijas hasta que me di cuenta de que debería dejarlas elegir cuando sean mayores. Aunque sean mis hijas, nietas de Isabel Pantoja, que decidan qué rumbo quieren seguir y es la mejor decisión que hemos tomado", puntualiza. 

El verdadero motivo del giro radical de vida de Kiko Rivera

Otro de los aspectos que ha querido resaltar Kiko Rivera durante su íntima entrevista es la ausencia de su padre. Una falta que siempre le ha pesado y, incluso ahora, en sus años de adultez. "Lo principal que me ha faltado ha sido mi padre. Cada vez que tengo tiempo libre intento invertirlo en mis hijas, porque a mí me faltó eso", compartía el DJ en referencia a Paquirri. 

Durante su conversación con Marina Rivers, el hijo de Isabel Pantoja ha recordado su época más extrema, cuando llegó a malgastar en su "mala vida" la friolera de 8 millones de euros. Una fase de su vida con la que rompió después de sufrir un ictus en 2022.  "Ahí mi vida da un vuelco y pude centrarme más en mi faceta de músico, porque el Kiko Rivera personaje estaba por encima siempre de mi faceta de músico o de DJ. Me vi de tener cero euros en mi cuenta a empezar a ganar muchísimo dinero. Llegué a gastar en mala vida 8 millones euros. Me he gastado mucho en fiestas, drogas y todo lo que está dentro del círculo vicioso", ha sentenciado.