Ana Obregón nos ha hecho salir de dudas definitivamente. Este miércoles ha confirmado las sospechas de todo un país: la pequeña Ana Sandra es, además de su hija, su nieta. Una semana después de que SEMANA adelantara en exclusiva que se había convertido en madre a los 68 años, ha revelado que la pequeña es descendiente de su único hijo, Aless Lequio, fallecido el 13 de mayo de 2020. Con el nacimiento de la niña cumple así con la última voluntad de Álex, quien dejó claro antes de morir que quería tener hijos. El bebé nació el pasado 20 de marzo en el Memorial Regional Hospital de Miami. Tiene apenas 16 días, pero la presentadora no descarta aumentar la familia. Ella ha dejado la puerta abierta. Quizás en un futuro se anime a tener más niños al mundo. ¿Nos podría sorprender en breve con la llegada de otro bebé? Basta fijarse en sus declaraciones para comprobar que la idea de darle un hermanito a la recién nacida no le parece en absoluto descabellada.
"Mi hijo quería tener cinco hijos, así que a lo mejor el niño también llega algún día", reconoce Ana Obregón
Y es que Ana Obregón ha contado en la revista 'Hola' que no rechaza la posibilidad de tener más hijos. "¿Hubieras preferido un niño?", le preguntan. Ella responde rotunda: "Hombre, me hubiera gustado también un niño, pero ¿quién sabe? Mi hijo quería tener cinco hijos, así que a lo mejor el niño también llega algún día".De cumplir este sueño, Ana daría un cambio aún más radical a su vida. El nacimiento de Ana Sandra ha sido un revulsivo para ella. Con la pequeña ha recuperado de nuevo la ilusión y las ganas de vivir. Ella misma admite que cuando la tiene en brazos le recuerda, de manera inevitable, a su hijos Aless: "Lo que siento cuando la abrazo es como que abrazo a mi hijo, porque en el fondo estoy abrazando a mi hijo. Es lo único que me queda vivo de él".
Ana ha cumplido la última voluntad de su hijo Aless con el nacimiento de la pequeña Ana Sandra
Para Ana Obregón lo único que importa ahora es su niña. Una niña a la que criará con el amor de una abuela, aunque legalmente esté registrada -al menos en Estados Unidos- como su hija. Con su nacimiento se hace realidad el último sueño de su hijo. "Nadie en el mundo puede poner en duda que cuando una madre entierra a su hijo tiene que cumplir su última voluntad", asegura. "Si hay opiniones en contra, yo no aguanto ninguna, ni voy a admitir ninguna. Nada más que la de un padre o una madre que hayan enterrado un hijo. Solo ellos son los que pueden opinar y los que me pueden entender", añade em el citado medio. Deja claro que no le importa lo que digan de ella, porque tras casi tres años de profundo dolor y duelo, por fin ve salida al final de un oscuro túnel en el que solo ha conocido el sufrimiento.De ahora en adelante se ve con fuerzas suficientes para celebrar de nuevo la vida: "Desde que Aless no está, yo no he vuelto a celebrar mi cumpleaños ni la Navidad ni nada. Pero ahora voy a celebrarlas. Voy a celebrar Papá Noel, los Reyes Magos y mis cumpleaños", ha dicho radiante de felicidad. El tiempo dirá si en las próximas Navidades, o en los próximos cumpleaños, se sume un nuevo miembro a este nuevo y recién estrenado núcleo familiar. La bióloga más famosa de España no dice 'no' a tener más descendencia tras la llegada de Ana Sandra. "Puede ser, puede ser", sentencia.