Después de sufrir un desmayo en plena calle, y de haber pedido a Sofía Suescun que entierren el hacha de guerra, Maite Galdeano ha llevado a cabo un nuevo movimiento 2.0. En esta ocasión lo ha hecho de la mano de su madre, que hasta ahora había permanecido en un segundo plano mediático, probablemente por su estado de salud. Y es que, a juzgar por las últimas publicaciones de la de Pamplona, todo apunta a que su progenitora vive en una residencia.
El durísimo dardo de Maite Galdeano a su hija: "El amor de una madre perdura toda la vida"
“A visitar a la mama”, ha escrito Maite Galdeano, para después compartir una serie de imágenes junto a ella y revelar que “se pone super contenta” cuando la ve. Mientras tanto, la anciana ha posado ante la cámaras muy sonriente desde la silla de ruedas que utiliza para moverse. Y como no podía ser de otra manera, la exconcursante de 'Gran Hermano' ha querido lanzar un dardo en toda regla a Sofía Suescun, aprovechando que se ha reencontrado con la abuela de esta última: “El amor de una madre, perdura toda la vida”, ha escrito.
Oleada de críticas a la de Pamplona por sus innumerables intentos de captar la atención de su hija
Hace tan solo unos días, Maite volvía a visitar a su madre, de quien nunca había publicado nada en sus redes sociales. En un vídeo, la de Pamplona aparece dándola de comer: “Una madre es para toda la vida y el amor es infinito”. Sin embargo, muchos de sus seguidores no terminaron de creerse esta repentina muestra de cariño a su progenitora: “Con cada publicación entiendo más a tu hija”, “¿Desde cuándo no ibas?”, “Madre mía, ahora te acuerdas de tu madre” o “No puedes caer más bajo. Utilizar a tu madre, una persona mayor. Deleznable”, eran algunos de los comentarios que Galdeano recibía en su publicación de Instagram.
Sofía Suescun, al límite por su madre
Para una gran parte de sus fans, los gestos que está llevando a cabo Maite simplemente son intentos por llamar la atención de su hija. Y en algunos momentos, como hace unos días, lo ha conseguido. Tanto es así, que Sofía Suescun compartía un selfie con lágrimas en los ojos y visiblemente triste por la situación que está viviendo con su madre: “A veces siento la responsabilidad de mostraros solo las partes positivas de mi vida porque odio dramatizar y crearos por aquí un clima de negatividad. Pero a su vez me veo con la necesidad de deciros que yo también tengo días y momentos de mierda, esta mañana ha sido uno de ellos”, comenzaba.
Sus palabras no quedaban ahí, y la ganadora de ‘Supervivientes' siguió explicando cómo se siente: “No me apetece hablaros de esto porque por desgracia, terceros se aprovechan de ello con el único propósito de hacer daño. Esta noche tenía un planazo de Halloween, pero ahora mismo solo me apetece quedarme en casa con los míos y pensar que mañana será otro día y saldrá el sol”, zanjaba. Unos minutos más tarde, la joven volvía a pronunciarse, esta vez con una imagen desde el hospital que hacía saltar las alarmas: “Esta tensión he tenido durante un buen rato, hasta que me ha bajado un poquito y me han dejado irme a casa (…) En fin, no quería preocuparos esta mañana, pero ya estoy bien, así que ahora a descansar y recomponerme. Os quiero”.
Como era de esperar, Maite Galdeano reaccionaba rápidamente al empeoramiento en el estado de salud de su hija: “Estamos las dos igual de rotas. ¿Merece la pena estar así? Qué necesidad… Te amo Sofía. Daría la vida por ti”, aseguraba. Y, dado que su mensaje no tenía la repercusión que le hubiera gustado en su hija, volvía a la carga al admitir estar atravesando el mismo problema que ella: “No es por asustaros, pero así estoy ahora mismo”, confesaba, junto a una imagen en la que aparece reflejada su tensión, mucho más alta e lo normal.
Sea como fuere, al menos de momento, no parece que vaya a tener lugar un acercamiento entre madre e hija. Pese a haber formado un tándem aparentemente irrompible con el paso de los años, Sofía decidía poner tierra de por medio con Maite a consecuencia de algunos comportamientos tóxicos por parte de esta. Algo que cayó como un jarro de agua fría sobre Galdeano, que fue quien contó a sus seguidores lo que había sucedido, y no dejó de criticar duramente a Kiko Jiménez como supuesto artífice del cambio de opinión de su hija. Pero esto poco o nada importó a Suescun, que ha seguido al lado del colaborador y también de su hermano Cristian, que son ahora dos de los pilares fundamentales e indiscutibles de su vida.