El controvertido caso 'Ylenia Carrisi' continúa en el candelero y vuelve a convertir a Lydia Lozano en noticia después de 15 años. Mikel Barsa, quien dice haber sido durante muchos años representante de Albano, se ha sometido al polígrafo para desvelar el dato más deseado de todo este asunto, la fuente de la periodista. Un nombre que la colaboradora ha mantenido en total secreto durante todos estos años.
El cantante ha negado a través de Jimmy Giménez Arnau que Mikel Barsa haya sido representante o mánager del cantante. Unas palabras que Mikel contestaba señalando que podía probar con documentos que sí lo había sido. Mientras que Lydia Lozano subrayaba que ella no había sacado, de nuevo, este tema y se mostraba afectada por convertirse otra vez en noticia.
Entre las confesiones que ha realizado Mikel Barsa, ha dicho que Albano conocía la información de la supuesta Ylenia de Santo Domingo antes de que llegara a Lydia Lozano. "El único error que comete lidia es decírselo a Albano antes de comenzar la investigación", ha explicado. Asimismo, ha negado que él tuviera sobre la mesa una oferta millonaria para guardar silencio y no dar más datos. Añadía que el cantante le amenazó con demandarle si no dejaba de aportar más detalles.
Respecto a la desaparición de Ylenia, ha manifestado que tiene pruebas de que utilizó su tarjeta de crédito meses después de que se la diera por muerta. Un punto clave, aún desconocido, es la fuente de Lydia. Mikel ha negado que fuera Linda Christian, abuela de Ylenia, y ha confirmado que sabe quién es realmente ya que durante aquella época él permaneció al lado del artista como su representante.
Se ha mostrado rotundo al señalar que estaba dispuesto a revelar la fuente con el único objetivo de salvar su honor y reconocía que nunca antes había sido desvelada. Según los detalles que ha aportado se trata de un hombre famoso que tiene ciudadanía italiana o suiza. Sin embargo, finalmente no ha dado el deseado nombre.
"Albano no es una buena persona"
Según Mikel Barsa, hubo un pacto entre Lydia y Albano para no volver a hablar del tema y zanjar de una vez todas este asunto. Respecto a esto, la colaboradora ha preferido no responder visiblemente molesta. El exrepresentante de Albano ha afirmado que su relación profesional con el cantante se rompió después de que discutieran por cuestiones económicas. Guarda un buen recuerdo en el plano profesional del italiano y le coloca como uno de los artistas más importantes, pero señala que "no es buena persona. No cumple sus compromisos".
Jorge Javier Vázquez ha confirmado que 'Sábado Deluxe' se había puesto en contacto con Albano quien no había descartado acudir al programa. El presentador preguntaba a Lydia si se sentaría en el plató durante una entrevista y ella recordaba que él fue quien se negó a que ella estuviese a su lado. Si esta vez no se opusiese, Lydia no sabe si accedería a estar presente.
Las últimas semanas han sido muy complicadas para la colaboradora haciendo frente, una vez más, al mayor punto negro de su currículum profesional. La hija de Albano y Romina Power desapareció en enero de 1994 cuando tenía 24 años. Cabe recordar que la periodista dijo un año después que estaba viva. Una información que provocó un profundo malestar por parte del cantante. Corría el año 2005 y la periodista se convirtió en el foco de la noticia, afirmó que Ylenia vivía en Santo Domingo y tenía dos hijos. Como consecuencia de este caso, tuvo que pedir perdón públicamente: “Me he apoyado en personas que me han engañado y lo reconozco”.
Como consecuencia de este asunto, Lydia ha mantenido importantes discusiones con sus compañeros de 'Sálvame' entre ellos con Mila Ximénez. Esta la tachaba de ser una "resucita niña" durante la emisión de 'La última cena'. Una afirmación que provocó un fuerte enfrentamiento e hizo que Lydia abandonara el plató de Mediaset. La colaboradora, en pie de guerra, ha calificado su actitud de «indecente»: «Hay que aceptar las críticas. Fue ayer desmesurada. Es la primera vez que yo abandono un plató», se explicaba muy sentida. Además, indicaba que la manifestación de su compañera fue a conciencia: «Mila no tiene un pelo de tonta». Jorge Javier intentaba calmar los ánimos: «Lo vais a solucionar. Vais a hablar y lo vais a arreglar», afirmaba rotundo.