Han pasado casi dos semanas desde que uno de los hermanos de Carlo Costanzia, Pietro, fue detenido por el presunto intento de asesinato a un joven. Al parecer, el hijo de Carlo Costanzia padre habría agredido a la víctima con un machete, hasta el punto de que a esta última incluso le han tenido que amputar la pierna por debajo de la rodilla. Como no podía ser de otra manera, la noticia ha revolucionado Italia y no dejan de salir a la luz detalles que ponen en un verdadero aprieto a la mediática familia.

Lugar en el que sucedieron los hechos en Turín

Lugar en el que sucedieron los hechos en Turín.

Gtres

Mientras Pietro Costanzia y su hermano Rocco permanecen en prisión por el presunto ataque en cuestión con arma blanca, hay dos hipótesis sobre la mesa que podrían ir de la mano. Una de ellas es la de los celos, y otra un posible ajuste de cuentas en relación con el narcotráfico. Dos alternativas que dejan en muy mal lugar a los dos jóvenes implicados y por las que han sido cuestionados tanto en la vía pública como en televisión Carlo y Alejandra Rubio.

Dos de los últimos testimonios que han salido a relucir y que podrían dar un giro de 180 grados al caso son el de la novia de la víctima y el de un amigo de Rocco. Ambos han confirmado las sospechas de la Fiscalía y también las de la jueza instructora, Gloria Biale. Tanto es así, que esta última ha considerado que la agresión fue supuestamente “premeditada” y estuvo pensada “hasta el mínimo detalle”. Así lo ha podido saber el diario ‘Corriere Torino’, lo cual deja a los implicados en una situación muy compleja frente a la Justicia.

Carlo Costanzia, en una foto de archivo

Carlo Costanzia, en una foto de archivo

Gtres

Las dos versiones que han dado un giro de 180 grados en el polémico caso

Según el amigo de ‘El Santo’, como se conoce también a Rocco Costanzia, él llegó a la via Panizza con el objetivo de aliviar tensiones y que todo quedara en una simple disputa. Sin embargo, era conocedor de que su hermano Pietro tenía otros planes, pues había hablado con él a primera hora de la tarde para comentarle que había localizado a Omar, la víctima, y que “quería destrozarle”. Mientras que este último llegó al lugar de los hechos en un vehículo alquilado, los hermanos de Carlo Costanzia lo hicieron en la scooter del más pequeño, razón por la que fue detenido como presunto cómplice. 

Por si fuera poco, el testigo que ha declarado ha asegurado que Pietro tenía “un arma”, lo que hace que puedan ser aún más claras sus intenciones en ese encuentro con el otro joven. Además, tal y como ha confirmado el medio mencionado previamente, el joven pidió a través de un mensaje de WhatsApp a las 18:40 que borraran las conversaciones de un chat grupal.

Sin embargo, la novia de Omar ha contradicho con sus palabras esta última versión. Ella ha asegurado que Rocco es tan culpable como Pietro, ya que al conducir la moto hacia la zona de Miafiori, evitó que ella pudiera intervenir en el asunto e intentar aliviar el altercado, pues era su objetivo. La joven tiene claro que las intenciones de ‘El Santo’ eran muy similares a las de su hermano, mientras que el presunto cómplice en su interrogatorio aseguró que había adoptado una postura muy conciliadora incluso abrazando a la chica para que estuviera tranquila en todo momento. 

El nuevo testimonio que contradice a Pietro y Rocco Costanzia

A estas declaraciones se han sumado las de una nuevo testigo. Benítez ha asegurado en ‘TardeAR’ que, como vecino de la zona y residente del edificio de en frente, vio todo lo que sucedió aquella tarde del 18 de marzo. La fuente ha comentado que Pietro y Rocco llegaron en la famosa scooter en torno a las 17:30 de la tarde del día en cuestión, y que no tuvieron reparo en acercarse a un chico y una chica que estaban con un monopatín: “El que iba detrás de la moto cogió un cuchillo muy grande, no sabría decirte las dimensiones, y le dio un golpe e hizo que se cayera”. Además, ha añadido que “el que iba conduciendo” se bajó “y le volvió a dar otra vez”

Sea como fuere, si algo está claro es que este testimonio sitúa a los hermanos de Carlo Costanzia como culpables por igual del presunto intento de asesinato. Sin embargo, será la jueza quien tenga la última palabra de un asunto que ha corrido como la espuma en todos los rincones de Europa, y que sigue haciéndolo.