Más de cuatro décadas después de la boda de Diana de Gales con Carlos de Inglaterra, el vestido de la novia continúa siendo noticia. Un diseño histórico e icónico, creado por Elizabeth y David Emmanuel, un joven matrimonio británico. Ambos han terminado recientemente su guerra legal por los cuantiosos ingresos que el traje nupcial sigue generando. Te contamos los detalles de esta fascinante historia.
Las imágenes de una joven Diana de Gales entrando en la catedral de San Pablo de Londres para dar el "sí, quiero" al entonces heredero, han dado la vuelta al mundo en un sinfín de ocasiones. Su vestido de novia es inolvidable. Una prenda en tono marfil que estaba bordada a mano. El vestido, de incalculable valor, ha pasado a la historia como uno de los diseños más influyentes.
El matrimonio que creó la prenda se separó en la década de los 90, envueltos en muchas deudas. En su proceso de divorcio fue clave el vestido de novia de la Princesa Diana y ambos se enfrentaron por este legado. David afirmó que su expareja había infringido sus derechos de autor cuando ella reprodujo los bocetos iniciales del icónico vestido de novia de la princesa Diana y los puso a la venta.
La guerra entre los creadores del vestido de novia de Diana de Gales
Una de las claves para entender la disputa entre la expareja es la subasta de los bocetos originales por parte de Elizabeth, sin el consentimiento de su exmarido. El diseño que había cimentado su negocio, provocaba las grandes disputas entre ambos.
"El proceso judicial fue realmente horrible para mí, profundamente perturbador", afirmaba Elizabeth en The Telegraph. David Emmanuel llegó hasta el Tribunal Superior de Justicia de Inglaterra para resolver el asunto. Finalmente, la expareja ha alcanzado un acuerdo amistoso, el 18 de octubre de este 2024. Ambos compartían la noticia en redes.
"Durante nuestros años juntos, David y yo hemos creado algunos de los diseños más famosos del siglo XX. El papel de David en el éxito de Emanuel Partnership ha sido fundamental y estoy encantada de que podamos disolver nuestras diferencias y continuar con nuestros respectivos caminos", explicaron en la nota difundida.
Por su parte, David Emmanuel recordó que la firma que lideraba y que fue la creadora del vestido de novia de la princesa Diana se encontraba "en el apogeo de la alta costura de los años 80" hasta su separación. "Nuestras creaciones estaban en demanda por parte de las mujeres más famosas del mundo durante este periodo. Teníamos una casa distintiva y creamos algunos de los diseños más icónicos del siglo XX".
Con la firma conjunta del comunicado concluían el conflicto de una de las casas de costura británicas más importantes de la década de los 80. El matrimonio confeccionó la prenda en secreto para que ningún detalle se filtrara a la prensa. Lo hicieron bajo el seudónimo de Deborah, con el objetivo de no despertar sospechas entre los miembros de su equipo.
Incluso se diseñó un plan B, un patrón alternativo por si se divulgaba el original. El vestido forma parte de la herencia que recibieron los dos hijos de Diana, los príncipes Guillermo y Harry. Curiosamente, es una de las pocas cosas que pertenecen a ambos. El diseño posee una estructura rígida en forma de jaula, diez mil aplicaciones de perlas, un velo de más de 100 metros y una cola de ocho.
El fin de la batalla legal supone un respiro para Elizabeth tras años de dificultades económicas. Tras su separación conservó su estudio bajo la firma de Elizabeth Emanuel. La diseñadora ha continuado vistiendo a nombres destacados de la esfera internacional, entre ellos, Madonna o Courtney Love.
En su momento, la diseñadora acusó no poder utilizar su propio nombre por la demanda de su exmarido reclamándole la marca. Resolvió el asunto hace tres años en los tribunales. Un caso que ha despertado un gran interés en Reino Unido. La BBC incluso llegó a grabar dos documentales. Emanuel perdió la audiencia que se recuerda como histórica.
La historia de amor de los diseñadores del vestido de novia de Diana de Gales
Los caminos de Elizabeth y David Emmanuel se cruzan en 1974 cuando ambos eran alumnos de la escuela de arte Harrow. Su boda llegaría poco después, fue el primer matrimonio admitido en el prestigioso Royal College of Art. Allí realizaron una maestría de dos años especializada en moda. El trabajo más destacado de su trayectoria es, sin duda, el vestido de novia de la Princesa Diana.
La recordada Diana de Gales eligió personalmente a sus diseñadores. El icónico vestido de novia creó tendencia en la época y es considero uno de los diseños de novia de la realeza británica "más influyentes de todos los tiempos", así lo destacaba la revista Time en 2018. Se exhibió hace unos años en el marco de la exposición 'Creando el estilo real' que tuvo lugar en el palacio de Kensington. Actualmente, se guarda con celo entre los grandes tesoros de la corona británica.