Han pasado casi dos meses desde que la familia Goyanes se tiñera de luto. Casi sesenta días desde que Caritina y su padre fallecieran con una diferencia de apenas tres semanas, dos durísimos golpes por los que los suyos pararon en seco sus vidas. Dejaron sus trabajos y se centraron en su dolor, que era desgarrador. Un doble duelo sobre el que hemos charlado con la psicóloga Lara Ferreiro, quien nos da las claves para intentar superar algo así. "Han pasado de ser una familia de cuatro a una familia de dos mujeres. Es terrible. No se puede pasar por dos duelos a la vez", dice en conversación con SEMANA. 

La recomendación de Caritina Goyanes que ahora Carla sigue con los ojos cerrados

Una tragedia tras la que Carla Goyanes ha regresado al trabajo. No ha sido fácil, pero era consciente de cuánto le ayudaría retomar sus rutinas para así mantener la cabeza ocupada. Un consejo que días antes de morir le dio su propia hermana. Así lo ha contado ella misma en primera persona, anunciando además el nuevo reto que tiene por delante. "Mi hermana decía que la vuelta al trabajo me iba a hacer llevar mejor lo de nuestro padre y es cierto. Mantiene la mente ocupada en otra cosa. La vida sigue y hay que seguir cumpliendo con los compromisos profesionales por responsabilidad, pero también como terapia para avanzar. Os espero a quien pueda interesar", asegura.

El nuevo proyecto de Carla Goyanes en Miami

Pero, ¿dónde trabaja Carla?, ¿se ha lanzado a nuevos proyectos para seguir adelante? Lo cierto es que sí. La hija pequeña de Cari Lapique es la nueva directora del MBA Fashion Manegement en la escuela ESDEN Business School en Miami, por lo que se encargará a partir de ahora de dirigir un equipo académico formado por expertos en moda, marketing y comunicación para formar a sus alumnos. Todo un reto que mantiene a la licenciada en Empresariales muy ilusionada. 

Aunque comienza en el mes de octubre, Carla Goyanes ya ha comenzado a trabajar y a organizar las clases. Lo que todavía es una incógnita si este empleo le obligará a vivir montada en un avión para estar en Miami o si, por el contrario, podrá teletrabajar desde Madrid. Una cuestión que todavía ha preferido no responder y es que ella vive en la capital junto a su marido y sus tres hijos, su mejor medicina en estos momentos. 

La madre de Carla Goyanes está completamente devastada

Estaría a una distancia de más de 7.000 kilómetros y, por tanto, a un vuelo de más de 10 horas de España, un asunto que no es baladí teniendo en cuenta también a su madre. Cari Lapique está devastada y, aunque intenta apoyarse en su familia y cuidar de sus nietos, necesita a sus seres queridos cerca. Ahora más que nunca.

Lo explicaba su entorno más cercano, quien decía que está muy pendiente de sus nietos, especialmente de los hijos de Caritina Goyanes, quienes viven en su mismo edificio en Madrid. Siempre fueron fundamental para ella y tras la muerte prematura de su hija eso no iba a cambiar. "Los niños están tranquilos, pero la madre sigue devastada. Se ha entregado en cuerpo y alma al cuidado de sus nietos. No se separa de ellos", aseguraron sus íntimos en 'Informalia'. 

Para Carla también está siendo muy complicado lidiar con su nueva situación personal. No es para menos teniendo en cuenta que en cuestión de 19 días perdió a su padre, Carlos Goyanes, y a su hermana Caritina, su apoyo más férreo. Solo separaban a ambas cinco años de edad, lo que hizo que estuvieran mucho más cerca la una de la otra. También que discutieran, una etapa pasada de la que ambas bromeaban con mucho cariño. 

La vida actual de Carla Goyanes y su marido

Aunque durante más de cuatro años vivió con su marido, Jorge Benguría, en Estados Unidos, en el 2015 regresaron a España. Para ninguno de los dos era fácil estar lejos de su familia y, por ello, tomaron la firme decisión de mudarse a su país natal. "Vuelvo a Madrid con mucha ilusión. Empieza una etapa emocionante", dijo entonces. No esperó el tsunami que menos de una década después arrasaría su vida. 

Quien también se está esforzando por volver a su vida es Antonio Matos, el viudo de Caritina Goyanes. Prueba de ello que de nuevo esté pisando fuerte en la correduría de seguros en la que trabaja desde hace años y que ahora, además, se ocupe de las cuentas del catering que la madre de sus hijos fundó.