Dos y meses y medio después, Antonio David Flores regresa a casa con su mujer, Olga Moreno. El concursante de ‘GH Vip 7’ se despidió este jueves de sus pretensiones de llevarse el preciado maletín del reality, pero lo hizo con la mayor deportividad posible y orgulloso no solo de su paso por el concurso, sino también de cómo su hija, Rocío Flores, se había defendido en plató. Fue toda una sorpresa para él ver cómo su “rubia” se desenvolvía ante las cámaras, motivo por el cual terminó por crecerse, colocando a cada uno de sus enemigos en su sitio.
Esta vez, Olga Moreno no ocupó un papel protagonista en la gala de ‘GH Vip 7’, como sí hizo este martes, cuando afrontó el reto de realizar un alegato a favor de la permanencia de su marido en la casa. Pese a que no pudo ser y la audiencia ha preferido seguir apostando por Adara como favorita, Olga esperaba entre bambalinas a Antonio David Flores para recibirle como Dios manda después de dos meses y medios sin abrazarse y besarse.
Ahora valora aún más la unión de su familia
Este tiempo que han permanecido separados les ha venido de lujo. Tal y como ha reconocido el propio Antonio David Flores, quería aislarse en ‘GH Vip 7’ no solo para sanear sus cuentas, sino también su mente después de casi 20 años de enfrentamiento con su exmujer, Rocío Carrasco, que aún no han llegado a su fin. Esta lucha le ha mermado mucho la moral, tal y como él y su entorno han afirmado en numerosas ocasiones, pero también quería demostrar que su familia es fuerte y puede “tirar para adelante” sin él, aunque al pronunciar estas palabras su hija, Rocío Flores, negase con la cabeza a la vez que se secaba las lágrimas.