Las supermodelos de los 90 triunfaban en las pasarelas, pero fracasaban en su vida personal: la que no encadenaba noviazgos confesaba abusos o trastornos alimenticios. Y muchas, todo a la vez. Menos una: Judit Mascó lo fue todo en la moda y ha tenido la suerte de contar con una vida personal plena. Lleva más de 30 años con su marido, el abogado Eduardo Vicente y cuenta con cuatro hijas con muchísimo rollazo: María, Paula, Romita y Clara. Conocemos a todo el clan.
Se casó en 1993 en un castillo
Judit, que actualmente tiene 54 años, conoció a su marido cuando era casi una niña, con 19 años: ella se abría camino en el mundo de la moda y él era un estudiante de Derecho amigo de su hermano. Cuatro años después, el 23 de julio de 1993, se daban el sí quiero en la ermita del castillo de Sant Lluís de Rístol, en la localidad barcelonesa de Viladecavalls.
“Fue una boda muy íntima, muy nuestra, muy de verdad. Recuerdo que en la ceremonia religiosa fuimos nosotros mismos, y no el sacerdote, quienes nos preguntamos uno al otro y mirándonos a los ojos si nos casábamos libremente, si queríamos estar juntos hasta el final... ", ha recordado la maniquí. Para no hacerle el feo a ninguno de los diseñadores para los que trabajaba habitualmente, Mascó recurrió a la modista de toda la vida de su madre que le confeccionó un vestido inspirado en Grace Kelly.
“No hay secretos ni fórmulas: un matrimonio funciona o no funciona. Eduardo y yo somos dos personas que, una vez pasado el enamoramiento de los primeros años, siguen avanzando por el mismo camino y juntos con los mismos principios y valores”, explicaba hace unos años.
Su hija mayor, María, es artista plástica
La pareja esperó cinco años en tener descendencia y ha criado a toda su prole lejos de la atención mediática. Su primera hija llegó al mundo en 1998 y se llama María. Durante un tiempo intentó seguir los pasos de su madre sobre las pasarelas e incluso en el 2017 desfiló en la pasarela 080 para la firma Custo Barcelona.
Sin embargo, ha encontrado su hueco en el mundo de las artes plásticas y firma sus creaciones con el seudónimo de 'Fräulein Maria'. Estudió Diseño Gráfico en EINA, el Centro Universitario de Diseño y Arte de Barcelona y en sus redes sociales demostra su enorme talento en la que cuelga sus collages, fotografías y videocreaciones. María asegura que entiende el arte como un canal de comunicación fluido, expresión salvaje y cura poética.
Paula, una prometedora actriz
Le siguen “en la línea de sucesión” su hija Paula, de 24 años. Cuenta que desde pequeña la llevaban al teatro con sus hermanas y hacían sesiones de cinefórum en casa, por lo que descubrió su faceta interpretativa desde bien pequeña y empezó a formarse en escuelas de interpretación de la Ciudad Condal.
A los 19 estrenó por primera vez en Barcelona una obra de teatro que llegó a Madrid (Teatro del Barrio) un año después. La mayoría de sus papeles han sido en películas y series del circuito catalán.
Romitha, una joya haitiana
La tercera hija de la modelo es Romita. Judit y Vicente la adoptaron en 2003 en Haití tras pasar los 18 primeros meses de su vida en un orfanato. "Eduardo y yo siempre tuvimos claro que algún día adoptaríamos, pero después de tener hijos biológicos", dijo entonces la modelo.
Romi, como la llaman en la familia, se he dedicado muchos años a la hostelería y, como a sus dos hermanas, le gusta muchísimo el diseño y el arte en general y, sobre todo, el mundo relacionado con el mueble. Por eso estudió un módulo de carpintería y posteriormente un curso en la Escuela Superior de Arte y Diseño de Barcelona, igual que hizo su hermana María.
La benjamina de la casa, Clara
Los Vicente Mascó obtuvieron los grandes beneficios que aporta el carné de familia numerosa especial en 2006: ese año nació la benjamina, Clara. El pasado mes de abril cumplió la mayoría de edad y de ella sabemos bien poco: estudió durante un año en Canadá y ha heredado las capacidades fotogénicas de su famosa madre, tal y como vimos en una foto que ella misma colgó.
La modelo explica que ver crecer a sus cuatro hijas ha sido la mejor experiencia de su vida. "Me encanta ser madre de familia numerosa. Cuando eres madre, lo único que quieres es que sean felices. Ellas, por ahora, no han mostrado interés en ser modelos. Lo único que me gustaría es que, lo que decidan hacer, lo puedan hacer y que eso les haga felices, que es lo que yo hice", contaba en una entrevista hace algún tiempo.